Bruselas pone en marcha la maquinaria del fondo de recuperación con una primera emisión de deuda de 20.000 millones de euros

La presidenta de la Comisión Europea viaja este miércoles a Madrid para dar luz verde al plan de recuperación español

3 min
La presidenta de la Comisión  Europea, Ursula Von der Leyen.

BruselasLa maquinaria se ha puesto en marcha y con éxito. La Comisión Europea ha hecho este martes la primera emisión de deuda para conseguir el dinero del fondo de recuperación que se empezará a repartir este agosto. Ha captado 20.000 millones de euros, pero la demanda ha escalado hasta los 142.000 millones. Es un paso clave en el proceso de integración de la Unión Europea, porque implica que, aunque sea de manera extraordinaria y temporal, los países de la Unión (también los más reticentes a la deuda como holandeses y alemanes) acceden a endeudarse en una cantidad sin precedentes y de manera conjunta (es decir junto a los más endeudados, como griegos, españoles e italianos) para financiar la recuperación. Pactar este paso supuso casi cinco días de cumbre en Bruselas hace ahora un año y algunas concesiones a los más ortodoxos.

Bruselas ya se había estrenado en octubre en la emisión de deuda europea del fondo SURE para financiar los ERTE, pero las emisiones previstas para el Next Generation superan de largo sus cifras. "Es la transacción sindicada más grande por parte de las instituciones europeas que se ha hecho nunca", ha dicho el comisario de Presupuestos, Johannes Hahn. La Comisión ha emitido bonos a diez años que han tenido una muy buena acogida por parte de los inversores porque se ha captado el doble de dinero del previsto inicialmente, lo cual supone la transacción en bloque más grande de la Unión Europea, que hasta ahora había emitido deuda conjunta solo en cantidades muy menores. Los bonos de la UE emitidos hoy tendrán la máxima calificación y se han colocado con un tipo de interés de solo el 0,08%, por encima de la deuda alemana, considerada la más segura del continente (-0,25%), y mejor que la francesa (0,13%).

Según ha explicado el comisario Hahn, la deuda europea emitida este martes ha quedado en manos principalmente de inversores europeos y en un 30% de Asia y América. Sobre el tipo de inversores, ha asegurado que son bancos centrales, gestores de fondos en un 25%, un 37% fondo de pensiones y un 11% en fondo de seguros. "En general podemos decir que hemos conseguido interesar a inversores a largo plazo", ha concluido el comisario, satisfecho de "la estructura de los inversores". Además, se ha excluido a una decena de bancos de la posibilidad de vender bonos europeos por haber incumplido anteriormente las normas antimonopolio de la UE; según ha avanzado el Financial Times, se trata de entidades como JPMorgan, Citigroup, Bank of America o Barclays.

La previsión del ejecutivo comunitario es captar unos 80.000 millones de euros más este año en bonos a largo plazo y menos cantidad a corto plazo. Con esta cifra, el ejecutivo comunitario cuenta poder repartir el 13% del total del fondo, el adelanto que tiene que servir a los gobiernos para empezar a financiar los planes de reformas a la espera de que el grueso del dinero llegue en 2022. Pero este 13% no empezará a llegar hasta agosto, un mes más tarde de lo previsto inicialmente por la Comisión porque antes de empezar a repartir el dinero hace falta que los gobiernos de toda la UE vayan dando luz verde a los planes de reformas estatales una vez obtengan el visto bueno de la Comisión. En total, Bruselas prevé captar unos 800.000 millones de euros hasta 2026, un 30% de los cuales serán bonos verdes.

Luz verde al plan español

A España le corresponden unos 9.000 millones de euros por este 13%, pero existe la posibilidad de que reciba un segundo pago antes de que acabe el año si se cumplen los hitos pactados en el plan de reformas. Justamente este miércoles la presidenta de la Comisión Europea viajará a Madrid para hacer oficial la aprobación del plan de recuperación del gobierno de Pedro Sánchez. La visita forma parte de una estudiada coreografía de Bruselas que envía así un mensaje político a España y Portugal, los dos primeros países que obtienen la luz verde del ejecutivo comunitario y también dos de los más duramente golpeados por la pandemia. Después de Portugal, viajará a Grecia, Dinamarca y Luxemburgo.

En total, a España le corresponden hasta 140.000 millones de euros de los 800.000 millones de todo el fondo de recuperación. Casi la mitad los recibirá en forma de subsidios, es decir transferencias a fondo perdido, y el resto en forma de créditos baratos.

Las claves
  • ¿Qué supone la emisión de deuda por parte de la Comisión Europea? Implica que la Comisión capta dinero para repartir entre todos los países de la Unión Europea y que son estos quien lo avalan en los mercados. Para hacerlo, fue necesaria su ratificación por parte de todos los parlamentos nacionales, lo cual alargó el proceso hasta que Bruselas ha podido activar la emisión de deuda este martes. Habrá otra este mes y una segunda en julio antes del parón de agosto.
  • ¿Cómo se devolverán los intereses de la deuda? Bruselas cuenta que tardará 32 años en devolver tanto los intereses como el principal, y para hacerlo necesitará unos 50.000 millones de euros anuales. La UE cuenta con varias partidas de recursos propios, pero son insuficientes. Son derechos aduaneros, derechos agrícolas, la transferencia a la UE de un porcentaje del IVA que recaudan los estados miembros, la transferencia que estos estados hacen en función de su renta nacional bruta y también una contribución estatal en función de los residuos de plástico. Para asumir los pagos, la Comisión prevé ampliar las fuentes de ingresos con nuevos impuestos como el mecanismo de ajuste de emisiones de carbono en frontera o por la polémica tasa digital.
  • ¿Cuándo llegarán los fondos a España? Bruselas calcula poder entregar el primer adelanto en agosto, un mes más tarde de lo previsto inicialmente porque hace falta que haya captado suficiente dinero para hacer todas las entregas. El grueso del dinero, sin embargo, llegará el año siguiente a pesar de que existe la posibilidad de un segundo pago antes de que acabe el año si se cumplen los hitos marcados.
  • ¿La luz verde de la Comisión es el último paso? No. Después del viaje de Ursula von der Leyen a Madrid hace falta que los veintisiete aprueben también los planes por su parte en un máximo de cuatro semanas. Los encargados de hacerlo son los ministros de Finanzas y está previsto que den su visto bueno correspondiente a mediados de julio.
stats