Catalunya quiere adelantar un día la retirada de las mascarillas en las escuelas
Argimon da por hecho que la medida será efectiva ya el 19 de abril, cuando los alumnos vuelvan de la Semana Santa
BarcelonaDespués de que el gobierno español pusiera ayer fecha a la retirada de la mascarilla en la mayoría de espacios interiores –será el 20 de abril–, el conseller de Salud, Josep Maria Argimon, ha celebrado hoy que, por fin, se haya concretado una fecha para esta medida y ha asegurado que Catalunya tiene intención de adelantarla un día en las escuelas para que los alumnos ya vuelvan de las vacaciones de Semana Santa sin mascarilla. La retirada sería efectiva el 19 de abril, que es el primer día de clase después de las vacaciones, pero solo en los centros escolares, según ha adelantado Argimon a Tv3. El conseller planteará la medida a la comisión delegada del Govern sobre covid.
Ha explicado que el Govern ya estaba preparado por si el ministerio de Sanidad no anunciaba la retirada de las mascarillas y que él mismo habría firmado una resolución para ordenar la retirada en las escuelas, que es loque se prevé hacer ahora para adelantar la medida un día. "No tenía mucho sentido mantener las mascarillas en las escuelas", ha indicado. "Lo que queríamos era una fecha, eso era imprescindible", ha añadido.
Según lo que se anunció ayer, los únicos lugares donde la mascarilla continuará siendo necesaria son los hospitales, residencias de abuelos y en el transporte público, y cada lugar de trabajo tendrá que decidir cómo aplica la flexibilización en función de la gente vulnerable que acoja. El conseller ha adelantado que en el caso del departamento de Salud, a partir del día 20 ya no será necesario que los trabajadores lleven mascarilla.
Ha indicado, sin embargo, que no se tiene que descartar "nunca" la posibilidad de tener que dar pasos atrás: "Puede haber otra oleada y no sabemos sus características".
De momento, ha asegurado que en Catalunya no se ha detectado ningún caso de la nueva variante sobre la cual ha alertado la Organización Mundial de la Salud (OMS), conocida como XE, y que sería una combinación de la ómicron y la ómicron silenciosa. Ha defendido, con todo, que es fácil que pronto se detecten casos, porque "aún hay muchísima gente que no ha tenido ningún contacto con el virus" y porque lo "normal" es que cada nueva variante tenga fortalezas como por ejemplo transmitirse más rápido o escapar más de las vacunas o, incluso, las dos cosas.