Fauna salvaje

Crece el miedo a la loba "seductora" del Empordà: los ganaderos temen que se reproduzca y los ataques aumenten

Los asaltos de esta especie han causado ya decenas de muertes entre el ganado de la Catalunya central

Un lobo en un paisaje de alta montaña en el Pirineo. Esta fotografía forma parte de 'Territori llop', libro que reúne el trabajo de Andoni Canela realizado con el lobo en los Pirineos y el resto de la península Ibérica.
4 min

GeronaHace una semana se supo que, por primera vez en diez años, una loba rondaba por el Pirineo catalán. La noticia hizo saltar las alarmas del sector ganadero, que en los últimos meses ha sufrido ataques de alguno de los pocos lobos machos que habitan en la orografía catalana. Los pastores con ganado en libertad están asustados y preocupados, ya que temen que la hembra recién descubierta pueda aparearse con los machos existentes, la especie se reproduzca y los ataques crezcan de manera exponencial. Según datos del Departament de Territori, durante el 2024 los lobos han matado a 38 cabras, ovejas o corderos, concentrados todos en Osona y el Alt Empordà; unas cifras que doblan las de hace dos años.

El ejemplar de loba que ha detectado el Servicio de Fauna y Flora de la Generalitat hace tiempo que habita en las cordilleras altamente tempordanesas, sin embargo, hasta ahora no se habían podido recoger muestras y constatar que se trataba de una hembra . Antes de que se tuviera conocimiento de su sexo, el animal ya había atacado y causado problemas a ganaderos de la zona: una de las explotaciones afectadas es Mas la Cloella, en Cistella, que regenta unas 160 cabras. Sus propietarios denuncian que, desde febrero del 2023, una veintena de reses han muerto por mordeduras de este carnívoro.

"El lobo está entre nosotros y aunque no ataque siempre, sabemos que está ahí, los rebaños notan el estrés y debemos estar siempre pendientes de proteger el rebaño con los cerrados, cencerros para hacer ruido o collares electrónicos para geolocalizarlo", explica Marta Solà, pastora de la masía. Y añade: "Cualquier cabra que quede fuera del cercado es susceptible de ser atacada". Esta explotación se ha hecho conocida por una noticia que explicaba que la loba había seducido uno de los perros de pasto, que permitió los ataques. De hecho, el otro propietario de la finca, Francesc Barbany, explicó a RAC1 que ahora intenta "cansar" al perro durante el día llevándolo a apacentar las cabras y también se están planteando esterilizarlo para evitar el cruce con la loba. Sin embargo, Solà desvía la atención de esta historia: "Es una anécdota, éste no es el problema que sufrimos".

El Collsacabra, epicentro de los últimos ataques

Hasta la fecha, la mayoría de incidencias recientes se han concentrado en los bosques del Collsacabra, cerca de Rupit, en Osona. A principios de junio se demostraron las primeras ofensivas de lobo en esta zona y, desde entonces, se han ido reproduciendo. El ganadero más afectado es Joan Próspero, que, de junio a octubre, ha recibido hasta 10 asaltos a ganado que se relacionan con el depredador cánido; el último, la semana pasada. En total, denuncia que ha tenido que lamentar la muerte a más de 80 ovejas, además de las que resultaron heridas.

En los primeros días recibió la ayuda del departamento de Acción Climática (ahora bajo el nombre de Territori) para proteger a los animales de noche con unas vallas electrificadas, pero el pastor asegura que ha sido insuficiente. "En ese mismo encerrado, hace una semana murieron dos corderos y un marrano, no pensábamos que el lobo vendría hasta el lado de casa", lamenta Próspero, que pide a la administración unos cerrados fijos en todos los límites de la finca. "Estamos preocupados porque cerca de este macho, en el Alt Empordà, han encontrado una loba, que está muy cerca de nuestro lobo y también otros en el norte de La Jonquera", avisa Próspero. El pastor asegura que los ataques le han provocado 25.000 euros en daños y, pese a que el departamento le ofreció indemnizaciones, los rechazó porque estaba "en desacuerdo".

Y éste no es el único caso en el Collsacabra, donde en las últimas semanas se han vivido más mordeduras del lobo. Hace 15 días, por ejemplo, Lluci Núñez, que tiene un pasto de vacas, encontró a un becerro malherido. "Tenía el cuello magullado, era un ataque de perro o de lobo, pero, por el agujero de los dientes, tanto el veterinario como los agentes rurales concluyeron que casi seguro que era el lobo", explica. Núñez espera que el susto no vuelva a repetirse, ya que las vacas suelen ir juntas y, en grupo, es poco probable que el depredador se atreva a atacar. Igualmente, Joan Colom, de Mas la Serra, que regenta un rebaño de 350 ovejas, hace un mes se encontró ocho heridas y, unos días más tarde, 10 más. De estas, tres murieron: "Ahora debo tenerlas el corral y, como no pueden comer fuera de noche, les debe dar forraje, lo que supone un gasto económico extra", dice Colom.

Unió de Pagesos marcha de la mesa del lobo

El lobo es una especie silvestre, muy escasa en las montañas catalanas, pero con especial protección que prohíbe su caza. Las voces proteccionistas celebran su presencia, ya que, como depredador, consideran que es clave para garantizar el equilibrio de los ecosistemas y que algunas especies no aumenten exponencialmente, como el corzo. Sin embargo, en el sector ganadero predomina una opinión contraria a la de su reintroducción, que tras la presencia confirmada de la loba no ha hecho más que aumentar. "Que te maten las ovejas no gusta a nadie, es lo suficientemente importante para que los ganaderos que ya están al límite tiren la toalla. Si lo que quieren es que dejemos nuestro trabajo, lo están consiguiendo", defiende Joan Guitart, coordinador de alta montaña de Unió de Pagesos, que concluye: "El lobo nos ha perdido el respeto, no ha sentido ninguna presión ni el silbato de ninguna bala, y acabaremos lamentando daños mayores".

Fruto de este malestar, sumado al de la presencia el hueso en el Pirineo occidental y la presión de la fauna cinegética (como corzos o jabalíes salvajes), Unió de Pagesos se ha retirado de las mesas de estudio de la situación de la Generalidad. Sin embargo, tanto desde Territorio como desde Agricultura, Ganadería y Pesca se muestran decididos a seguir trabajando para facilitar la coexistencia entre el lobo y las poblaciones locales con el planteamiento de nuevas acciones acordadas con todos los actores.

stats