Medio ambiente

Revuelta en el Ebro contra las plantas de biogás y zanja: "El hedor de podrido nos obliga a confinarnos"

Vecinos de municipios del Montsià y el Baix Ebre protestan por no convertirse en el "vertedero" de Catalunya

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Cabecera de la manifestación de este viernes en Santa Bárbara contra las plantas de zanja y biogás.

Santa Bárbara"Es un hedor de huevos podridos, muy desagradable, que nos obliga a confinarnos y cerrar ventanas. Si te entra en casa estás perdido, porque se condensa y se estanca", explica Josep Roig, vecino de Santa Bárbara. Hace un año que la población de este municipio de la llanura del Montsià debe convivir con episodios casi diarios de humos y malos olores, sobre todo durante la madrugada y los atardeceres. El origen está a menos de dos kilómetros del casco urbano y tiene dos focos bien identificados. Por un lado, la planta de biogás de la empresa La Galera SL, que produce biometano a partir del procesamiento de unas 50.000 toneladas anuales de residuos orgánicos ganaderos, agrícolas y de la industria alimentaria. Por otro, la planta de Biosansa Catsud SL, que funciona durante la temporada de la aceituna –entre otoño y primavera– para procesar el orujo que se obtiene de las prensadas de aceitunas.

Ambas plantas están ubicadas cerca de Santa Bárbara, pero dentro del municipio vecino de la Galera, desde donde se acaban propagando los humos y los malos olores por varios municipios de las comarcas del Montsià y el Baix Ebre, según viento y bajas presiones atmosféricas. Para denunciar las molestias, la Asociación Medioambiental de Vecinos de Santa Bárbara ha convocado este viernes una manifestación vecinal que ha contado con el apoyo de entre 350 y 400 personas, eminentemente residentes de municipios cercanos que también sufren esta problemática, como la plataforma vecinal de Camarles y Salvem lo Montsià, así como miembros de la ONG ecologista Gepec. De hecho, entre los manifestantes, que hacían proclamas como "Queremos abrir ventanas" y "Ni humos ni malos olores", también había representantes de los gobiernos municipales.

"No estamos en contra del funcionamiento de este tipo de plantas, porque vivimos en una zona rural y somos conscientes de que hay que dar salida al procesamiento adecuado de residuos ambientalmente problemáticos como la zanja, los purines, la gallinaza y otros tipos de deyecciones agrícolas y ganaderas. Pero sí pedimos que su implementación sea adecuada, con un control de la salubridad de los aires que generan por parte de las administraciones competentes", afirma Roig.

El alcalde de Santa Bárbara, Antonio Ollés, ha explicado al ARA que está en conversaciones con el Ayuntamiento de la Galera para presionar a las empresas para solucionar los problemas de olores y humos: "Las empresas se han comprometido a instalar sistemas de filtrado en el plazo de un año y medio. A más tardar, antes del 31 de diciembre de 2025".

Nuevas plantas

La planta de biometano, con una inversión de seis millones de euros, es fruto de la unión de una treintena de socios, entre ellos campesinos y ganaderos de la zona. Se puso en marcha en 2021, pero no empezó a funcionar a pleno rendimiento hasta hace un año, cuando se completaron las instalaciones y se empezó a inyectar gas comercializable en la red general. En cuanto a la fábrica de Biosansa Catsud, la Asociación Medioambiental de Vecinos de Santa Bárbara ha llevado el caso ante la Fiscalía de Tarragona al considerar que podría estar cometiendo delitos contra el medio ambiente y la salud de las personas. Según la entidad, ni el Ayuntamiento de la Galera y ni la empresa les han facilitado los resultados de las últimas mediciones de humos.

"También debemos velar por que las materias que se procesan provengan de nuestro entorno más directo, y no nos convertimos en el vertedero de Catalunya", defiende Roig. También el portavoz de la entidad medioambientalista, Enrique Lange, subraya que el proceso industrial de este tipo de plantas debería desarrollarse íntegramente en recintos cerrados: "Con instalaciones que dispongan de biofiltros y sistemas avanzados que permitan asegurar el respeto en el entorno". Este mismo viernes los vecinos se han planteado convocar una manifestación de alcance territorial que se lideraría desde Santa Bárbara para demostrar su descontento con las empresas que eligen las Terres de l'Ebre para poner sus plantas.

Con menos de 50.000 animales, en las comarcas del Baix Ebre y el Montsià predominan las pequeñas y medianas explotaciones de porcino, lejos de las grandes cifras de otros territorios del país. Aún así, para cumplir con las directrices europeas y llegar al 2050 con residuos cero, la Generalitat y los ayuntamientos trabajan por la implementación de plantas de tratamiento de estos residuos. Un despliegue que no está siendo fácil.

Además de las empresas contra las que los vecinos han protestado este viernes, hay otras plantas en proyecto que se situarían en una veintena de kilómetros a la redonda del Montsià y el Baix Ebre y que ya han provocado el enfado de gran parte de los residentes y asociaciones ecologistas, que se oponen. Una es la empresa de biogás que se quiere abrir en el Pla del Bif, del municipio de Camarles, de la promotora Ence, y otra, la construcción de una planta de biometano entre el camino del Ranxero y el polígono Catalunya Sud, de Campredó, hasta el municipio de Tortosa, de la empresa valenciana Genia Bioenergy.

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