Lentejas inteligentes y un concierto de violín desde el espacio: termina con éxito la misión Polaris Dawn
Los cuatro astronautas civiles de Space X han vuelto a la Tierra sanos y salvos
BarcelonaLa misión Polaris Dawn de la empresa de Elon Musk SpaceX ha terminado este domingo con un éxito rotundo. Los cuatro astronautas amateurs que viajaban a bordo de la nave Crew Dragon, los primeros en dar un paseo espacial privado, han vuelto a la Tierra sanos y salvos. Su cápsula volvió a entrar en la atmósfera y cayó suavemente, con cuatro paracaídas, sobre el golfo de México, cerca de Florida. El estribillo se ha completado con éxito y el personal de SpaceX desde la Tierra ha estallado en aplausos, una vez más, después de los cinco días que ha durado la misión.
El multimillonario Jared Isaacman, que comandaba la misión, el expiloto de aviación Scott Poteet, conocido como Kidd, y las ingenieras de SpaceX Sarah Gillis y Anna Menon han estado cinco días en órbita alrededor de la Tierra. En este tiempo, han llevado a cabo una cuarentena de experimentos científicos para comprobar las condiciones humanas en el espacio, han batido varios récords históricos e incluso han realizado un concierto de violín desde el espacio.
El plato fuerte de la misión fue el paseo espacial que el jueves dieron Isaacman y Gillis para probar los nuevos trajes espaciales confeccionados por la empresa de Elon Musk, que aún están por perfeccionar. Más que un paseo fue una salida, porque los dos astronautas, los primeros civiles en hacerlo, sacaron el cuerpo de la cápsula sólo hasta las rodillas y estuvieron en contacto directo con el espacio exterior durante menos de diez minutos cada uno . En ese breve espacio de tiempo pusieron a prueba la tecnología de los nuevos trajes espaciales y, con algunos ejercicios de brazos, también su resistencia.
Todo el proceso duró dos horas, mucho menos de lo que suele durar un paseo espacial en la Estación Espacial Internacional, y la mayor parte del tiempo se dedicó a despresurizar toda la nave mientras se presurizaban los trajes espaciales, ya que las Dragon no tienen sala despresurizadora. Con esta actividad extravehicular (EVA, en sus siglas en inglés), Isaacman y Gillis se convirtieron en las personas 264 y 265 que dan un paseo espacial y en las primeras que no son astronautas profesionales. Pero ella es ya la persona más joven que lo ha hecho, con 30 años.
Pero, además de esta salida, los cuatro tripulantes de la Polaris Dawn 1 han llevado a cabo una cuarentena de experimentos científicos, la mayoría destinados a comprobar los cambios en las condiciones físicas humanas en un estado sin gravedad . El objetivo era recopilar todos los datos posibles para hacer más seguros los viajes espaciales y preparar así las futuras misiones a la Luna ya Marte que Elon Musk tiene entre ceja y ceja. Una de las más espectaculares ha sido el uso de una lentilla con tecnología inteligente que midió la presión ocular y otros parámetros en los ojos de los tripulantes para analizar cuáles son los efectos de la gravedad cero. Se ha comprobado que un porcentaje notable de los astronautas que han estado en el espacio han perdido visión, por lo que la misión Polaris Dawn quería estudiar qué hace exactamente la gravedad cero en los líquidos y tejidos oculares para tratar de evitarlo.
Otro de los experimentos ha llevado a los tripulantes de la nave a introducirse una cámara endoscópica por la nariz hasta la garganta para comprobar también el comportamiento de los líquidos y las mucosas internas en los conductos respiratorios. Otro de los aparatos que llevaban para poner a prueba era lo que han llamado una "ambulancia en una caja", un utensilio capaz de monitorear las constantes vitales de los astronautas, hacer diagnósticos y enviar los datos a la Tierra en tiempo real a través de los satélites Starlink, propiedad también de Elon Musk.
Pero la guinda del pastel ha sido un concierto de violín desde el espacio. La ingeniera Sarah Gillis interpretó una canción de John Williams, de la última parte de la saga de Star Wars, desde el interior de la Dragon mientras orbitaba la Tierra. A su interpretación se unieron orquestas de seis países diferentes (Estados Unidos, Venezuela, Brasil, Haití y Uganda), pero la fusión musical no fue simultánea sino a posteriori con la grabación de Gillis. El concierto no se anunció previamente ni tampoco se retransmitió en directo a través de los satélites Starlink, pero la grabación final publicada en X –como todos los vídeos de la misión– es igualmente espectacular.
En la retransmisión en directo del estribillo se ha podido ver incluso cómo salían uno a uno los cuatro astronautas civiles de la cápsula, una vez recuperada por una barca de SpaceX. La primera ha sido Anna Menon, seguida de Sarah Gillis, Kidd Poteet y finalmente Isaacman, todos ellos muy alegres y con su traje espacial deshinchado. Se ponía fin así a los cinco días de esa primera misión Polaris Dawn, a la que seguirán otras dos.
Otro récord histórico que ha batido esta primera misión ha sido el de orbitar la Tierra a más distancia que ninguna otra nave, a 1.400,7 kilómetros, superando la Gemini 11 de la NASA, que en 1966 orbitó nuestro planeta a más de 1.300 kilómetros. A esta altitud, la Crew Dragon se ha puesto a prueba atravesando los llamados Cinturones de Van Allen, que rodean la Tierra y que concentran grandes cantidades de partículas cargadas de alta energía, generadas por el contacto del campo magnético terrestre con el viento solar.
Con este récord, Gillis y Menon se han convertido en las mujeres que más lejos han viajado de la Tierra de la historia, a la espera de que la misión Artemis 2 de la NASA ponga la primera mujer en la órbita de la Luna a finales del próximo año (si no sufre retrasos). Todo ello, una misión de éxito para el programa espacial privado de Elon Musk, que ya ha anunciado que quiere enviar humanos a Marte en sólo cuatro años, un plazo que todos los expertos ven completamente inviable.