La geopolítica de un medallero decidido sobre la bocina: las cinco anillas olímpicas del día
El último día de competición en los Juegos Olímpicos de París sirve para decantar el ranking
BarcelonaEl ARA cubre los contenidos más destacados de los Juegos Olímpicos de París en abiertoen este canal de noticias,y ésta es una pieza de resumen de algunas de las noticias más relevantes del día. Son las cinco anillas olímpicas de la jornada. Las últimas hasta dentro de cuatro años.
Estados Unidos, a la cabeza. Uno de los grandes alicientes de la jornada era ver qué país quedaría primero en el medallero de los Juegos Olímpicos de París 2024. Por último, el triunfo de Estados Unidos en una final agónica contra Francia en el baloncesto femenino ha decantado la balanza. La cosa ha ido de un oro. Si las anfitrionas hubieran derrotado a las estadounidenses en Bercy, China se habría llevado este honor con reminiscencia geopolítica, ya que hablamos de las dos grandes potencias económicas del mundo. El ranking queda con Estados Unidos a la cabeza con 40 oros, 44 platas y 42 bronces (126 medallas en total). En segundo lugar, China se ha colgado también 40 oros, pero en total ha sumado 91 metales (contando los 27 de plata y 24 de bronce). Completa el podio Japón con 20 oros, 12 platas y 13 bronces. La delegación española, en decimoquinto lugar, ha mejorado el botín de hace tres años en Tokio: 18 medallas (cinco de oro).
Una prórroga salvada por centímetros. La última medalla estadounidense ha sido, como decíamos, una de las más agónicas de estos Juegos. La reedición femenina de la final masculina de baloncesto ha sido igualmente un partido vibrante, con alternativas en el marcador y un desenlace caprichoso. Si Curry desarrolló a golpe de triple el duelo de los hombres, las malas decisiones de las francesas en los últimos ataques han hecho que las estadounidenses se llevaran la gloria (66-67). La victoria supone la sexta medalla de oro consecutiva para Diana Taurasi, una veteranísima jugadora que, pese a no haber jugado ningún minuto en la final, ha subido al podio a recoger la medalla. Desde Atenas 2004, no ha faltado a ninguna cita olímpica. Tiene 42 años y es un azote habitual de Donald Trump.
Condenada por un caballo. La catalana Laura Heredia había hecho un torneo lo suficientemente bueno en la disciplina de pentatlón moderno, pero en el ejercicio de hípica se ha topado con un problema de comunicación con su caballo. El animal no quería saltar a los jardines de Versalles. Tres rechaces han condenado a Heredia a la eliminación de la prueba y le han dejado sin opciones de medalla. "Cuando hemos entrado en pista ya vi que el caballo estaba inseguro. Hemos tenido algunos problemas técnicos y se ha negado a saltar", explicaba en una entrevista con Eurosport. Los caballos, además, se asignan por sorteo. Mala suerte para la catalana, que ha sido la primera representante de la delegación española en participar en esta disciplina olímpica tan completa (natación, tiro, atletismo, hípica y esgrima).
El bronce eterno del balonmano. Los hispanos defienden el metal a pie ya caballo. Después de París, ya suman cinco medallas olímpicas, todas ellas de bronce. Siempre parecen a punto de caer del podio, pero se rehacen: Atlanta 1996, Sydney 2000, Pekín 2008, Tokio 2021 y París 2024. La selección española de balonmano masculino siempre reaparece para llevarse el premio de menor peso, pero que a menudo sabe a oro. Más cuando se gana cómo se ha ganado la final de consolación contra Eslovenia en estos Juegos: agónicamente, con un solo gol de diferencia (23-22) y con un jugador lesionado en los últimos instantes: el azulgrana Aleix Gómez se ha habido de retirar y ha celebrado el mojón cojo. El conjunto estatal tiene cuatro jugadores catalanes en sus filas. El oro, por cierto, ha sido para Dinamarca, que ha borrado a Alemania en la final (39-26).
Un récord olímpico para cerrar los Juegos. Se le ha adjudicado Sifan Hassan al maratón femenino. Neerlandesa de origen etíope, llegaba a París para revalidar el oro en los 5.000 y los 10.000 metros, pero al final se alzó con la gloria con los 42 kilómetros sobre asfalto. Solo 35 horas después de alcanzar los 10.000, ha corrido más rápido que nunca pese a superar rampas del 13%. Es normal que haya llegado a la meta entre lágrimas.