Noruega identifica el cuerpo de Artin, un bebé curdo que se ahogó intentando llegar a Inglaterra
La patera en la que cruzaba el canal de la Mancha con su familia se hundió en enero
BarcelonaLa policía de Noruega ha confirmado la identidad de un cuerpo encontrado en la costa a principios de año. Se trata de un niño de poco más de un año que se llamaba Artin y que murió en el canal de la Mancha después de que se hundiera la pequeña barca de pesca en la que viajaba con cuatro miembros más de su familia. Los cuerpos de los padres y los dos hermanos de Artin se habían recuperado, con un total de 19 cadáveres, pero el bebé se había dado por desaparecido. Según la ONG Hengaw, en la patera iban 28 personas. Intentaban llegar a Inglaterra desde Francia.
La policía de Noruega ha concretado que el cuerpo lo encontraron dos agentes el día de Fin de Año en la costa suroeste, cerca de Karmoy. Como no encajaba con ninguna denuncia de desaparición, se hizo un perfil genético. "Profesionales del departamento de ciencia forense de la Universidad de Oslo consiguieron encontrar perfiles de ADN compatibles", explica la declaración policial noruega. Fue entonces cuando se pudo informar a la familia y confirmar la identidad de Artin.
Los restos del menor se trasladarán a Irán para que puedan ser enterrados. "Esta historia es trágica, pero como mínimo hemos podido dar una explicación a los familiares", ha dicho Camilla Tjelle Waage, jefa de investigaciones de la oficina policial de Karmoy.
La barca en la que viajaba la familia se hundió en el Canal en octubre de 2020. Rasolu Iran-Nejad, de 35 años; Shiva Mohammad Panahi, también de 35 años; Anita, de nueve, y Artin, de seis, murieron. La familia era de la ciudad de Sarasht, al oeste de Irán, cerca de la frontera con Irak. Quince migrantes que viajaban en la misma barca fueron rescatados y trasladados al hospital y se abrió una investigación sobre el hundimiento en Dunkerque.
Un crudo final de un viaje por un futuro mejor
Según las investigaciones, la familia abandonó Sardasht hacia Turquía en agosto de 2020. Ahí esperaron a que algún contrabandista los llevara en barca hasta Italia, donde fueron trasladados de nuevo hasta el norte de Francia. El 27 de octubre, en un quién sabe si último viaje en busca de una nueva vida, tuvo lugar el accidente. Los cuerpos de todos los miembros de la familia se recuperaron cerca del lugar del naufragio, pero el hijo menor de la familia desapareció. El mes de enero de 2021 el cuerpo llegó a la costa de Noruega.
Miles de refugiados curdo-iraníes ponen sus vidas y las de sus familias en manos de contrabandistas para poder llegar a Europa cada año. La región curda en Irán sufre persecución política y discriminación económica.