Feijóo compara a Sánchez con Franco por los "tics autoritarios" contra los jueces
Alejandro Fernández pide enviar "a la papelera de la historia" al presidente español y Puigdemont
BarcelonaEl PP se ha recetado en el primer fin de semana de campaña contundencia contra Pedro Sánchez y su anuncio de posible renuncia a la presidencia. Y los argumentos han ido desde la comparación con el independentismo hasta el dictador Francisco Franco, pasando por patologías psicológicas como el narcisismo. En el estreno del líder popular estatal, Alberto Núñez Feijóo, en la campaña catalana ha ido a por el cuerpo a cuerpo contra el PSOE y Carles Puigdemont. Desde las Terres de l'Ebre –primer Tortosa y después Ulldecona–, ha lamentado que el partido de gobierno "insulte a los jueces" y "atace a los medios de comunicación": "Estamos ante un tic autoritario que desde Franco nunca habíamos visto ", soltó, para añadir que "cuando se ataca a los jueces y tribunales, cuando se ataca a los periodistas y medios de comunicación, se está dimitiendo de la democracia".
Así, ha pedido unir el constitucionalismo a Catalunya para dejar de "perder el tiempo" y deshacerse de lo que suponen las formaciones de gobierno en el Principado y el Estado: "Le llaman socialismo, nacionalismo o independentismo, pero en realidad se llama narcisismo, se creen más importantes que el resto, creen que todo el mundo gira a su alrededor y ya es suficiente", espetó. Por eso, ha avisado Sánchez: "O se va ahora o le haremos marchar en las urnas con más diferencia de lo que hicimos en julio".
El dirigente gallego ha criticado que "lo único que les preocupa [a Junts y al PSC] es qué pasará con Puigdemont y Sánchez", pero les ha igualado ahora en cuanto a su relación con los tribunales, ya que "ambos deben rendir cuentas con la justicia". Así, reivindicó "la igualdad de los ciudadanos ante la ley", mientras cargó contra "el show impropio" y "rampillo de adolescente" del presidente estatal, que debería "escandalizar" a Europa.
Los populares han confrontado los "problemas de la gente" con "los problemas de Sánchez y Puigdemont". A juicio de Feijóo, "España no tiene un problema", sino que quien tiene un "problema judicial" es Sánchez, y ha señalado los "presuntos casos de corrupción" del partido, del gobierno y el entorno, en referencia al caso Koldo y en las querellas presentadas por sindicatos de extrema derecha contra su mujer. El "mimetismo" entre Sánchez y Puigdemont también tiene que ver con el tipo de liderazgo: ha acusado a Sánchez de ser un político "mesiánico" como el expresidente de la Generalitat, que sólo quieren mirarse "el ombligo" mientras "los ciudadanos han de resolver solos sus problemas".
En este sentido, el candidato a la presidencia de la Generalitat el 12-M, Alejandro Fernández, ha posicionado al PP en "un voto para enviar a Sánchez y Puigdemont a la papelera de la historia". Un voto para "poner fin al Proceso" y abrir una nueva etapa en Cataluña con los responsables de la última década en la oposición.
Economía catalana
Pese a que el PP ha criticado que Sánchez y Puigdemont centren la campaña, ha focalizado sus intervenciones en ellos. Sin embargo, Fernández también ha explicado su receta para reflotar la economía catalana y facilitar el regreso de las empresas que retiraron la sede social a raíz del 1-O. La principal propuesta es "acabar con el Proceso y recuperar la estabilidad política y jurídica". ¿Pero con qué medidas? La tradicional tríada de suprimir el impuesto de sucesiones, el de patrimonio y rebajar todos los tramos del IRPF en una política general de "impuestos moderados", un recetario con semejanzas a lo que presentó Puigdemont en el campo económico. "Ya verán ustedes cómo las empresas vuelven", ha dicho.