Las escuelas vuelven a abrir con al menos 2.000 docentes de baja

BarcelonaA pesar de la ómicron, el segundo trimestre escolar ya ha empezado y lo ha hecho con un reto mayúsculo: garantizar la máxima normalidad en las escuelas e institutos, cosa que, de entrada, pasa por asegurar que en todas las aulas hay un docente. Para conseguirlo, el departamento de Educación ha gestionado este lunes 1.517 nombramientos de interinos para sustituir docentes que no han ido a trabajar –ya sea porque están contagiados o porque tienen otras dolencias–, una cifra que se tiene que añadir a los 571 sustitutos nombrados viernes para cubrir posibles maestros y profesores que ya sabían que estaban enfermos y que hoy no irían al centro. En total, 2.088 maestros o profesores de centros públicos que no se han podido incorporar al trabajo, aproximadamente un 2%. La cifra es ligeramente inferior a la media española –el sindicato CCOO estima que entre un 4% y un 6% de los docentes de los centros españoles no han podido incorporarse hoy–, pero puede crecer si se suman las bajas en los centros concertados, que son gestionadas por cada escuela, no se cubren con los nombramientos del departamento y no se han facilitado.

En todo caso, se prevé que las bajas por covid sean un goteo constante al menos esta semana y la que viene. Por eso, y de manera extraordinaria, a partir de ahora se cubrirán todas las bajas iguales o superiores a 5 días en la escuela pública. Esta medida es clave porque hasta ahora se cubrían las de 7 o más días, lo cual habría dejado sin sustituir muchos contagiados, dado que la cuarentena es, precisamente, de 7 días. Además, también se podrán hacer nombramientos excepcionales de urgencia para los centros que tengan más de 3 bajas inferiores a 5 días, y habrá nombramientos telemáticos cada día durante esta semana y la que viene (normalmente se hacen solo los lunes, miércoles y viernes).

Recelo por la eliminación de las cuarentenas

El curso se ha retomado con novedades, como la eliminación de las cuarentenas en infantil y primaria si los contagios en un curso son inferiores a cinco. Según los sindicatos, los cambios en el protocolo son una "temeridad": Ustec y Comisiones Obreras han alertado de que los menores de 12 años "ni tan siquiera tienen la posibilidad de tener la pauta completa de vacunación" y han criticado que tengan que ir a la escuela aunque en su clase se detecten positivos. "Es una decisión incomprensible en un momento de máxima incidencia de contagios, han afirmado a Efe. Ahora el 30% de los alumnos menores de 12 años tienen la primera dosis pero casi ninguno tiene la pauta completa porque no ha habido tiempo. Los alumnos de entre 12 y 15 años están mayoritariamente vacunados (el 70,8% con la primera dosis y el 58% con la pauta completa) y de los 15 a los 19 tienen las dos dosis casi nueve de cada diez.

Las familias están divididas: desde el colectivo Revolta Educativa creen que la medida "hará aumentar los contagios" y provocará que muchas familias decidan no llevar a sus hijos a clase, mientras que la entidad Tornem a les Escoles ha celebrado que se eliminen las cuarentenas preventivas que, han calculado, han hecho perder 1.360.000 días de escuela a niños sanos en los últimos dos años.

Los expertos en epidemiología tampoco ven claro el nuevo protocolo escolar. La jefa del servicio de Medicina Preventiva y Epidemiología del Hospital Vall d'Hebron de Barcelona, Magda Campins, se ha mostrado partidaria de minimizar las cuarentenas de los menores y fomentar la presencialidad en la escuela pero ha advertido que es "un poco imprudente" hacerlo coincidiendo con el regreso después de Navidad y en plena sexta oleada.