Quiénes eran Aurora Picornell y las víctimas del franquismo despreciadas por el presidente del Parlament balear

Manacor / PalmaEl presidente del Parlament balear, Gabriel Le Senne (Vox), rompió una fotografía de Aurora Picornell y las Rojas del Molinar en medio de un debate parlamentario, un pleno en el que PP y Vox van aprobar derogar la ley de memoria histórica. ¿Pero quiénes eran aquellas mujeres que fueron víctimas del fascismo?

Con un nombre de marcadas resonancias revolucionarias, Aurora Picornell (1912-1937) formaba parte de una familia de clase trabajadora activa políticamente. A los 14 años empezó a trabajar como sastreza y pronto se implicó en la política para cambiar a la conservadora y clerical sociedad de la época. Empezó a escribir en revistas. A los 18 años era ya vocal de la Liga Laica de Mallorca –fundada por el librepensador comunista Ateu Martí–, y tras la proclamación de la Segunda República fue responsable de la organización de mujeres del Partido Comunista de las Islas Baleares. Sindicalista y feminista, impulsó el primer Día de la Mujer Trabajadora en Mallorca en 1934.

Fue inevitable que se convirtiera en un símbolo de las ideas progresistas en la isla. Tenía una gran oratoria y era empática. Siempre era vitoreada en todas sus intervenciones públicas. Un periodista de la época la comparaba con la mártir liberal granadina Mariana Pineda.

En 1932 inició una relación con un agente de la Internacional Comunista natural de Moldavia, conocido como Heriberto Quiñones, con quien tuvo una hija, Octubrina Roja, en 1934, con 22 años. En 1935 pasó dos meses en prisión por primera vez, por repartir propaganda. Durante una visita a Madrid, dijo que no a Dolores Ibárruri, la Pasionaria, cuando le propuso ocupar un cargo en el organigrama del partido.

Su vida se truncó al día siguiente del golpe de estado de 1936, cuando fue detenida con Palma bajo el control de los militares golpistas. El 18 de julio había estado a punto de embarcar hacia Barcelona, ​​pero al saber que había habido un golpe de estado quiso quedarse para organizar la resistencia. De la cárcel desapareció, junto a sus compañeras, el 5 de enero de 1937, pensándose que gozarían de un permiso. Su padre, Gabriel Picornell Serra, fue asesinado en Porreres el mismo mes y sus hermanos, Ignacio y Gabriel, poco después. Su compañero fue detenido, torturado y ejecutado en Madrid en 1942. Su hermano Juan acabó en un campo de concentración nazi. Solo sobrevivieron tres mujeres: su madre, su hermana Libertad y su hija, hasta los 35 años.

Un hallazgo emocionante

"Aurora vuelve a casa". Así anunció en el 2022 el vicepresidente del gobierno balear, Juan Pedro Yllanes, que los restos de Aurora Picornell habían sido identificados en la fosa de Son Coletes, en Manacor. La sindicalista y militante del Partido Comunista, conocida en el Estado como la pasionaria mallorquina, fue asesinada con 24 años el 5 de enero de 1937 en el cementerio manacorense, contrariamente a la hipótesis historiográfica más generalizada, que ubicaba su muerte en Porreres.

“Hemos encontrado los restos de cinco mujeres y hemos tenido la suerte de identificar las de Aurora. Es un día histórico para Baleares”, decía un emocionado Yllanes. En cuanto a las demás mujeres, que con toda certeza eran las Rojas del Molinar, se trataría de las compañeras de Picornell: Berlarmina González Rodríguez, Catalina Flaquer Pasqual y sus hijas Antònia y Maria Pasqual, todas ellas luchadoras antifascistas. Son conocidas como las Trece Rosas mallorquinas. Su nombre simboliza la represión franquista en Mallorca.

Las pruebas de ADN confirmaron el hallazgo, gracias a que pudieron compararse con las de su hermano, Ignacio. Los cuerpos de Aurora y Les Roges del Molinar se encontraron en la fosa número 3 del cementerio de Son Coletes entre noviembre y diciembre de 2021, durante la segunda fase de excavaciones y exhumaciones. El esqueleto de Aurora estaba bien conservado y presentaba cinco agujeros por disparos de arma de fuego: tres en la cabeza, uno en el pecho y otro en un brazo. También tenía una fractura en el peroné derecho.

Con los restos de Aurora Picornell aparecieron varios objetos. Una mujer llevaba una pluma estilográfica en el tórax derecho. "Era su arma contra el fascismo", dijo la presidenta de Memoria de Mallorca, Maria Antònia Oliver, quien aseguraba que el hallazgo es "una victoria de la democracia contra el fascismo".

Dos años después, en el Parlament balear, la memoria antifranquista todavía cuece. Le Senne justificó su acción airada en el pleno diciendo que le habían "provocado" la vicepresidenta segunda y la secretaria de la Mesa con esas fotografías. El Ayuntamiento de Palma prohibió en las bibliotecas de la ciudad cualquier difusión a través de las redes de su figura y su biografía.

Las últimas palabras de Aurora Picornell a los fascistas que la fusilaron fueron estas: “Podéis matar a hombres, mujeres, niños. Pero, ¿y las ideas? ¿Con qué balas mataréis las ideas?”