Barça

La bunquerización del Barça

La política comunicativa de la entidad azulgrana es cada vez más restrictiva con los medios de comunicación

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Joan Laporta y Estruch en una reciente imagen.

Barcelona"La crisis del caso Masip provocó una tensión interna y se resolvió mal. A partir de esa crisis ha habido más silencio público en el Barça", explica al ARA una persona cercana a Laporta. Se refiere a la polémica generada por las republicaciones a tuits de carácter racista y homófobo en X por parte de Enric Masip, actual asesor del presidente azulgrana y leyenda del Barça de balonmano, que le llevaron a cerrar su cuenta en esta red social a principios de julio. Masip, entonces, lamentó haber puesto a Laporta y al Barça "en una situación incómoda".

De eso hace ya casi dos meses y desde dentro del club azulgrana remarcan que "Laporta está desaparecido del foco mediático, prácticamente no asiste ni a actos públicos ni privados". Este comportamiento contrasta con el que tuvo en el inicio de su segundo mandato, cuando sus apariciones públicas fueron casi semanales. La última vez que Laporta se ha puesto ante un periodista para realizar una entrevista fue con Francesc Garriga en Catalunya Ràdio el 8 de julio, cuando aseguró que el Barça se podía permitir económicamente fichar a Nico Williams, una sentencia que en ese momento, y aún ahora, divergía de la realidad financiera del club.

Por otra parte, para encontrar la última vez que Laporta dio una rueda de prensa ante decenas de periodistas de los medios de comunicación que siguen a diario el Barça debe irse al 25 de abril, cuando compareció conjuntamente con Xavi Hernández, en ese momento el entrenador, para anunciar que éste continuaría una temporada más después de la célebre cena del sushi en casa del presidente.

Sin presentaciones

Desde entonces, Laporta y su equipo de comunicación no han considerado pertinente la celebración de las ruedas de prensa tradicionales cuando se ficha a un entrenador o a un jugador. No las tuvieron ni Hansi Flick ni Dani Olmo. "No entendí que no hubiera rueda de prensa de presentación de Flick", explican a este diario fuentes de la cúpula azulgrana. "Estas decisiones generan ruido en un club como el Barça", añaden.

El último gran acto público ante los medios que se ha llevado a cabo fue el adiós de Sergi Roberto el 13 de agosto. Pero ni el ex capitán azulgrana ni el presidente del Barça aceptaron preguntas de los periodistas. Tampoco se ha considerado necesario dar una rueda de prensa para explicar que Socios.com no ha querido seguir como inversor de Barça Vision y que le sustituye la empresa estadounidense Aramark –a cambio de 25 millones de euros–, a la que en la misma operación se le ha concedido el catering y la restauración del nuevo Camp Nou durante los próximos 25 años –a cambio de 15 millones– mediante una nueva palanca.

Una gira más hermética

Los compañeros de los diversos medios que siguieron al Barça en la gira por Estados Unidos de este verano tuvieron una primera cata de la política comunicativa que habrá este curso en la entidad azulgrana. A diferencia de giras anteriores, a los medios catalanes y estatales no se les dio ninguna entrevista a jugadores e, incluso, algún trabajador del club les dijo que no hacía falta que hubieran hecho el viaje porque no sacarían demasiado provecho del mismo.

Además, los periodistas tuvieron que afrontar varios intentos de dificultar su trabajo, como el propósito de echarlos de los halls de los hoteles donde estaba alojado el Barça o que no tuvieran la mejor visión para ver un entrenamiento de puertas abiertas del equipo catalán en la US Naval Academy, la academia militar naval de Estados Unidos de la ciudad de Annapolis, uno de los lugares donde estuvo el Barça.

También se han establecido normas de cara a las ruedas de prensa de Hansi Flick previas y posteriores a los partidos. Si antes podían preguntar casi todos los periodistas –siempre que no se alargara demasiado la duración del acto–, a partir de ahora solamente podrán hacerlo 12 por rueda de prensa. Teniendo en cuenta que habitualmente suelen superar la treintena los profesionales que siguen la actualidad del Barça interesados en preguntar al entrenador, la cifra es significativamente restrictiva.

Por si fuera poco, en los partidos fuera de casa Hansi Flick, que de momento únicamente se comunica en inglés con la prensa, no dispondrá de traductor. Este hecho, por mucho nivel de inglés que tengan los periodistas, es evidente que dificultará la complejidad de la conversación. Sobre todo teniendo en cuenta que Flick no se siente completamente cómodo en esta lengua porque tampoco es su materna. De moment, el técnico alemán no se ha tenido que enfrentar a mucho ruido gracias a dos victorias en dos partidos de Liga.

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