Literatura

Diez libros de una ambición sin límites

Entre las novelas más extensas de la temporada están las de Michel Houellebecq, Lucy Ellmann, Melcior Comes, Hanya Yanagihara y Laura Fernández

8 min
Libros de más de 1000 páginas

BarcelonaCien años después de la publicación de Ulises de James Joyce, una de las novelas más controvertidas de la historia de la literatura –considerada una obra maestra y, a la vez, una pesadilla para muchos lectores–, siguen llegando a las librerías novelas de una extensión y ambición remarcables. Ponerse el listón alto puede recibir, a veces, el elogio de la crítica y de los lectores, pero también puede comportar fracasos sonados. En este reportaje repasamos una decena de títulos que se han publicado durante el último año –con una única excepción–, todos ellos de dimensiones poco habituales, en algunos casos incluso desmesuradas.

1.
'Aniquilación', de Michel Houellebecq
Michel Houellebecq

Desde que publicó la primera novela, Ampliación del campo de batalla (1994), Michel Houellebecq no ha dejado de investigar la decadencia de la civilización occidental, centrada sobre todo en Francia. Después de pronosticar la islamización de su país en Sumisión (2015) y de excavar en las grutas de la depresión de un hombre de mediana edad en Serotonina (2018), en Aniquilación (Anagrama, 2022; traducción de Jaime Zulaika) se ha propuesto diseccionar a fondo, por primera vez en su trayectoria, a una familia.

El protagonista de la novela más larga de Houellebecq –600 páginas– es Paul Raison, mano derecha del ministro de Economía francés que investiga una serie de atentados poco antes de la campaña electoral para las presidenciales y sigue, consternado, la evolución de su padre, que ha sufrido un ictus. El ataque obliga a los tres hermanos a retomar el contacto. A pesar de que sigue soltando, de vez en cuando, latigazos verbales venenosos y planteando situaciones moralmente comprometidas –como aquella visita de uno de los protagonistas a una prostituta que resulta ser su sobrina–, Houellebecq ha publicado su novela menos cínica. Quizás por eso la recepción crítica del libro ha sido desigual. Se ha alabado el "virtuosismo para narrar un mundo a punto del colapso" (Le Figaro), pero también se le ha recriminado la "banalización de la extrema derecha" (France Culture).

2.
'Patos, Newburyport', de Lucy Ellmann
Lucy Ellmann

"Una madrugada me levanté y escribí una página entera de frases que empezaban con la expresión the fact that [el hecho de que] –recuerda la novelista Lucy Ellmann–. Este inicio tiene un efecto enfático o relajante, y genera intriga, porque no sabes cómo acabará". A partir de aquí, la autora de origen norteamericano –e hija de Richard Ellmann, biógrafo de James Joyce– fue estirando el hilo y construyó Patos, Newburyport, una novela de 1.272 páginas. Traducida al castellano por Enrique Maldonado Roldán y publicada en Automática, disecciona el siglo XXI a partir de la mirada de una ama de casa de Ohio en un lenguaje riquísimo, dúctil y deslumbrante.

"Si el arte se mide por la capacidad de ser un reflejo de la sociedad, Ellmann ha escrito, seguramente, la novela más importante de esta era", se podía leer en la prestigiosa Paris Review. Patos, Newburyport recibió premios como los prestigiosos Goldsmith y James Tait. Con su octava novela, Lucy Ellmann ha llegado a la cumbre de repercusión y de ambición: ¿cuál será el próximo hito que se marque? "No planeo nada –admite–. El único sentido de escribir es la propia escritura".

3.
'Tots els mecanismes', de Melcior Comes
L'escriptor Melcior Comes

"Era mi mejor amigo y lo maté", empieza Tots els mecanismes, octava novela de Melcior Comes. Publicada en Proa, se trata de una historia coral –con catorce narradores– que narra el enfrentamiento entre dos familias: una de empresarios mallorquines vinculados al turismo y otra de propietarios de una inmobiliaria barcelonesa que quiere ampliar negocio en Mallorca.

"Me hago eco de muchas cosas que siempre me han llamado la atención de la crónica negra mallorquina –explica el autor–. No me he tenido que inventar nada. Solo el tipo de personas, pero no las acciones ni el trasfondo; todo esto ha pasado y por desgracia es así". Comes define la novela, la más extensa de las que ha publicado hasta ahora –642 páginas–, como "una historia de amor en la que nadie se quiere". La corrupción, la destrucción del entorno natural, la especulación inmobiliaria y la lucha por el poder son algunos de los temas de una novela que confirma la fuerza y la agilidad narrativa del autor mallorquín.

