Las 15 mejores series del 2022 (y dónde las puedes ver)
Comedias osadas, historias galácticas reinventadas y dramas intensos llenan el ranking del año
BarcelonaEl alud de estrenos seriófilos que vivimos cada año hace que cueste discernir lo bueno de lo malo. Desde el ARA queremos contribuir a establecer cuáles han sido las series imprescindibles del 2022 con el ranking de lo mejor del año. Para elaborarlo, el equipo de seriófilos del diario –formado por la sección de Media, las críticas Eulàlia Iglesias y Mònica Planas, el crítico Gerard Casau, los periodistas de Cultura Núria Juanico y Jordi Garrigós, y la jefa de Estilos Thaïs Gutiérrez– ha votado sus favoritas de entre un centenar de títulos. El resultado es un listado que combina repetidores de otros años con auténticas sorpresas nacidas este 2022. Los lectores también pueden decir la suya votando en la encuesta sobre cuál ha sido la mejor serie del año.
Disney+
El creador, músico y actor Donald Glover profundiza en la exploración de una Atlanta fantasmal, donde las observaciones irónicas sobre la escena de hip hop de la Costa Este van de la mano con reflexiones de carácter existencialista. Esta es una serie sobre perdedores, que habla de cuestiones de raza e identidad con una perspectiva original, amable, pero sutilmente incisiva. Es, también, una ficción calidoscópica y que puede enganchar al espectador desde múltiples ángulos: Glover no es muy fan de los arcos narrativos que dominan toda la temporada, así que la serie está salpimentada de episodios botella, autoconclusivos, que se permiten jugar y experimentar.
Para: Los que aprecian la comedia meditativa de autor.
AppleTV+
AppleTV+ hace tiempo que ha dado un golpe encima de la mesa en cuanto a la calidad de sus series, y entre sus mejores propuestas está esta producción coreano-americana centrada en varias generaciones de una misma familia marcada por la emigración. Desde sus títulos de créditos iniciales, candidatos a ser uno de los más sugerentes de la televisión actual, hasta detalles tan exquisitos y aparentemente insignificantes como la textura del arroz que comen los personajes, Pachinko exuda sensibilidad y belleza en todos y cada uno de sus planos. Amores desafortunados, opresión y supervivencia van de la mano en esta poco conocida serie que adapta la novela homónima de Min Jin Lee.
Para: Los amantes de las sagas familiares y admiradores de la belleza.
Filmin
¿Adorables u odiosas? ¿Punkies auténticas o de postal? Autodefensa provocó oleadas de polarizaciones ya antes de estrenarse. Una vez vista por el equipo del ARA, el veredicto ha sido positivo: la serie exuda honestidad y ayuda al espectador a comprender los resentimientos (muchos) y esperanzas (pocas) de un sector de la generación-Z, con una visión heterodoxa sobre el feminismo y la sexualidad. La entrega de Belén Barenys y Berta Prieto, dándolo todo, y la estética underground que aporta Miguel Ángel Blanca convierten a Autodefensa en una serie de fuerte sabor propio en un mundo audiovisual que tiende a la homogeneización.
Para: Quien quiera hacer turismo por la cultura de los postadolescentes actuales.
Disney+
Meses después de estrenarse en los Estados Unidos, The bear llegó aquí y desató la locura colectiva. La historia de un chef estrella que se mete a intentar reflotar el establecimiento de bocadillos de su difunto hermano cultivó una legión de fans enganchados a las desventuras y angustias de Carmy (Jeremy Allen White). Con un formato eficaz –¿quién le hace ascos a episodios de media hora?–, un ritmo trepidante y un abanico de personajes muy bien definidos, consiguió convertirse en la serie del momento, un hito nada fácil si tenemos en cuenta el alud de estrenos a la que están sometidos los espectadores. The bear no es una serie sobre un restaurante, es una serie sobre la vida, la pasión por un oficio y los vínculos familiares, tanto los de sangre como los generados en el día a día.
Para: Los comilones y los que no tienen miedo de las relaciones intensas.
