¿Qué tipo de árbol de Navidad es más sostenible?
Ante la crisis climática, cada vez más personas se plantean cuál es la mejor opción para el medio ambiente
BarcelonaDurante estas fechas de Navidad muchas personas se encuentran con el mismo dilema: ¿qué es mejor, comprar un árbol natural que después de las fiestas se tirará o uno artificial que durará muchos años? ¿Cuál de las dos opciones es más sostenible?
"La elección del árbol de Navidad más sostenible variará según las circunstancias. Para los que ya tengan un árbol artificial, es mejor seguir utilizándolo en lugar de comprar uno nuevo. Al reutilizar las mismas decoraciones año tras año, el desperdicio innecesario también se reduce", dice el analista de sostenibilidad de Amigos de la Tierra Clare Oxborrow en una entrevista al diario The Guardian.
En un artículo dedicado a esta cuestión, la organización Carbon Trust –que se dedica a certificar la cantidad de gases que emiten las empresas– afirma que un abeto artificial de casi dos metros es responsable de 40 kg de gas de efecto invernadero –cosa que quiere decir que lo tienes que utilizar como mínimo durante 10 Navidades seguidas para que el impacto ambiental sea más bajo de lo que supondría comprar uno natural cada año–. Esto es porque al ser de plástico también tienen huella de carbono. Es por eso que si se tiene la intención de comprar uno, mejor que sea de materiales reciclados, pero si se quiere un árbol natural, el consejo es que haya sido cultivado cerca.
Oxborrow también explica al diario británico que una buena opción sostenible es alquilar un árbol. Un hábito que se está extendiendo en el Reino Unido y que supone alquilarlo durante las fiestas y después devolverlo para que sea replantado y el año siguiente lo utilice otra persona. Pero todavía hay otra opción para los que quieren apostar por la sostenibilidad: después de comprar el árbol, se puede plantar en un tiesto y cuidarlo hasta la Navidad siguiente.
Por otro lado, los expertos destacan que es más importante cómo te deshaces de un árbol natural que no de dónde viene ni cómo ha llegado hasta tu casa. Si se tira acabará en un vertedero y el metano que emite en la descomposición es nocivo, así que es mejor darlo al servicio de recogida de árboles de Navidad que cada vez hay en más ciudades, porque ellos lo triturarán y se utilizará en parques y jardines de la zona.
