Claves para entender el caso de la pareja de Ayuso
La Fiscalía ha denunciado a Alberto González Amador por defraudar a Hacienda y el PSOE señala a Ayuso por vivir en un piso que compró él tras el fraude
MadridHace una semana el foco mediático era el caso Koldo, pero desde el martes otro escándalo relacionado con las comisiones por la compra de material sanitario durante la pandemia eclipsa la trama del ex asesor de José Luis Ábalos. Y este nuevo caso salpica a la pareja de Isabel Díaz Ayuso. El PSOE ha utilizado la denuncia de la Fiscalía contra Alberto González Amador por fraude fiscal para contraatacar en plena batalla con el PP. Las peticiones de dimisión de la presidenta de la Comunidad de Madrid se han llevado a los titulares que hace pocos días tenían como protagonista a la presidenta del Congreso, Francina Armengol. ¿Pero a quién implica exactamente el caso de la pareja de Ayuso? ¿Qué sabemos?
La denuncia que la Fiscalía de Madrid ha puesto en manos de los juzgados señala a González Amador, el novio de Ayuso, ya otras cuatro personas, que constan como administradores únicos de empresas que habían emitido hasta 15 facturas que el Agencia Tributaria detectó como falsas. La pareja de la presidenta popular las habría utilizado para ocultar los extraordinarios beneficios obtenidos durante la pandemia. Con estos gastos ficticios, que ascienden a 1,7 millones de euros, habría evitado pagar 350.951 euros a Hacienda –155.000 en 2020 y 195.951,41 en 2021– de impuesto de sociedades. Gran parte de los ingresos que González Amador pretendía ocultar para ahorrarse los impuestos vendrían de una actividad por la que otro miembro del entorno de Ayuso estuvo en el punto de mira: mediar en compras de mascarillas. Según Eldiario.es, su empresa –Maxwell Cremona SL– habría cobrado al menos una comisión de 1.973.000 euros por ese concepto.
La ilegalidad, a diferencia del caso Koldo, no sería el cobro de comisiones, ya que González Amador es un particular que no tiene ningún cargo en la administración pública, sino en el intento de esconder los beneficios que sacó para pagar menos impuestos. De hecho, el hermano de la líder del PP madrileño, Tomás Díaz Ayuso, no ha sido condenado por haber sido comisionista y la Fiscalía Anticorrupción, tras abrir una investigación, no logró suficientes indicios para acusarle de ninguna infracción penal. Al novio de Ayuso, por el contrario, la Fiscalía le acusa formalmente de dos delitos de fraude fiscal y uno de falsedad documental que pueden acarrear penas de prisión.
Para evitar esta posible condena, el abogado de González Amador contactó con la Fiscalía de Madrid el 2 de febrero y le propuso un pacto de conformidad. Implicaba "reconocer los hechos delictivos y conformarse con una determinada sanción penal", según un comunicado que emitió este jueves el ministerio público por desmentir el relato victimista que había hecho Ayuso el día anterior.
¿Qué tiene que ver Ayuso?
La presidenta de la Comunidad de Madrid no está investigada ni se le ha implicado en el fraude fiscal de su pareja. No aparece en la denuncia y, según remarcó el PP, no tiene ninguna inspección fiscal en marcha. ¿Por qué se le señala? La líder de los 'populares' en Madrid vive con González Amador en un piso de 183 metros cuadrados valorado en un millón de euros. Su pareja lo compró después de que se cometiera el fraude. PSOE y Sumar le exigen que aclare si sabía que el piso donde vive podía estar pagado con dinero defraudado a Hacienda. El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, le ha exigido su dimisión por esta falta de ejemplaridad. Fuentes de los socialistas argumentan que piden a Ayuso lo mismo que reclamaron a Ábalos, que tampoco estaba implicado en la trama Koldo cuando le exigieron sin éxito que renunciara al acta de diputado.
También piden responsabilidades a Ayuso por mentir y atacar a la Agencia Tributaria. En una polémica comparecencia este miércoles, la presidenta madrileña denunció que era víctima de una campaña del gobierno español y remarcó que ninguno de los contratos está con la Comunidad de Madrid. "No hay trama", remachó. Ayuso afirmó que se trataba de una "inspección fiscal salvaje" contra González Amador simplemente por el hecho de que fuera su pareja y dijo, sin aportar pruebas, que era Hacienda quien le debía a él 600.000 euros. "Es un caso turbio de todos los poderes del Estado contra un ciudadano particular", insistió.
La vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, salió a defender la actuación de la Agencia Tributaria y tildó de "absurdas" las acusaciones. La Fiscalía de Madrid, a la que Ayuso acusó de actuar por motivos ideológicos, también la desmintió. El Consejo General de la Abogacía, por el contrario, ha salido en defensa de Ayuso y denuncia que se ha filtrado información personal de su pareja. El PP, por su parte, cierra filas con la presidenta madrileña, uno de sus principales activos, y circunscribe el caso a su esfera personal.
