Bolsonaro y Biden, cara a cara por primera vez

BarcelonaEl presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y su homólogo de Brasil, Jair Bolsonaro, se encontrarán por primera vez cara a cara este jueves, después de que el mandatario brasileño haya aceptado participar en la novena Cumbre de las Américas, que se celebra esta semana en Los Ángeles (Estados Unidos). El encuentro tendrá lugar pocos meses antes de las elecciones en Brasil y solo dos días después de que Bolsonaro pusiera en entredicho la victoria de Biden en 2020 y elogiara, como es habitual, al expresidente Donald Trump.

"El pueblo estadounidense es el que habla de esto [de fraude electoral]. Yo no discutiré la soberanía de otro país, pero Trump lo estaba haciendo muy bien", dijo en una entrevista en televisión. "No queremos que esto pase en Brasil", añadió Bolsonaro, que a menudo ha puesto en cuestión el sistema de voto electrónico del país latinoamericano. El presidente, que va por detrás de su rival de izquierdas, Luiz Inácio Lula da Silva, apuntó que la reunión con Biden podría marcar un nuevo comienzo para la relación entre Estados Unidos y Brasil, pero que todo dependerá de cómo actúe el mandatario norteamericano en la reunión.

Según la Casa Blanca, la reunión servirá para tratar temas como la inseguridad alimentaria, el cambio climático y la recuperación de la pandemia de covid-19, entre otros. Por su parte, un representante del ministerio de Exteriores brasileño ha dicho a la agencia Reuters que esperan que en el encuentro los dos mandatarios hablen sobre todo de comercio, cooperación en defensa e inversiones en energía y minería.

Vetos y boicots

La presencia del líder ultraderechista compensa, en parte, ausencias destacadas como la del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador. El boicot mexicano, sin embargo, es parcial, porque el mandatario enviará a Los Ángeles una delegación encabezada por el secretario de Relaciones Exteriores. López Obrador ha justificado su ausencia porque Washington ha excluido de la cumbre a Cuba, Venezuela y Nicaragua argumentando que "no son ejemplos de una gobernanza democrática", según manifestó el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken. "No iré a la cumbre porque no se invita a todos los países de América y yo creo en la necesidad de cambiar la política que se ha impuesto desde hace siglos: la exclusión, querer dominar sin ninguna razón, no respetar la soberanía de los países", argumentó.

Esta es la segunda vez que Estados Unidos es anfitrión de la Cumbre de las Américas, después de la primera edición, que se celebró en 1994 en Miami. Pero los vetos y los boicots han descafeinado un encuentro que pretende reforzar los lazos con América Latina después del mandato de Donald Trump y mostrar una América unida en un momento de conflicto con Rusia y China. Además de México, también han rechazado viajar a Los Ángeles el presidente de Bolivia, Luis Alberto Arce; la de Honduras, Xiomara Castro, y el de Guatemala, Alejandro Giammattei.