Se acerca una semana de los barbudos sin frío
Más solo hoy que mañana. El domingo el garbí hará subir los termómetros

Nos estamos acercando al momento del año en el que climáticamente la temperatura toca fondo. La tradición sitúa este momento en la semana de los barbudos, por la concentración de los días dedicados a san Pablo ermitaño, san Maur abad y san Antonio abad, los tres entre el 15 y el 17 de enero. La semana que tiene estos santos es considerada la más fría del año, y en este caso la tradición es precisa, porque si tomamos el período 2009-2020, efectivamente los datos revelan que es a mediados de enero cuando climáticamente la temperatura toca fondo en Cataluña.
Este año, sin embargo, después de casi un mes seguido en el que la temperatura se ha comportado con bastante normalidad (si se toma como referencia el período reciente 2009-2020), la semana de los barbudos coincidirá con una nueva situación de temperaturas muy altas para la época.
Este sábado el ambiente aún será de invierno, pero las máximas subirán bastante, sobre todo en comarcas interiores. Por la mañana se han observado inversiones térmicas, con heladas intensas en el Pirineo, en los valles, mientras que en cota alta el termómetro no ha bajado tanto. Destacamos algunas mínimas:
- Das: -11 °C
- Puigcerdá: -7 °C
- la Tosa de Alp: -1 °C
- Guardiola de Berguedà: -5 °C
- Praderas: -7 °C
- Les Borges Blanques: -6 °C
- San Sadurní de Anoia: -3 °C
- el Montmell: 4 °C
- Viladecans: 3 °C
La temperatura del mediodía irá al alza, tanto en la montaña como en el interior y el sur de Catalunya. Las máximas se moverán alrededor de los 15 °C en el litoral y el prelitoral, y se moverán entre los 8 y los 13 °C por el interior.
A partir del domingo el ambiente será cada vez más suave: el termómetro subirá más de 5 grados en general y se marcharán tanto el frío de noche y de primera hora como el del mediodía. La máxima en Girona podrá superar los 17 °C y en el campo de Tarragona o en las Terres de l'Ebre se llegará fácilmente a los 19 o 20 °C.
El lunes algunas máximas volverán a superar los 20 °C en las Terres de l'Ebre y es posible que la temperatura no toque techo hasta el miércoles.

En medio puede haber altibajos. Los días que sople viento seco de poniente el ambiente será prácticamente primaveral al mediodía, pero el martes, por ejemplo, es posible que sople viento más húmedo en la costa, lo que haría bajar las máximas repentinamente al este.

A largo plazo el escenario es muy incierto: tanto es posible que el próximo fin de semana sea casi de veranillo como que vuelva un frío muy vivo. A estas alturas parece un poco más probable una nueva bajada de la temperatura que siga la suavidad.
En cuanto al estado del cielo, este fin de semana el tiempo será tranquilo y con menos nieblas a primera hora . El sábado el sol predominará, pero por la tarde llegarán nubes por el oeste que sobre todo enturbiarán el cielo en la Comunidad Valenciana y en las Terres de l'Ebre. El domingo las nubes serán más abundantes en general, aunque no llueva a ninguna parte.
A partir del domingo por la noche reaparecerán algunas precipitaciones en el Pirineo occidental con una cota de nieve que se situará en torno a los 2.000 metros.

La próxima semana se presenta húmeda en muchos sectores del centro y del oeste de la Península, pero como suele ocurrir con las perturbaciones que llegan del oeste no es necesario poner demasiadas esperanzas de que lleguen lluvias destacables a Cataluña, como mínimo durante la semana lectiva. El frente que llegará entre el martes y el miércoles podría dejar algunas escasas precipitaciones en muchas comarcas del oeste, pero es difícil que más allá del Pirineo occidental puedan ser lluvias destacables.

Los mapas de probabilidad de que se lleguen a acumular más de 5 l/m² por día hacen pensar que en el Pirineo occidental sí habrá algunas lluvias y nevadas destacables a mediados de la próxima semana, pero en general, al menos hasta el fin de semana, es poco probable que llueva con algo de ganas.
