El PSC también negociará con el PP la investidura de Illa
La elección de la presidencia del Parlamento marcará las alianzas para la investidura
BarcelonaEl PSC se activa para abrir negociaciones y conseguir los apoyos para investir a Salvador Illa. Fuentes del partido confirman al ARA que ya están haciendo "llamadas y primeros contactos" para unas conversaciones que tendrán la mesa del Parlament como primera parada. Las alianzas que se tejen para repartir los cargos en el órgano que comanda la cámara catalana ya podrían dar pistas sobre con quien cuentan los socialistas para poder gobernar, sea en coalición o en solitario y buscando fórmulas de geometría variable. Y aunque por ahora el PSC "no renuncia" a presidir el Parlament, desde el partido no esconden que habrá que ver lo que piden y lo que quieren el resto de fuerzas políticas. "Veremos qué mayorías se pueden confeccionar tanto para la mesa como para el Govern", ha afirmado la número dos del PSC, Alícia Romero, en declaraciones a Catalunya Ràdio.
En el mismo sentido se ha expresado la portavoz del partido, Núria Parlon: "Una cosa es negociar y la otra que nosotros renunciamos a presidir la mesa del Parlament", ha dicho en una entrevista en SER Catalunya. La potestad para convocar el pleno de constitución del Parlament la tiene el presidente de la Generalitat en funciones, Pere Aragonès, que en estos momentos todavía no ha decidido la fecha, según ha explicado la portavoz del ejecutivo, Patrícia Plaja. La fecha límite es el 10 de junio, y si Aragonés decidiera adelantar este pleno, coincidiría con la campaña de las elecciones europeas. Desde el Govern se limitan a pedir que la "provisionalidad" en la Generalitat dure lo menos posible.
A la espera de Esquerra
En este escenario, todas las miradas se centran en Esquerra, que los socialistas confían en poder seducir para investir a Salvador Illa y evitar la repetición electoral. Fuentes del PSC añaden que la mesa del Parlament "debe reflejar la pluralidad, pero también la fuerza" que los ciudadanos han dado a los partidos en las elecciones. Pero un pacto del independentismo podría dejar al PSC sin la presidencia del Parlament si los socialistas no cierran una alianza con alguna otra fuerza, por ejemplo con el PP, para evitarlo. Hay que tener presente que el presidente o presidenta de la cámara es quien propone al candidato a la investidura: si Carles Puigdemont atara los apoyos de Esquerra para intentarlo, podría acabar siendo él quien se sometiera primero a un debate de investidura.
A estas alturas, Esquerra aún no ha abierto el debate sobre la mesa a su ejecutiva, donde debería valorarse esta cuestión. El batacazo del 12-M ha dejado el partido tocado y todavía se está rehaciendo de la derrota. De hecho, fuentes republicanas aseguran que en estos momentos todavía no han decidido si quieren negociar. Si los socialistas ofrecieran la presidencia a los republicanos y éstos aceptaran hablar de ello, esto se leería como la primera piedra para una futura investidura de Salvador Illa. Por tanto, el debate en el seno del partido será intenso.
Al otro lado, Puigdemont sigue reivindicando su derecho a intentar formar gobierno con una alianza independentista y la abstención del PSC. En una publicación en X, recordó que Pedro Sánchez fue elegido presidente pese a perder los comicios, así como José Montilla, Pasqual Maragall y Jaume Collboni en el Ayuntamiento de Barcelona. "Discutir la legitimidad de que ahora en Catalunya se pueda hacer lo mismo me parece muy incoherente y extraño, puestos a dar calificativos", ha afirmado. Sin embargo, la Moncloa cierra la puerta a presionar al PSC para que se abstenga a favor de Puigdemont.
El PP, en las conversaciones
En cualquier caso, el PSC realizará una ronda de contactos con todos los partidos, excepto la extrema derecha de Vox y Aliança Catalana, para saber si pueden contar o no de cara a las alianzas postelectorales, tanto para la mesa como de cara en la investidura de Isla. En esta ronda incluyen también a la CUP y al PP, un partido de quien Salvador Illa había rechazado recibir los votos en campaña. En otra entrevista en RTVE, Romero ha argumentado que "es un partido que ha pasado de 3 a 15 diputados y tampoco se le puede ignorar", ha dicho. Pero acercarse demasiado al PP podría hacerles perder otro apoyo clave: los comunes ya han avisado de que si incluyen a los populares dentro de la fórmula ya pueden olvidarse de sus votos, porque solo negociarán por un Gobierno de izquierdas. Sin embargo, también es cierto que en Barcelona estos dos partidos fueron los que permitieron la elección de Jaume Collboni como alcalde.
¿Y qué dice el PP? Por ahora, ha puesto como condición romper todos los pactos con los independentistas tanto en el Estado como en las diputaciones y los ayuntamientos, una condición en la que ha insistido hoy Alberto Núñez Feijóo en la ejecutiva de los populares. Fuentes de la dirección del PP, tanto estatal como catalana, afirman estar dispuestos a hablar con el PSC si les llama, pero reiteran que las conversaciones no irán a ninguna parte si los socialistas no rompen con los independentistas, también en el Congreso. De hecho, subrayan que hasta que no ocurra no habrá ningún tipo de negociación y que quien debe mover ficha es Isla. Esto también afecta a la constitución de la mesa del Parlamento. Por tanto, de entrada la posición de Fernández y la dirección estatal dificulta el entendimiento en este primer capítulo clave para futuras mayorías en la cámara. De hecho, por ahora, según fuentes populares, no han tenido ningún contacto con el PSC para negociar sobre la mesa. Queda casi un mes para la fecha límite.