El traslado del CAACB a nuevas instalaciones es un deber pendiente de Barcelona desde hace quince años. Tras descartar otras ubicaciones, a finales del mandato de Xavier Trias se anunció un convenio con Montcada i Reixac para construir este equipamiento en terrenos que son propiedad del Ayuntamiento, pero que están situados dentro de los límites del municipio vecino. Tras una tramitación complicada, el proyecto recibió la luz verde del pleno de Barcelona en marzo de 2023. Sin embargo, las obras todavía no han podido empezar porque un juzgado de Barcelona las paralizó después de una denuncia presentada por el grupo animalista DEPANA.
El conflicto en la perrera de Barcelona se enquista: ex trabajadores llevan el Ayuntamiento a los tribunales
Los educadores despedidos consideran que se les ha represaliado por denunciar malas condiciones
BarcelonaEl conflicto en el Centro de Acogida de Animales de Compañía de Barcelona (CAACB) no se detiene. Si hace año y medio se produjo una huelga de cerca de dos meses para denunciar las condiciones en las que se encontraban muchos animales, ahora es otro conflicto laboral el que tensiona a la perrera de la capital catalana. Hasta el punto de que el sindicato CGT ha llevado al Ayuntamiento a los tribunales por el despido de ocho trabajadores del equipo de educación canina del centro.
Uno de estos trabajadores es Carles Gomà, que el pasado 17 de marzo recibió un correo en el que se le comunicaba que se quedaba sin trabajo después de más de una década trabajando en el centro. En ese mensaje la empresa Help Guau –del que dependían los trabajadores desde 2023– les explicaba que el Ayuntamiento había decidido no renovar el contrato porque quería dar otro rumbo a un equipamiento que lleva años al límite.
Fuentes del consistorio explican que, ante "la naturaleza compleja" de los perros que llevan bastante tiempo en la perrera sin ser adoptados y "del incremento notable de las entradas de perros con problemas de comportamiento", se quiso cambiar el perfil de los trabajadores y contratar a un equipo con etólogos –expertos en comportamiento . Todo ello, en la línea de aumentar el número de adopciones y reducir el volumen de perros que existen ahora mismo en el CAACB.
En conversación con el ARA, sin embargo, Gomà y sus compañeros despedidos cuestionan esta versión y aseguran que les han echado como represalia por haber hecho pública en mayo de 2024 su preocupación por algunas decisiones que se estaban tomando a la perrera y que, a su entender,. En un comunicado, alertaban de que se estaba favoreciendo la eutanasia y la expulsión del centro de algunos perros por hacer frente a la masificación del espacio.
En aquel documento explicaban, por ejemplo, que se había dejado a los cuidadores fuera de las reuniones de comportamiento en las que se decide sobre el futuro de los perros. Esto hizo que se acordara la eutanasia de animales que, según ellos, podrían haber tenido todavía una adopción. También denunciaban que habían encontrado un listado con otros trece perros que el centro quería trasladar a unas instalaciones privadas que Help Guau tiene en Argentona donde sus opciones de ser adoptados aún se verían más reducidas y donde, además, la empresa veta el acceso como voluntarios de los educadores despedidos del CAACB.
"Aquello abrió la caja de pandora. Si no hubiéramos dicho nada, todavía tendríamos el trabajo", sostiene Gomà, quien considera que la empresa y el Ayuntamiento les han castigado porque los considera "conflictivos". Opinan que el argumento del consistorio de cambiar el perfil profesional de los trabajadores por etólogos es una "excusa". Por eso, los ocho trabajadores que se han quedado sin trabajo han llevado el caso a los tribunales para reclamar que la nueva empresa que gestione el servicio les subrogue.
La nueva licitación, bajo la lupa
Para reforzar su tesis, los trabajadores despedidos argumentan que los pliegos de contratación de la nueva puja demuestran que se están buscando "perfiles profesionales idénticos" a los que ya existían. En un comunicado, el sindicato CGT, que agrupa a los ocho trabajadores despedidos, denuncia que los pliegos de condiciones técnicas y administrativas de la nueva licitación de educación canina del CAACB plantean la contratación de personal no sanitario, concretamente dos plazas de coordinación, con titulación superior y un mínimo de tres años de experiencia. "Cuatro de los ochos despedidos cumplimos con estas condiciones", subrayan.
Anotan, además, que el nuevo pliego también recoge la contratación de seis personas en la categoría profesional de adiestrador –educador canino, a quien se exige un mínimo de dos años de experiencia demostrable–. Unos requisitos que, remarcan, cumplen los ocho trabajadores despedidos. Por eso, han ampliado su denuncia a los tribunales contra el Ayuntamiento y la empresa Help Guau con estos pliegos de contratación. Fuentes del Ayuntamiento, sin embargo, mantienen que "en ningún caso las categorías profesionales de los nuevos servicios son las mismas que las del anterior servicio".
Sea como fuere, el conflicto de la perrera sigue enquistado y dando dolores de cabeza al gobierno municipal, que en el pleno del mes de abril ya vio como iniciativa del PP y con los votos de Junts y Barcelona en Comú la oposición reprobaba a la primera teniente de alcalde, Laia Bonet, por este caso. En la última comisión de Urbanismo, Bonet también rechazó un ruego de ERC que pedía una auditoría sobre la situación del CAACB y defendió que "Barcelona ha sido y sigue siendo referente en políticas de bienestar animal".