4.
'Los grandes optimistas', de Rebecca Makkai
Rebecca Makkai

La tercera novela de Rebecca Makkai –finalista del premio Pulitzer y el National Book Award y ganadora del último premio Llibreter– enlaza con destreza narrativa dos momentos alejados en el tiempo, pero unidos por una misma enfermedad, el sida. El primero es el Chicago de 1985, en pleno auge de la epidemia, y resigue los estragos en un grupo de amigos homosexuales a partir de un galerista de arte, Yale Tishman. El segundo es el París de 2015, y está protagonizado por una mujer que viaja para encontrar a su hija desaparecida. "Cuando empecé a preparar el libro me di cuenta de hasta qué punto el sida era desconocido –recuerda Makkai–. Nadie hablaba, era un tema tabú. No fue hasta 1987 que Ronald Reagan, entonces presidente de Estados Unidos, pronunció la palabra sida en las noticias. Esto pasaba seis años después de que empezara a morir gente".

Publicada en Periscopi en catalán –traducida por Marc Rubió– y en Sexto Piso en castellano -traducida por Aurora Echevarría-, Los grandes optimistas supera las 600 páginas. Makkai ya tiene a punto su próxima novela, I have some questions for you, que publicará en 2023, un thriller psicológico que arranca cuando una profesora de cine acepta hacer un curso de dos semanas en el internado donde estudió cuatro años y fue asesinada una compañera de curso.

5.
'La señora Potter no es exactamente Santa Claus', de Laura Fernández
L’escriptora Laura Fernández, a Barcelona

"Me tomo la escritura como un juego. Me encantan las novelas cómicas, las busco como quien busca tesoros. Cualquier cosa que implique mostrar la existencia ridícula de este mundo me encanta". Con esta divisa, Laura Fernández ha levantado novelas donde campan, sin ninguna restricción, el absurdo, la extrañeza y giros narrativos imprevisibles. La última ha sido La señora Potter no es exactamente Santa Claus (Literatura Random House), que se ha convertido en una de las novelas más recomendadas de los últimos meses –premiada con el Finestres, el Ojo Crítico y el Kelvin 505– y que propone al lector viajar hasta el pueblo de Kimberly Weymouth Clarke, lugar de peregrinaje turístico porque una escritora, Louise Cassidy Feldman, ambientó allí una novela de éxito. Escritores, periodistas, niños siniestros, vendedores de souvenirs y agentes inmobiliarios protagonizan esta apretada aventura coral, de más de 600 páginas.

6.
'Cuarteto de las estaciones', de Karl Ove Knausgård
Karl Ove Knausgård, a Barcelona

Después del sexteto autobiográfico Mi lucha –que sumaba más de 3.000 páginas– el noruego Karl Ove Knausgård quedó vacío de palabras hasta que, en 2014, coincidiendo con el cuarto embarazo de su pareja, la escritora Linda Boström, se decidió a explicar a su futura hija cómo era el mundo que se encontraría cuando naciera. Lo hizo en cuatro libros, conocidos como Cuarteto de las estaciones, publicados este junio en cuatro volúmenes por Anagrama, y que arrancan con En otoño, traducido por Kirsti Baggethun y Asunción Lorenzo.

La desmedida de Knausgård no se para. Ha vuelto recientemente a la novela con el díptico integrado por Morgenstern (La estrella de la mañana, 2020) y Ulvene fray evighetens skog (Los lobos del bosque de la eternidad, 2021). La caída de un meteorito en un pequeño pueblo es el punto de partida de una concatenación de desastres que afectan a sus habitantes. La traducción inglesa del primer libro –que suma 666 páginas–no recibió muy buenas críticas: "El gusto de Knausgård por la minuciosidad ha dividido a sus lectores; en este caso es sin duda un lastre" (The Guardian); "El libro confunde, pero no por el argumento, sino por la falta de intenciones" (New York Times).

