Es insoportable

Es insoportable saber que habrá gente que se morirá de hambre o de un disparo, o que será violada en Ucrania; es insoportable pensar en los pobres padres de estos pobres soldados rusos; es insoportable saber que no vale la pena, que se podía haber evitado; es insoportable pensar que todas las mujeres con hijos que ya están aquí contemplan la posibilidad de ser viudas y es insoportable que los hijos contemplen la de ser huérfanos de padre; es insoportable saber que a la larga, pero no muy a la larga, estas futuras viudas y estos futuros huérfanos de padre también pasarán de moda y serán un estorbo porque suficiente trabajo tendremos para pagar la luz y el petróleo y la hipoteca; es insoportable la palabra geopolítica, que sirve para explicar y medio comprender cualquier desastre; es insoportable que no nos podamos permitir mirar un escaparate de monas de chocolate sin sentirnos culpables y a la vez hipócritas y banales y frívolos; es insoportable ver películas americanas de pandillas de niños que te hacen pensar que qué suerte, no tienen ningún problema, ningún miedo, en estos pueblos aburridos, aseados y sobre todo eternos; es insoportable que esta guerra nos toque más la fibra que todas las otras y es insoportable que los superiores moralmente nos lo reprochen como si todo se redujera al hecho de que estos que se morirán son blancos; es insoportable la diplomacia y sus expertos, porque no sirven para nada; es insoportable que nos comportemos como cuando en un vagón de tren insultan a alguien, sin hacer nada, por miedo a ser salpicados; es insoportable haber inventado los libros, la música, la agricultura, tantas cosas preciosas, y no ser capaces de preservar lo único que no tendremos nunca más, que es la vida; es insoportable que los hijos de ellos lloren de hambre y los nuestros no; es insoportable este absurdo y loco y desnaturalizado concepto que se llama guerra.