La UE quiere endurecer las sanciones por crímenes medioambientales
Propone penas de hasta 10 años de prisión cuando afectan a la salud humana
BarcelonaLa Comisión Europea quiere perseguir con más contundencia los crímenes medioambientales. La propuesta de nueva directiva europea presentada este miércoles en Bruselas plantea la tipificación de nuevos crímenes como el comercio ilegal de madera, la exportación ilegal de residuos o la extracción ilegal de agua, por ejemplo, y establecer sanciones de manera coordinada que vayan desde multas hasta penas de prisión, pasando por la exclusión del acceso a financiación pública. En el marco del movimiento global creciente que reclama la tipificación del ecocidio en los códigos penales nacionales e incluso en el Tribunal Penal Internacional, la Unión Europea mueve pieza para intentar coordinar a nivel comunitario un endurecimiento de las sanciones y la persecución de estos tipos de delitos.
Cuando los crímenes que afectan al medio ambiente "causan o pueden causar la muerte o heridas graves a personas", la Comisión propone imponer penas de hasta 10 años de prisión. La nueva directiva también ofrecerá mejores herramientas y formación a los cuerpos de seguridad para perseguir este tipo de crímenes.
Los crímenes medioambientales son la cuarta actividad criminal más importante a escala mundial, solo por detrás del tráfico de drogas, el tráfico de personas y la falsificación. Un crimen organizado que crece a un ritmo de entre el 5% y el 7% anual. El negocio del comercio ilegal de especies animales, por ejemplo, mueve cada año entre 7.000 y 9.000 millones de euros, mientras que el negocio ilegal de madera, que genera deforestación a gran escala, mueve también unos 6.000 millones de euros cada año en todo el mundo.
A escala europea, además, las exportaciones ilegales de residuos plásticos son también un grave problema. Muchos países envían sus desechos para que sean teóricamente reciclados o incinerados en países del Sudeste Asiático o de África, a menudo a través de canales ilegales. Este mercado de residuos ilegal mueve cada año entre 4.000 y 15.000 millones de euros dentro de la Unión Europea, según datos de la Comisión Europea.
En total, las pérdidas económicas que se derivan de todos los crímenes medioambientales a escala mundial podrían subir hasta los 230.000 millones de euros anuales.