¿Bebes dos litros de agua al día? Un nuevo estudio científico asegura que te pasas de frenada

¿Quién dijo que se tenía que beber dos o tres litros de agua al día? Cada persona necesita beber una cantidad diferente según múltiples factores, como por ejemplo la complexión física. Un estudio publicado en la revista Science asegura que la recomendación genérica es excesiva para gran parte de la población, aparte de que tampoco se basa en ningún estudio científico. Es más, “muchos de los científicos ni siquiera sabemos de dónde proviene esta afirmación”, ha dicho Yosuke Yamada, del Instituto Nacional de Innovación Biomédica, Salud y Nutrición de Japón, al diario The Guardian.

Aquí en casa, el médico de medicina interna del Hospital Clínic Ramon Estruch afirma que la cantidad que cada persona necesita beber varía según “la edad, el sexo, el peso corporal, la composición corporal, la actividad física que haga, la forma física y también las condiciones ambientales donde viva” (la altura, la latitud, la humedad y la temperatura también se tienen que tener en cuenta).

Según Estruch, que también es profesor en las facultades de Medicina, Enfermería y Farmacia de la Universitat de Barcelona, el estudio ha revelado una obviedad, pero no por eso se debe ningunear, "dado que está hecho con mucho rigor, y ha analizado a un espectro grande de población de diferentes países”. A continuación, el médico subraya que “el agua la adquirimos por alimentos, además de las bebidas, así que no necesitamos solo beber en forma líquida”.

Por otro lado, sostiene el médico del Hospital Clínic de Barcelona que “se tiene que hilar fino con la recomendación de beber una cantidad tan grande de agua en un momento de sequía como el que vivimos actualmente”. En este sentido, para el médico del Hospital Clínic de Barcelona el estudio es muy interesante básicamente por este aspecto, porque a menudo se habla del ahorro de agua gris, la del uso doméstico, pero no de la potable, que con el estado actual de sequía se cree que estaría garantizada durante un año entero. L'Agència Catalana del Aigua cifra en un 33% las reservas actuales en las cuencas internas de los embalses (según datos actualizados del 25 de noviembre).

Para acabar, la médica Susana Domínguez, especializada en nutrición, recuerda que el exceso en la ingesta de agua podría hacer que “el estómago se llenara más, y que la digestión pudiera ser más complicada, pero para que esto pasara estaríamos hablando de grandes cantidades de agua líquida”. Por el contrario, beber durante las comidas es recomendable porque ayuda a la tarea digestiva (y no al contrario, como a veces se ha dicho), y beber por la mañana, después de horas sin beber, también, porque hace falta que el cuerpo recupere el agua que ha consumido durante la noche.