Netflix
La adolescencia, si todo va bien, es una etapa con un principio y un final, y en el caso de la de las protagonistas de Derry girls sabíamos que el adiós llegaría tarde o temprano. Despedirse nunca es fácil, pero Lisa McGee, creadora de la serie, ha construido una última temporada que conjuga todas las fortalezas que la comedia ha tenido desde sus inicios: la justa medida de histrionismo y las dosis adecuadas de sensibilidad. Más allá de momentos pop impagables –el homenaje a las Spice Girls, el baile de Orla por la calle–, su final coge por las solapas el conflicto de Irlanda del Norte dejándonos el corazón encogido pero también con una brizna de esperanza. Y si sois de los que os gusta cazar caras famosas, en cada episodio podréis detectar un cameo destacado.
Para: Los nostálgicos y defensores de las amistades para toda la vida.
Movistar+
¡Quién nos iba a decir que el documental sobre el grupo que revolucionó los 80 con sus abanicos sería el sustituto perfecto de Succession! Aquellos espectadores que echen de menos luchas fraticidas se lo pasarán bien con esta docuserie que va mucho más allá de la guerra interna –todavía abierta– de Locomía. Como señalaba Eulàlia Iglesias en su crítica, es un relato de la homofobia imperante en la industria musical y un retrato de España desde los años de la Transición hasta los Juegos Olímpicos. También es una inmersión total en dos egos desatados.
Para: Espectadores que saben que la cultura pop también es cultura.
HBO Max
Después de una primera temporada brillante, Hacks no solo ha sabido mantener el tipo, sino que ha sido capaz de subir su nivel profundizando en la personalidad de sus dos protagonistas, Deborah y Ava, y afinando su tempo cómico. Las dos actrices principales se mueven como pez en el agua dentro de la serie, pero los secundarios no se quedan atrás (mención especial para Megan Statler como la imprevisible secretaria Kayla). La segunda temporada es una auténtica delicia que profundiza en temas como la posición de las mujeres en el mundo de la comedia y la relación entre mentora y discípulo.
Para: Espectadores que tienen una relció de amor-odio con sus jefes.
Amazon
La serie de superhéroes para la gente a la que no les gustan los superhéroes ya tiene su fórmula consolidada: un personaje indestructible que es a la vez un déspota y un cúmulo de inseguridades íntimas, referencias al auge de la ultraderecha, humor negrísimo, y algunas dosis de violencia excesiva (y, si puede ser, escatológica). Pero, a pesar de la falta de sorpresa, en su tercera temporada consigue mantener todavía el ritmo narrativo y la mala leche en general. Esta capacidad de ir más allá de la boutade es la que consigue elevarla a la Champions seriófila.
Para: Los amantes de las series sin freno y excesivas.
HBO Max
Sam Levinson rubricó una segunda temporada de Euphoria genial y con (todavía) más ambición visual. La obra de teatro que se narraba dentro de la serie, donde presunta realidad y ficción se confundían, fue un ejercicio metanarrativo de primer orden, perfectamente ejecutado y dirigido. Pero es que, incluso obviando los méritos de la compleja puesta en escena y las florituras formales, la historia del descenso de Rue (magnífica Zendaya) a los infiernos de la droga, el retrato generacional desesperanzado y el canto a la sexualidad libre –con todos sus dolores– convierten este título en uno de los más ambiciosos del momento, también desde el punto de vista de mensaje.
Para: Seriófilos que quieren al mismo tiempo melodrama y modernidad.
Disney+
Disney está estirando tanto la franquicia de Star Wars que corría el riesgo de que los espectadores se dejaran de tomar seriamente sus series galácticas. Pero entonces apareció Andor y el panorama cambió. Alejada de los jedis y de mucha de la parafernalia que acompaña el universo de George Lucas, la nueva serie de Star Wars va de menos a más para mostrarnos el nacimiento de una revolución y recordarnos una cosa que quizás ya sabíamos, pero que habíamos olvidado: el mundo, sea galáctico o no, no está formado solo por las clases dirigentes, también existe el pueblo raso. Algunas de las escenas televisivas más emocionantes de este año las encontraréis en Andor, una ficción que va más allá de la etiqueta “serie de Star Wars”.
