Un alumno de cuarto de primaria de una escuela pública de Barcelona podrá empezar el curso sin llevar mascarilla en el aula. Un juez ha autorizado esta medida, de manera cautelarísima, por motivos médicos, anteponiendo la salud del niño al interés general. El conseller de Educación, Josep Gonzàlez-Cambray, ha dicho que la escuela se adaptará a esta medida porque hay que priorizar el derecho a la educación del niño. Además, ha dicho que el curso pasado ya hubo varios casos similares, siempre por prescripción médica, sobre todo en escuelas de educación especial pero también en algunas ordinarias.
Los institutos de Barcelona recuperan los comedores y la mitad tendrán menos alumnos en clase
Cae el número de alumnos en todas las etapas obligatorias pero habrá más centros públicos y más docentes
BarcelonaEl nuevo curso 2021-22 llega con novedades a los institutos de Barcelona. Una de las más importantes es que la gran mayoría de institutos (el 93,5%) recuperan el servicio de comedor escolar o las cantinas. Como la mayoría de centros de secundaria hacen jornada intensiva –los estudiantes acaban las clases hacia las 15 h–, muchos habían dejado de ofrecer servicio de comedor o lo ofrecían parcialmente. Ahora el servicio se desplegará en todos los centros para favorecer que los alumnos se puedan quedar por las tardes a hacer actividades lectivas o extraescolares. Esta medida, según el conseller de Educación y presidente del Consorcio de Educación, Josep Gonzàlez-Cambray, mejora "la equidad y la igualdad de oportunidades" de los alumnos. "Si no hay comedor no tienen acceso a la beca comedor", ha avisado. De hecho, el Consorcio también ampliará estas ayudas, que pasarán de ser de dos días a la semana a cubrir todos los días lectivos. Hasta ahora solo se cubrían los cinco días de beca a los alumnos de los centros más desfavorecidos. Además de las ayudas de comedor (4,43 euros al día o 6,33 euros al día, en función de la vulnerabilidad), se concederá una ayuda extra de 5 euros al día para los monitores de los alumnos que no pueden comer solos.
Además, por primera vez, y como también pasa a nivel general en Catalunya, el número de alumnos en la ESO bajará respecto al curso anterior –habrá 1.200– y, como se mantienen los mismos grupos, habrá menos estudiantes por clase. El 55% de los grupos tendrán menos de 30 alumnos, en un tercio de los institutos se mantiene la misma capacidad y en el 6% de los centros se superará la ratio de 30. En P3 también pasa una cosa similar: el 75% de clases tendrán menos de 25 alumnos –de hecho, el 59% tendrán menos de 22–. En total, 173.928 alumnos empezarán las clases el lunes en Barcelona, cerca de 6.000 menos que el curso pasado.
A pesar del descenso del número de estudiantes, habrá 295 profesionales más en las escuelas e institutos, la mayoría docentes, y habrá más centros públicos nuevos, cuatro de los cuales son centros concertados que pasan a la red pública. Una medida importante, teniendo en cuenta que sigue creciendo el número de familias que se matriculan en centros públicos: este curso la matrícula en los centros públicos ha crecido un punto, hasta el 52,6%, hecho que consolida la tendencia de los últimos años. También se estrenan equipaciones muy reivindicadas, como el Institut Angeleta Ferrer.