Los socios del ANC rechazan por la mínima presentar una lista cívica el 12-M
Los contrarios a concurrir a los comicios se imponen por tan sólo 98 votos en una votación que evidencia la división y deja tocada a la dirección
TaradilloEl ANC no competirá por el cuarto espacio independentista. Los socios de la entidad han rechazado presentar batalla en el Parlament. Pero lo han hecho por un estrecho margen. El 49,4% de los asociados votaron en contra de la lista cívica mientras que un 48,1% avalaron la propuesta de tejer una candidatura a las elecciones del 12 de marzo. Así, el no ha recibido 3.758 votos y el sí 3.660 votos: una diferencia, por tanto, de sólo 98 votos. De hecho, 181 socios (2,3%) de los 7.599 que han participado han votado en blanco y podrían haber dado la vuelta a unos resultados que ponen de manifiesto hasta qué punto la Asamblea está dividida internamente por la cuestión.
"Se puede hablar de un empate técnico, pero los resultados son vinculantes y la Asamblea no impulsará una lista cívica por la independencia en las elecciones", ha dicho la presidenta Dolors Feliu, que ha sido la encargada de anunciar los resultados acompañada del resto de miembros del secretariado, durante la asamblea general celebrada en Taradell ante más de 600 personas. Sea como fuere, la máxima dirigente de la entidad ha lanzado una advertencia: "Es uno no por ahora, en estas próximas elecciones, pero es un claro aviso a los partidos", ha dejado claro, antes de reclamar "unas elecciones plebiscitarias".
Se impone, pues, el sector contrario a concurrir a los comicios, que se ha hecho sentir a lo largo de estas dos semanas de consulta con manifiestos y denuncias y ha llegado a exigir que se detuviera la votación porque votaban socios que no estaban al corriente de pago. Un sector que incluso debe postulado Lluís Llach, firme opositor en la lista, en la presidencia de la entidad con el objetivo de que fuera un golpe de efecto para quienes aún dudaban de qué votar. El rechazo explícito del cantautor y activista a la candidatura, el anuncio de la eurodiputada Clara Ponsatí y Jordi Graupera impulsar un nuevo partido y la movilización de los opositores en la lista han acabado siendo determinantes para que haya ganado el no.
Feliu no revela si dará un paso al lado
Los resultados dejan en una situación más que comprometida a la actual dirección. Feliu, partidaria de la lista, ya había dejado entrever que no optaría a la reelección si los socios la tumbaban. Tras los resultados, la máxima dirigente de la entidad no desveló si dará un paso junto a las elecciones que tendrán lugar del 14 al 18 de mayo. "No he pensado si volveré a presentarme, lo he acabado de valorar", se ha limitado a decir en una atención a los medios.
Feliu ha evitado interpretar la derrota como una enmienda a su gestión: "No lo vivo como un tema personal, estoy tranquila y orgullosa por el ejercicio de radicalidad democrática que ha hecho la Asamblea". Tras asegurar que no sentía "trista" por el desenlace final, ha subrayado el alto porcentaje de socios que han secundado el proyecto. "Los resultados demuestran que la lista cívica cuenta con un gran apoyo", remachó.
El otro miembro de la dirección señalado es Uriel Bertran, coordinador de la comisión de estrategia y discurso. El exdiputado y miembro de Solidaritat ya dijo que iba a plegar si la iniciativa no salía adelante. Este partido ha abierto justo después de darse a conocer los resultados una consulta interna para decidir si se presenta a las elecciones. La ejecutiva del partido ha defendido que es necesario "reunir y hacer confluir a las personas y energías que se han volcado a favor de la lista cívica para poder presentar un proyecto independentista, unilateral y lo más amplio posible".
También habrá que ver si los sesenta secretarios que quedaban (la mayoría, partidarios de la lista) pliegan. La mayoría de los que se oponían, una veintena, ya dejaron el órgano de dirección cuando se constituyó el grupo de trabajo por la lista cívica. El vicepresidente Jordi Pesarrodona también dio unos días después.
Otra votación perdida
No es la primera votación que pierde el actual secretariado. Aunque la hoja de ruta también establecía que el ANC promoviera la abstención o el voto nulo en las elecciones españolas si no existía una candidatura unitaria, los socios rechazaron realizar un voto de castigo en los tres grandes partidos independentistas. En otra consulta, ésta sólo de cinco días, y con una participación mucho menor (3.773 personas), casi un 60% de los socios rechazaron ese posicionamiento político, mientras que menos del 40% se mostraron a favor. Ahora, sin embargo, la estocada en la cúpula puede ser definitiva. En un comunicado posterior, los críticos han instado a cerrar "el paréntesis de los últimos dos años, en los que la Asamblea se ha distraído demasiado con un solo objetivo, la lista cívica" y "empezar una nueva etapa con una nueva dirección". La actual, tiene los días contados.