Para: Idealistas y revolucionarios de salón.
AppleTV+
Jackson Lamb es el antihéroe de este año. A este agente del MI5 británico habría que lanzarlo con una piedra atada al Támesis: sucio y piojoso, comanda una unidad desastrosa de espías descastados que el cuartel general rechaza, y él se complace en insultarlos siempre y recordarles su fracaso. Pero detrás la capa de manteca, exterior e interior, hay alguien con los métodos fascinantes de la vieja escuela y que protege a los suyos a pesar de los abusos verbales. Con dos temporadas estrenadas este 2022, Slow horses se ha convertido en la serie de espías de referencia, donde la intriga y un cierto humor sarcástico retratan el lado opaco de la política.
Para: Fans de los actores de carácter y las tramas retorcidas.
AppleTV+
Probablemente el final de temporada que más ha hecho chillar al espectador de emoción este 2022. Esta distopía lleva al límite la idea de la alienación laboral: ¿y si pudiéramos manipular el cerebro de forma que, una vez dentro del trabajo, no tuviéramos ningún recuerdo de nuestro yo en el exterior? ¿Seríamos dos personas? ¿Y si el yo de la oficina quiere escaparse, pero el doméstico se lo impide? ¿Y cómo comunicarse? Ben Stiller dirige esta pesadilla de tensión creciente con unos cuantos actores de lujo: Adam Scott, Christopher Walken o John Turturro. Muy fría en su imagen, contiene dosis de mala leche y humor negrísimo sobre el vacío emocional que promueven los trabajos mecanizados.
Para: Quien le guste que le hurguen el cerebro.
HBO Max
David Simon lo ha vuelto a hacer. El creador de The wire vuelve a su Baltimore para investigar el porqué profundo de un caso real de abusos policiales. Y, una vez más, hay que examinar todo el ecosistema político, social y racial para comprender cómo se abre paso la corrupción. Valiente en su denuncia, la serie no se conforma con las respuestas inmediatas y, sin inhibirse a la hora de señalar las responsabilidades individuales, desnuda las podredumbres estructurales que no lo son solo de esta ciudad del este de Estados Unidos. Las interpretaciones sólidas y una escritura directa a la mandíbula completan la fórmula de esta miniserie.
Para: El espectador concienciado que necesita mucha proteína.
Filmin
En un año en el que hemos hablado de salud mental más que nunca, In my skin toca la tecla justa. Brutal y sin muchos miramientos, esta serie sobre la relación entre una estudiante y su madre, que sufre trastorno bipolar, en el contexto de una Gales obrera y empobrecida es un arma de destrucción masiva para corazones sensibles. Para poder levantar una historia como la que quiere explicar Kayleigh Llewellyn, que se basa en su propia experiencia, hacen falta unas interpretaciones tan robustas como unas cariátidas, y Gabrielle Creevy y Jo Hartley, hija y madre, logran el reto sobradamente. El plano final de la serie es de los que se quedan clavados en la retina.
Para: Espectadores con compromiso social.
HBO Max
Cuando HBO anunció que habría una segunda parte de The White Lotus muchas cejas se levantaron en señal de incredulidad e, incluso, desaprobación. Bien, ha llegado el momento de pedir perdón. El viaje a Sicilia que ha montado Mike White es una de las experiencias más intensas y divertidas que hemos vivido este año. Dejamos atrás la crítica social y la hiperventilación de la primera temporada, aquí hemos venido a divertirnos sin dejar de criticar y despreciar a los ricos absurdos. Más allá de sus diálogos penetrantes y situaciones delirantes, la grandeza de The White Lotus está en los pequeños detalles: el cambio de expresión de Daphne cuando descubre una traición, las miradas asesinas de Harper y las lágrimas de Valentina. Y, evidentemente, un recuerdo especial para su sintonía, una música endiablada que genera unas ganas irrefrenables de salir de fiesta.
Para: Chismosos.
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'Better Call Saul'
Netflix
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'Dahmer'
Netflix
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'La Unidad'
Movistar+
- 'The split'