Las reliquias del Barça que permanecen en la sombra

BarcelonaLlueve y los turistas van en masa al Museo del Barça. La playa quedará para otro momento. Es un día laborable de la segunda quincena de agosto y la acumulación de gente provoca que parezca imposible imaginar que, poco tiempo atrás, la pandemia del coronavirus dejó vacía lo que es la joya de la corona del club azulgrana los días que no hay partido. Este miércoles 9.500 personas visitaron el museo culé , una cifra que se acerca bastante a las prepandémicas, cuando solo gracias a este activo la entidad ingresaba 42 millones de euros anuales (seis de los cuales procedentes de las fotografías que se compran en el recinto). Los turistas suponen el 85% de los visitantes del museo y solo uno de cada cuatro es seguidor del Barça, según el club. El resto son o bien aficionados al fútbol en general o están interesados en visitar un punto emblemático de la ciudad.

Durante su estancia pueden ver los trofeos de la entidad y las Pelotas de Oro de sus estrellas, hacer un tour por el Camp Nou, vivir una experiencia de realidad virtual con la novedad del Barça Virtual Dream y disfrutar de cuatro obras de arte que forman parte del fondo que posee el Barça, formado por decenas de piezas de grandes artistas. Las cuatro obras expuestas en la primera planta del museo son los carteles oficiales que se hicieron para conmemorar el 25.º, el 50.º, el 75.º y el 100.º aniversarios del Barça, obra de Josep Segrelles, Sebastián Rey Padilla, Joan Miró y Antoni Tàpies, respectivamente. “Para el 125.º aniversario (será en 2024) encargaremos otro cuadro a un artista con vinculación con el Barça”, explica al ARA Jordi Penas, el director del museo. 

Pero no todos los encantos que tiene el Barça lucen. Es el caso, por ejemplo, de la litografía conmemorativa del 75.º aniversario de la entidad que hizo Salvador Dalí y las obras premiadas en las Bienales de Arte que el club organizó en 1985, en 1987 y en 1999. Tampoco se pueden ver las piezas de Pablo Picasso, Antoni Clavé o Josep Maria Subirachs que hay en este amplio fondo de arte azulgrana. Sí que estuvieron expuestas hasta la última gran remodelación del Museo del Barça, que se hizo en 2010 para dar importancia al apartado audiovisual y a las nuevas tecnologías. ¿Dónde han ido a parar? “La mayoría de estas obras están guardadas en varios almacenes del Camp Nou y en almacenes externos. Y también hay alguna en despachos del club”, informa Penas. Pero añade que, en el nuevo museo que se construirá con el Espai Barça y que estará sepultado en la explanada de tribuna, “se expondrán algunas de estas obras y otros podrán aparecer en las exposiciones itinerantes que se harán”. 

Las obras de este fondo de arte no son las únicas maravillas azulgranas que descansan en la sombra. El club también tiene guardadas en almacenes muchas piezas de museística de la entidad, como el banquillo de los entrenadores del estadio de las Corts, una bandera azulgrana de 1911, el busto de bronce de César Rodríguez y la camiseta del jugador Pepe Rodríguez de 1910, la más antigua que el club conserva. En total, entre el material expuesto y el no expuesto el Barça tiene catalogados, tanto físicamente como digitalmente, más de 3.000 artículos (y todavía hay más porque algunas colecciones se cuentan como un solo artículo) que Joan Anton Maragall, presidente de la barcelonesa Sala Parara, se encargó de tasar. Pero el club prefiere no desvelar la cifra total de su valor.

El NFT de Johan Cruyff

“El Museo del Barça tiene que ser cultura, entretenimiento y ocio. Por lo tanto, en el nuevo museo se tiene que compaginar todo esto, siendo líderes en las nuevas tecnologías”, considera Penas. De hecho, el museo provisional que habrá durante dos años a partir del verano próximo en la pista de hielo mientras duren las obras del Espai Barça tendrá una experiencia inmersiva que buscará suplir el hecho de que los visitantes entonces no podrán hacer el tour del Camp Nou. “Vivirán una experiencia de 360 grados que los trasladará virtualmente al césped del estadio”, explica Penas. Por otro lado, el ARA ha podido saber que el club azulgrana está trabajando en la creación de un museo virtual que se pueda visitar desde cualquier lugar del mundo. 

Mientras tanto, el Barça trabaja en la adquisición de nuevas piezas de valor. Una de las intenciones es exponer la NFT de Johan Cruyff que en julio se vendió por 678.000 euros en una subasta de Sotheby’s de Nueva York. El club ya ha hablado con el propietario y él ha dado el visto bueno. Además, el Barça está a punto de solucionar dos vacíos importantes que hasta ahora ha tenido su museo: la Pelota de Oro de Ronaldinho de 2005 y la de Rivaldo de 1999. La entidad azulgrana ya ha acordado con los dos exjugadores solucionar el asunto la próxima vez que visiten el Camp Nou. La que ya está expuesta es la séptima Pelota de Oro de Leo Messi, a pesar de que se le entregó ya siendo jugador del París Saint-Germain. El Barça solicitó a la familia poder hacer una réplica.