7.
'Las leyes de la ascensión', de Céline Curiol
L'escriptora Céline Curiol

La Primavera Árabe que vivieron países como Egipto, Siria y Túnez en 2011 hizo preguntarse a Céline Curiol si Francia estaba dispuesta a hacer la revolución o el día a día de sus ciudadanos era demasiado cómodo para pensar. Una década más tarde publicaba Las leyes de la ascensión –en castellano, en Periférica y Errata Naturae, traducida por Regina López Muñoz–, donde un secuestro en un McDonald's en el barrio parisiense de Belleville acaba conectando la vida de los seis protagonistas, entre los cuales hay una periodista comprometida, un psicólogo, una mujer en el paro y un adolescente de origen magrebí que se radicaliza.

A lo largo de un millar de páginas, Curiol se fija en la precariedad laboral, las migraciones, la inadaptación, la maternidad, el desclasamiento y las dificultades de la vida urbana contemporánea. "Cada vez somos más individualistas y nos cuesta más pensar en los otros –admite Curiol–. Este proceso de individualización está conectado con el predominio de la eficacia. Todo el mundo tiene cosas que hacer y nadie quiere perder el tiempo". La novela señala también otro problema de actualidad: el miedo ciudadano.

8.
'Encrucijadas', de Jonathan Franzen
L'escriptor Jonathan Franzen, el 2021

Jonathan Franzen no publica con mucha frecuencia, pero cuando lo hace el resultado resuena en todo el mundo, en parte gracias a las dimensiones de sus novelas. Encrucijadas (Salamandra, traducción de Eugenia Vázquez Nacarino), que tiene 712 páginas, es la primera entrega de una trilogía sobre una familia, los Hildebrandt, que el escritor todavía no sabe como continuará.

Ambientada en Chicago entre la Navidad de 1971 y la Pascua de 1972, está protagonizada por un pastor protestando de mediana edad que desea a una feligresa; su mujer, siempre con un reproche a punto de salir de los labios, y sus cuatro hijos. "El adulterio es central en la novela. Me di cuenta bastante pronto, y esto me generaba cierto rechazo, porque me recordaba a la narrativa de John Updike, de quien no soy un gran seguidor –afirma–. Russ se acerca a los 50 y conoce a Frances. Pensé que la manera de abordar su relación tenía que ser con un punto de humor. Está a punto de hacer una cosa que, socialmente, está muy mal vista, pero él se justifica diciéndose que está intentando tener una vida más feliz". La novela ha sido muy bien recibida por la crítica –la sitúan al nivel de Libertad (2010) y Las correcciones (2001)–, pero el público no lo ha acompañado masivamente, como en ocasiones anteriores.

9.
'Al paraíso', de Hanya Yanagihara
La novel·lista Hanya Yanagihara

Hanya Yanagihara vendió más de un millón de ejemplares de Tan poca vida (2015, en castellano en Lumen), y la novela –de un millar de páginas– fue finalista del National Book Award, Man Booker y el International Dublin Literary Award. Siete años después, la norteamericana ha vuelto con una novela todavía más extensa (1.100 páginas) y conceptualmente más arriesgada. Al paraíso (Lumen, traducción de Laura Martín y Laura Manero) transcurre en tres versiones alternativas de Estados Unidos: en la primera, la de 1893, el matrimonio homosexual está permitido; en la segunda, la de 1993, un joven hawaiano vive en Manhattan en pareja en un entorno asediado por la enfermedad; en la última, la de 2093, un científico y su familia se dan prisa por sobrevivir en un mundo devastado por plagas y gobernado por un estado totalitario.

10.
'Calidoscopi informal', de Albert Jané
Albert Jané: “Amb el català s’ha de ser optimista des d’un punt de vista tàctic, per lluitar i actuar”

Con Calidoscopi informal, publicado en Edicions de la Ela Geminada en 2017, el lingüista y traductor Albert Jané debutó como novelista a los 87 años. La extensión del libro, que supera las 1.400 páginas y narra el errático encuentro entre una serie de personajes que se van explicando historias ininterrumpidamente, dificultó la recepción, incluso en cuanto a la crítica: no se publicó ni una reseña.

Un lustro después, Calidoscopi se ha convertido en libro de culto gracias a la singularidad de la propuesta, la riqueza de la lengua y el sentido del humor –tierno y ocurrente– del autor, que dirigió durante casi dos décadas la revista Cavall Fort, tradujo Los barrufets y se ocupó del Diccionari català de sinònims (1977). "Quien sueña cuando duerme no puede elegir el sueño, quien sueña despierto sueña lo que quiere", escribe Jané, que ha continuado publicando su ficción libre e inclasificable en versión digital. La última entrega, de 2021, lleva por título L'almanac anacrònic.

stats