Salvador Illa defiende haber seguido en México pese a la peste porcina: "No he cometido ningún error"
Junts, ERC y la CUP critican que el presidente no volviera y el PP pide la comparecencia del director del IRTA
BarcelonaEl estallido de la peste porcina africana en Cataluña enganchó al presidente de la Generalitat, Salvador Illa, de viaje institucional a México. Por mucho que ERC, Junts, la CUP y el PP le exigieron que volviera, el presidente continuó con su agenda en el país, marcada por la participación de Barcelona como ciudad invitada en la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara. Una vez llegado de México, Isla se ha encontrado con los reproches de parte de la oposición a la sesión de control en el Parlamento, desde donde ha defendido haber mantenido los encuentros que tenía ya cerrados, tanto en la FIL como en Ciudad de México, con actos de tipo económico. "Tengo mi forma de liderar y gestionar, admito que puede haber otros. Admito que puedo cometer errores. Creo, sinceramente, que, en este caso, no he cometido ninguno", se ha defendido Illa. Según ha reivindicado, el Govern ha afrontado la crisis con "ciencia, transparencia, colaboración" y ayudas al sector.
Junts había pedido la comparecencia del presidente en el Parlament en una sesión específica para que rindiese cuentas del brote, que afectaba hasta 79 municipios y movilizaba a 1.000 efectivos de los cuerpos de emergencia sobre el terreno. El cuarto tumbó la petición, teniendo en cuenta que el propio Isla pidió posteriormente comparecer a petición propia. En este sentido, la líder de Junts en el Parlament, Mònica Sales, lamentó que Catalunya haya tenido "un presidente ausente" mientras los contagios confirmados subían, y reclamó "soluciones de emergencia" y garantizar la "trazabilidad" del virus con total transparencia. "Entiendo que hagan crítica política, pero en este tema me parece que sobra", replicó Illa. Juntos ya acusó a Isla de haber preferido estar en Madrid celebrando la Hispanidad en lugar de estar en Cataluña durante el último episodio de la dana.
ERC y la CUP también han presionado al jefe del ejecutivo catalán por no haber regresado de México. Desde las filas republicanas, Josep Maria Jové ha asegurado que no es suficiente con que Isla haya "seguido de primera mano" las reuniones del Govern para hacer frente a la situación conectándose telemáticamente. "Liderar es estar en primera línea, junto a la ciudadanía", ha dicho el diputado de ERC. En la misma línea, el cupero Dani Cornellà le reprochó la ausencia, una crítica a la que Illa contestó señalando que no tenía sentido volver para hacerse sólo "la foto". "Foto ya tengo muchas", remachó. Sin entrar en detalles sobre la gestión del Gobierno, Vox se limitó a decir que Isla pasará a la historia por ser "el ministro de la pandemia y el presidente de la peste porcina". Ante todos ellos, Illa ha defendido que la gestión que el Govern ha hecho del brote ha sido "correcta" y ha recurrido a todos los recursos disponibles -incluida la Unidad Militar de Emergencias (UME).
El PP hurga con Salazar
Desmarcándose del frente independentista contra Isla por la crisis porcina, el líder del PP, Alejandro Fernández, ha preferido hurgar con la polémica por la falta de reacción del PSOE ante las denuncias internas por acoso sexual al exdirigente Paco Salazar. El presidente ha negado haberle contratado como asesor, tal y como publicó Eldiario.es. Sin embargo, fuentes socialistas detallaban el lunes que, antes de que se hicieran públicas las denuncias, sí habían trabajado con él. Tras la sesión de control, el PP ha anunciado que pediría la comparecencia del director del IRTA, ante la hipótesis de que el virus de la peste porcina haya salido de un laboratorio. Ahora bien, durante la sesión de control, ni Fernández ni ningún otro grupo ha preguntado por esta posibilidad, tal y como Agricultura había anunciado poco antes, ni sobre la investigación que han abierto los Mossos d'Esquadra.
Con la negociación de los presupuestos aún por abrir, Jéssica Albiach ha continuado con la reivindicación que los Comunes han puesto sobre la mesa esta semana: el mantenimiento de las bonificaciones al precio del transporte público, una demanda que el Gobierno sostiene que depende de la negociación con Madrid. "Haremos números y los explicaremos. Sería muy fácil venir aquí y decir que todo gratuito. No puedo hacerlo", avisó Illa. Albiach le ha dicho que, si no lo hace, no se sentarán a negociar los presupuestos de 2026. "Yo sí me sentaré, gracias", ha replicado el presidente. Por su parte, Aliança ha criticado que el Govern haya firmado un convenio para monitorear los discursos de odio en las redes, y el PSC ha renunciado al turno de intervención en la sesión de control, que excepcionalmente se ha celebrado un viernes por la tarde.