El análisis de Antoni Bassas: 'Bravo, ministro: la culpa de Cercanías es del vandalismo catalán'
Es de traca: "Las apedreadas son un fenómeno prácticamente catalán". Entre enero y marzo, 90 días, sólo ha habido 12 días de servicio normal. ¿Eso también es culpa de los grafiteros y "del apedreamiento catalán?"

Todo sigue girando alrededor de los aranceles de Trump, y dado que su sistema de gobierno es el caos, ayer decidió suspender 90 días las nuevas tarifas a todo el mundo excepto en China, a la que aún le ha encarecido más los productos con un arancel del 125%, de castigo. ¿Por qué lo decidió? Pues según el Washington Post, porque estuvo viendo por la tele senadores republicanos y economistas que, pese a ser de su cuerda, estaban preocupados por las consecuencias, hizo unas cuantas llamadas y decidió la moratoria por sorpresa. Trump negocia desde el caos, gobierna de los del caos. ¿Resultado? Hoy las bolsas se dispararon. Sin embargo, continúa la guerra comercial con China, que es la manera de discutir a los chinos quién manda en el mundo, de poner América primero; bueno, de ponerse él primero. Pero cuidado, porque el 10% de arancel que todavía se mantiene es muy difícil de soportar para las empresas que exportan a Estados Unidos.
Mientras, en este lugar donde el mundo se llama Cataluña, también tenemos un caos, local, llamado Rodalies. En el capítulo deesta mañana hemos tenido dos averías, en Castellbisbal y en Fabra i Puig, en Barcelona, que han alterado la circulación de la R3, la R4, la R7 y la R8. Una de las averías ha sido a causa de unas obras. Total, gente media hora esperando el tren.
Y ahí sale el ministro responsable, Óscar Puente. Ayer intervino en el Congreso. A la pregunta de cuántas de las incidencias se deben a la "dejadez o falta de inversión" del gobierno de Pedro Sánchez, Puente contesta: "Absolutamente ninguna". Y lo remata así:
"Enero del año 2024. Un tercio de los actos de vandalismo que suceden en toda la red española se producen en el área de Barcelona. Un 60% de las apedreadas. Debo decir que las apedreadas son un fenómeno prácticamente catalán. Es que no se apedrean trenes en otras zonas de España".
Es de traca: "Las apedreadas son un fenómeno prácticamente catalán". Puedo imaginarme al ministro salivante de pensar que podría calificar de catalán el vandalismo contra los trenes. Podría haber dicho que es un fenómeno que se da más en Catalunya, pero dice que "es catalán".
Y entonces, como Puente es de ese tipo de políticos de colmillo retorcido, que siempre van al ataque y nunca tienen la culpa de nada, dice:
"Un de cada cinc accionaments del dispositiu d'alarma, a tot Espanya, es produeix a Catalunya. Els grafiters a Catalunya ara han escollit una estratègia que és que no s'esperen que pari el tren. Accionen l'alarma, baixen del tren, el pinten i marxen. A mi m'agradaria sentir-los a vostès parlant d'això, també, perquè això no és un problema del prestador del servei, alguna responsabilitat deuen tenir vostès en això".
Ah, no, que pinten o que apedreen donde tren de Renfe no es problema de Renfe. ¿Han visto ustedes si Aena deja que la gente vandalice los aviones? ¿O que Hacienda deje pintar las paredes de sus delegaciones? Señor ministro, entre enero y marzo, 90 días, sólo ha habido 12 días de servicio normal. ¿Eso es también culpa de los grafiteros y "del apedreamiento catalán"?
¿Las escaleras y los ascensores estropeados desde hace semanas tampoco son un problema del prestamista del servicio? ¿Cuándo un rayo quema una catenaria es por vandalismo? ¿Cuándo esta mañana hay gente que ha esperado media hora el tren por unas obras en un túnel, esto es vandalismo? ¿Cuándo hay trabajadores del prestamista del servicio que hacen sabotajes porque los señores no quieren ser traspasados a la Generalitat, esto es por culpa de un fenómeno catalán? ¿Cuándo los viajeros no reciben información alguna es también culpa de las piedras?
¿Qué será lo siguiente que nos pedirá, ministro, que le lamemos el culo, como a Trump?Además de soportar la humillación diaria de un mal servicio debemos aguantar al ministro. Presidente Isla, no la estamos sintiendo.
Buenos días.