Eurocopa

Pedri mancha el traje de Italia y clasifica a la selección española

El futbolista del Barça mostró un nivel notable y ya está en los octavos de final de la Eurocopa como primero de grupo después del triunfo por 1-0

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Pedri volvió a completar ante Italia un partido notable.

BarcelonaLa Eurocopa está mejorando el bienestar emocional de los hinchas del Barça. Por el momento. Aún no se ha lesionado ningún futbolista azulgrana, Lamine Yamal se está confirmando como un jugador que puede marcar un antes y un después y Pedri está mostrando un nivel que no se veía desde antes de su desesperante concatenación de lesiones. El canario repitió la obra del día de Croacia en los 70 minutos que estuvo en el terreno de juego y mandó a la selección española hacia el triunfo (1-0) y la clasificación matemática para los octavos de final de la Eurocopa como primera de grupo ante una Italia que solamente aportó argumentos defensivos y que se acabó autosentenciando en el segundo tiempo con un gol en propia portería.

La selección italiana no tuvo ni mucho menos una puesta en escena glamurosa, pese a que su entrenador, Luciano Spalletti, había advertido durante la previa de que saldrían a jugar con el traje de Giorgio Armani. Su equipo se dedicó a resistir, haciendo bueno esta vez el prejuicio del catenaccio, y a punto estuvo de encajar un gol en el primer vendaval del partido, como ya le había ocurrido ante Albania. La primera inspiración de Nico Williams de una actuación brillante por la banda izquierda acabó en un centro dirigido a la cabeza de Pedri, que se encontró con el gigante Donnarumma. Acto seguido fue el jugador del Athletic Club quien tuvo el gol en la cabeza, pero tampoco halló la alegría.

Hay que dejar constancia de que Spalletti también había explicado durante la previa que su equipo se mancharía la indumentaria si era necesario. Y a base de interrupciones, los italianos intentaron infructuosamente aligerar la exaltación futbolística de los españoles, que bailaban al compás de Pedri, y una vez creaban peligro mediante una individualidad de Lamine Yamal y otra la originaban con un disparo lejano de Fabián Ruiz. La única tentativa ofensiva de Italia procedía de los contragolpes, insuficientes para hacer cosquillas a Unai Simón. Un solo disparo de los transalpinos entre los tres palos en todo el partido.

Calafiori desempata el enfrentamiento

De todas formas, la realidad era que en el descanso seguía el empate a cero en el marcador del Veltins Arena de Gelsenkirchen y que al inicio del segundo tiempo la selección española continuó desperdiciando ocasiones de gol. De hecho, Pedri cometió su primer error del partido al rematar desviado desde el interior del área un centro raso del catalán Cucurella. Ante la incapacidad española de marcar, el destino quiso que fuera un defensa italiano, Calafiori, quien se introdujera el balón en su propia portería en el minuto 55. Nico Williams centró, Morata rozó el balón con la cabeza, Donnarumma lo desvió ligeramente y Calafiori remató a gol con la rodilla izquierda.

Lamine Yamal estuvo cerca de hundir aún más a una incomprensible Italia y optar al premio Puskas. Desde la banda derecha de la frontal del área intentó una rosca similar a la que este curso le dio el triunfo al Barça ante el Mallorca. Pero esta vez su intento no encontró la escuadra derecha por centímetros. La misma intención tuvo poco después Nico Williams desde el otro lado. El larguero dio por bueno el 1-0 definitivo y el intento final de Italia a la desesperada no supuso ningún cambio.

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