La extrema derecha (independentista o no) equivale a bloqueo
BarcelonaLa encuesta del ARA, elaborada por YouGov, proyecta un escenario difícil para configurar mayorías. Ni el bloque independentista ni el bloque unionista suman de forma suficiente sin sus respectivas formaciones de extrema derecha y, por ahora, los partidos no se han mostrado dispuestos a contar ni con Vox ni con Aliança Catalana para formar una mayoría de investidura . Por tanto, si dicen la verdad, la situación se encamina al bloqueo.
ERC y la CUP se niegan a participar en ninguna operación donde esté el partido de Sílvia Orriols, mientras que Carles Puigdemont, líder de Junts y que tendría opciones de ser investido con una mayoría independentista según el sondeo realizado por YouGov, ha asegurado que no prevé “negociar” con la extrema derecha. Por tanto, no cabría la posibilidad de articular una mayoría absoluta independentista, aunque los votantes de Aliança Catalana manifiesten en un 46,5% que les gustaría apoyar la investidura de Puigdemont.
El bloque unionista tampoco tendría opciones de obtener la presidencia en este escenario, ya que Salvador Illa, que de acuerdo con los datos recogidos ganaría las elecciones, ha excluido de la ecuación cualquier pacto con Vox. Y sin la extrema derecha tampoco suma escaños suficientes con los comunes y con el PP. De hecho, Illa también ha excluido la posibilidad de aliarse con los populares como hizo Jaume Collboni en Barcelona.
Así pues, la única opción operativa sería la de romper bloques, con un pacto entre el PSC y Junts o entre el PSC, ERC y los comunes para hacer presidente a Salvador Illa. Ahora bien, esto sería una fórmula que iría en contra de la primera preferencia de la mayoría de los votantes de los partidos independentistas. Pese a la rivalidad e incluso con la mala relación personal del líder de Junts con la cúpula de Esquerra, los votantes junteros optan por un ejecutivo soberanista, mientras que los de ERC, pese a la estrategia de Aragonés de atacar a Puigdemont, mayoritariamente también. Por eso no se puede descartar, en ningún caso, una repetición electoral.