Sergi Roberto, antes que Ansu Fati

BarcelonaLa Liga se acaba y el Barça solo conserva la obligación de acabarla entre los cuatro primeros clasificados, lo que da acceso a la próxima Liga de Campeones y el objetivo de proclamarse subcampeón, lo que también permitiría que los azulgranas jugaran la Supercopa. La razón de ser de los partidos que quedan para jugarse no son los títulos, sino hacer los deberes y sacar conclusiones de cara a la próxima temporada, que ya no será de transición. En esta particular lucha se enmarca el papel que pueden tener en un futuro dos jugadores que se han pasado gran parte del curso lisiados: Sergi Roberto y Ansu Fati.

Los dos están en el tramo final de sus respectivas recuperaciones, pero el primero ha avanzado más deprisa y todo apunta a que recibirá el alta para jugar contra el Rayo Vallecano este domingo. Si todo va bien, se reencontrará con el público del Camp Nou, que a principios de curso llegó a silbarle por su negativa a bajarse el sueldo (una reducción pactada, pero sujeta a renovar, porque acaba contrato), como sí que habían hecho los otros capitanes de la plantilla.

El centrocampista "va como una flecha", según apuntan al ARA fuentes del vestuario del Barça. Ha trabajado en solitario durante más de cuatro meses después de un paso por quirófano para hacer limpia del todo de una lesión muscular en el recto femoral que le daba la lata desde finales de noviembre de 2020, cuando se rompió en el Wanda en un partido contra el Atlético de Madrid. Después de aquel primer esguince, el futbolista catalán recayó hasta tres veces del mismo problema. Cuando Xavi Hernández cogió las riendas del primer equipo, su médico de confianza, Ricard Pruna, examinó el estado físico de Roberto y le dijo que la mejor solución para sus males era la intervención quirúrgica de un experto en la materia como Lasse Lempainen, que ya había operado a Dembélé.

"Ha jugado con molestias muchos partidos", ha dicho más de una vez el técnico sobre su excompañero, con el que cuenta al 100% para el curso que viene. Fruto de este interés, y como el jugador acaba contrato este 30 de junio, las negociaciones para renovarlo han reavivado. Eso sí, después de los contactos de esta semana, el acuerdo todavía está lejos. La oferta de Mateu Alemany es de mínimos: solo un año más de contrato, hasta 2023, y unos emolumentos muy inferiores a los que tiene vigentes. Puede pasar de todo y el jugador tiene ganas de aportar argumentos desde el campo.

Todo el optimismo que exuda en Sant Joan Despí, la recuperación de Roberto se convierte en prudencia cuando el foco se pone sobre Ansu Fati, que lleva trabajando con el grupo muchos más días que el de Reus y, en cambio, todavía no genera suficiente confianza entre los técnicos, los fisios y los médicos para volver a competir. Su caso es especialmente sensible, puesto que decidió no operarse para reparar la lesión muscular –asociada al calvario de su menisco– de la que recayó en San Mamara en un partido de Copa del Rey.

Como no quería visitar el quirófano por quinta vez en un año y pico, el hispanoguineano presionó para seguir un tratamiento conservador con el recuperador Joaquín Juan, con un pie en Madrid y el otro en Barcelona, con la esperanza de ayudar al equipo en el tramo final del curso. Pero el proceso ha ido más lento de lo que se esperaba y desde el Barça se ha optado por una política de riesgo cero, puesto que Ansu es un futbolista capital y otra recaída sería un golpe durísimo no solo para el club, sino también para el jugador, que quiere ir al Mundial con la selección española.

Pedri, hasta la pretemporada; y susto con Araujo

Fati ya hace días que exhibe un buen ritmo en los entrenamientos y acumula excelentes sensaciones para volver a jugar partidos. Pero más que contra el Rayo, su regreso al césped en compromiso oficial se espera de cara a la visita del Mallorca en el Camp Nou, el próximo 1 de mayo. Igual que Roberto, también tiene opciones de recibir el alta para el domingo Samuel Umtiti, ya recuperado de su lesión en el quinto metatarsiano. Quien ya ha dicho adiós a la temporada es Pedri, que se rompió el bíceps femoral la noche nefasta contra el Eintracht.

En cambio, quien podrá jugar es Ronald Araujo. El central tuvo que ser sustituido en Anoeta después de recibir un golpe en la rodilla. Había mucha preocupación en la expedición, pero las exploraciones médicas calmaron los ánimos. Finalmente, las pruebas que le han realizado este viernes en Barcelona confirman que el futbolista uruguayo "no tiene lesionada la rodilla". Por lo tanto, está a disposición de Xavi para cuando lo necesite.