Unos setenta vecinos de pisos turísticos de Barcelona cierran filas para pedir su expropiación
El Sindicato de Vivienda Socialista de Cataluña unifica la lucha de los afectados
BarcelonaTener que convivir con un piso turístico es un dolor de cabeza compartido por muchos vecinos de Barcelona. El Ayuntamiento se ha comprometido a reducir "sustancialmente" su volumen durante este mandato, pero mientras tanto algunos de los afectados comienzan a articularse por su cuenta para encontrar una solución antes. El Sindicato de Vivienda Socialista de Catalunya ha explicado este martes que lleva meses trabajando en un conflicto colectivo en este sentido y que aglutina unos setenta casos de barrios como el Raval, Ciutat Vella y el Eixample. El objetivo, subrayaron, es que se revoquen las licencias turísticas otorgadas en la ciudad.
El colectivo, según informa el ACN, ha denunciado las presiones, subidas de cuota "inasequibles" y problemas de convivencia que sufren al menos unas setenta familias de seis edificios de la ciudad. La iniciativa se ha presentado ante el bloque del número 84 de la calle Tarragona, donde a principios de 2023 una inmobiliaria intentó poner en marcha 120 apartamentos turísticos. A estas alturas hay 33 operativos y los 78 vecinos que viven dicen que sufren un auténtico "calvario". El sindicato ha avisado de que este caso es sólo un ejemplo y ha hecho un llamamiento para que todas las personas con situaciones similares se sumen a la campaña.
Con el lema "Expropiamos los pisos turísticos", la campaña que ha puesto en marcha el nuevo Sindicato de Vivienda Socialista de Cataluña (SHSC) llega a las puertas de un nuevo verano con el objetivo de denunciar las afectaciones que el actual modelo turístico tiene sobre la clase trabajadora que vive en la capital catalana. Marina Parés, portavoz del sindicato, ha avisado de que la vivienda no puede ser a la vez "derecha y mercancía".
Parés ha enumerado algunos de los problemas a los que estas familias deben hacer frente. Así, se ha referido a las amenazas constantes de desahucio, las subidas de alquiler inalcanzables, las dificultades para renovar los contratos, la proliferación de pisos turísticos, las presiones de la propiedad, los problemas de convivencia e incluso episodios en los que grupos inmobiliarios proceden a realizar obras de manera simultánea a más de treinta pisos de un mismo edificio.
Críticas a los sucesivos gobiernos de la ciudad
En este sentido, la portavoz ha criticado a los sucesivos gobiernos de la ciudad: "Tanto el gobierno progresista de los comunes como el liberal del PSC han sido promotores del modelo turístico que colapsa la ciudad". Parés ha revelado que los empresarios están obteniendo más del triple de beneficios con los alquileres turísticos que con los de residencia habitual y ha afirmado que ya hay más de 10.000 viviendas de uso turístico (legales e ilegales) en la ciudad. última regulación impulsada para limitar las licencias de uso turístico: "Ni tiene efectos inmediatos ni establece un tope suficiente para garantizar una reducción significativa del número de licencias”. Parés ha dicho que era un marco legal que continúa "naturalizando la vivienda como bien de mercado y respetando los intereses del lobi turístico y el rentaismo que se benefician de este negocio".
Por todo ello, el sindicato ha anunciado que continuará movilizado para conseguir que la administración paralice la adjudicación de todas las licencias turísticas y revoque las que ya han sido otorgadas para que se destinen a vivienda habitual. Y pidió que se renueven todos los contratos de alquiler de las personas residentes en los blogs afectados.