Los dardos escondidos en los exámenes escritos que evalúan los árbitros españoles
El CTA pone a prueba a los colegiados regularmente con cuestionarios tipo test


SabadellLos colegiados de Primera y Segunda División realizan regularmente exámenes técnicos para comprobar que su nivel reglamentario es apto para dirigir partidos de fútbol profesional. Durante la temporada 2024-25 se han realizado dos pruebas telemáticas, durante los meses de noviembre y febrero, y los árbitros se han quedado de piedra cuando han tenido que resolver una serie de preguntas elaboradas por el Comité Técnico de Árbitros (CTA) con ataques y reproches sutiles contra los críticos.
Entre el colectivo arbitral existe la certeza de que su presidente, Luis Medina Cantalejo, junto con su equipo, dedica una excesiva atención a la opinión de los analistas, porque algunos de ellos son opositores a la estructura arbitral actual. Entre los nombres más destacados se encuentran el mediático Antonio Mateu Lahoz y el catalán Xavier Estrada Fernàndez. La obsesión ha llegado al extremo de dedicar una de las preguntas del examen a uno de los capítulos más oscuros del CTA: la FurgoVAR que ocupó Estrada Fernández en un partido, justo después de haber denunciado al CTA.
Los examinados tuvieron que responder a la pregunta: "¿Se pueden oficiar partidos como VAR en una furgoneta habilitada? La respuesta correcta, según los examinadores, es que sí, pero en una de las opciones erróneas del test se puede leer: "No, el VAR podría demandar la Federación y ganar" ~ Por otra parte, el 20 de octubre de 2023 el ARA destapó la existencia de una sala de operaciones que mantenía contacto directo con la sala VOR. Un VAR del VAR, en otras palabras. El CTA tampoco ha olvidado ese capítulo que obligó a la propia RFEF a presentarla públicamente. De hecho, en su examen más reciente, los colegiados españoles tuvieron que responder si "el VAR reserva podía tomar decisiones" y una de las opciones decía: "Por supuesto, la sala anexa se creó con ese objetivo".
Desde que el equipo directivo del CTA asignó a los árbitros profesionales la función de estar presentes también en la citada sala de operaciones, hay mala marejada en el colectivo debido a que esta tarea no está incluida en su contrato profesional y les supone un aumento considerable de horas de trabajo. Las designaciones de los inquilinos de esta sala anexa no son oficiales y se reciben vía WhatsApp.
Un examen oficial con bromas y reproches
Durante el examen, los árbitros se encontraron también con alguna pregunta elaborada con un tono poco ortodoxo. Una de las cuestiones aparentemente normales proponía la siguiente situación: "El VAR revisa una acción de la fase de ataque previa a un penalti y después de un minuto de revisión, encuentra una evidencia de una infracción previa". La naturaleza de la pregunta no hacía pensar en nada extraño, pero las posibles respuestas dejaron boquiabiertos a los examinados. Una de las opciones planteaba que "tras tanto tiempo, la magia debe imperar". Otra alternativa proponía: "Si la raíz cuadrada del sumatorio de los años del VAR y el AVAR elevado a la potencia numérica de la experiencia del equipo arbitral de campo, menos los años del cuarto árbitro fuera inferior a 100, decidiría apoyar la decisión tomada en el terreno de juego".
Una situación insólita enmarcada en una prueba técnica aprovechada por el CTA para cobrar algunas facturas pendientes.