

En materia de acomplejamientos futbolísticos, quien esté libre de culpa que tire el primer penalti, pero cuando el Madrid empezó a señalar a árbitros desde su canal de televisión al principio dio risa, después indignó y ahora ya da pena. Su victimismo no tiene base real alguna. Un dato de esta Liga: Madrid, 10 penaltis a favor y 0 en contra; Atlético de Madrid, 2 penaltis a favor y 2 en contra; Barça, 4 penaltis a favor y 3 en contra.
Esta semana pónganse tapones en las orejas, porque los potentes altavoces del nacionalmadridismo no hablarán de otra cosa que de la falta de Romero a Mbappé. Ya empezaron el sábado. En la rueda de prensa con Ancelotti, escuché una de las preguntas más alucinantes que he oído nunca en una rueda de prensa: "Nuestro experto arbitral, Juan Andújar Oliver, ha explicado que, desde hace unas semanas, los árbitros no aceptan lo que les solía dar el Real Madrid: un llavero, un banderín y una camiseta. Han dicho que no quieren nada del Real Madrid... No sé si usted tiene la sensación de que los árbitros han declarado... Más que han declarado... ¿Hay una guerra entre el Real Madrid y los árbitros, y los están perjudicando demasiado?" Fíjate, Real Madrid TV persigue a los árbitros, los árbitros no quieren un llavero del Madrid y eso es una declaración de guerra.
Siguiente pregunta: "Aparte de eso, ha habido un problema con los balones. Vinícius se ha quejado de que ni había balones, que no salían los chavales que los cogen. ¿Eso se puede arreglar?"
El presidente de la Federación Española, Rafael Louzán, reveló hace unos días las presiones de Florentino Pérez, que lo cogió por banda y le dijo que los árbitros les habían hecho perder títulos. Hay gente tan acostumbrada a ganar que, para ellos, la derrota no es una opción. El ridículo se ve que sí.