Medio ambiente

Un chispazo de una soldadura podría haber causado el incendio de Martorell

El incendio de Castellví de Rosanes y Martorell quema ya más de 220 hectáreas y todavía está vivo

El fuego quema muy cerca de unas viviendas en el incendio de Castellví de Rosanes y Martorell.

MartorellLa causa del incendio de Martorell y Castellví de Rosanes podría haber sido un chispazo que saltó mientras alguien estaba haciendo una soldadura en una casa al límite del bosque. Esta es la "negligencia" que podría haber producido el fuego, según han apuntado los Agentes Rurales, que han comparecido este miércoles para valorar la evolución del incendio. El cuerpo está investigando los hechos y no ha determinado la identidad del sospechoso.

El primer gran incendio del verano ha quemado ya 225 hectáreas entre Castellví de Rosanes y Martorell, en el Baix Llobregat. Precisamente la zona metropolitana "preocupa especialmente" al departamento de Interior, que prevé un verano "más complicado" que los anteriores en cuanto a los fuegos porque ha llovido menos. "Intento huir de discursos alarmistas, pero la situación es complicada", ha asegurado el director general de Prevención, Extinción de Incendios y Salvamentos, Joan Delort.

A estas alturas, el incendio todavía está vivo y los Bomberos creen que no lo podrán dar por controlado hasta al menos este anochecer. El escenario más optimista es poder tenerlo controlado a última hora del día si las condiciones del viento se mantienen, pero si se produjera un cambio de dirección como ayer se tendría que esperar hasta mañana.

Con todo, la evolución del fuego es positiva: el 90% del perímetro del incendio de Castellví de Rosanes y Martorell ya está estabilizado, después de que al menos hasta 67 dotaciones de los Bomberos hayan trabajado las últimas horas en el fuego, que quema desde el martes por la tarde. El incendio sigue activo, pero la intensidad de las llamas ha bajado considerablemente coincidiendo con el incremento progresivo de la humedad relativa, que ha rozado el 60%, a pesar de que ha habido algunas reanudaciones en el flanco derecho debido al viento. A primera hora de la mañana se han incorporado siete medios aéreos con el objetivo de intensificar el trabajo antes de que empiece la marinada, prevista hacia el mediodía.

"El fuego parecía agua"

El fuego empezó este martes cerca de la urbanización de Can Sunyer pasadas las 16 horas y fue oscilando su movimiento en diferentes direcciones, que es lo que está complicando las tareas de los Bomberos.

Todo ha ido muy rápido, tanto, que "el fuego parecía agua". Juan Manuel González es uno de los más de cien vecinos desalojados poco antes de la cuatro de la tarde de este martes, cuando ha sonado la alerta entre los residentes de la urbanización Can Sunyer, en el término de Castellví.

Pasadas las 10 de la noche, la mayoría de las 30 familias afectadas esperaban que las autoridades sanitarias les indicaran que finalmente pasarían la noche en hoteles de la zona. La familia de Pere Badia, sin embargo, se pensaba si aceptar el ofrecimiento o ir a casa de sus padres, "con la tranquilidad" de saber que no hay casas afectadas por el fuego, un punto que han confirmado los bomberos. Asimismo, a media tarde se ha decidido desalojar a los 17 usuarios de la residencia de mayores Vistalegre, en Martorell, ya que las llamas y sobre todo el humo espeso bajaban por la falda de la montaña, cerca de la AP-7, que se cerró al tráfico por precaución. Uno a uno, los residentes han entrado en un vehículo adaptado que les trasladó a un pabellón del pueblo que el Ayuntamiento había habilitado por si hacía falta realojar a damnificados. Finalmente, fueron derivados a unos pisos vacíos de una asociación de discapacitados, para que pasaran la noche allí.

Incendio de la sierra de la Ataix desde Martorell

El viento de ponente primero y después de marinada, se han conjurado con la orografía de la sierra de Ataix, llena de barrancos y un territorio poblado y lleno de infraestructuras, para complicar las tareas de extinción del incendio. "El fuego ha ido oscilando hacia otras direcciones y no ha tenido un eje de propagación clara", ha explicado el jefe del operativo, Joan Rovira, después de participar en una reunión conjunta con el conseller de Interior y los alcaldes de los municipios afectados.

La investigación todavía está abierta pero Rovira ha señalado como la causa más probable una "negligencia" y, en este sentido, ha asegurado que ya se ha localizado el punto cero desde el que las llamas se han propagado a gran velocidad por un terreno muy seco y sucio. Los alcaldes de Martorell y Castellví han coincidido en la voluntad de presentarse como acusación particular, si hay detenidos.

En la última actualización de esta noche, los bomberos tenían estabilizado entre el 60% y el 70% del perímetro del incendio, y les preocupaba especialmente el flanco que avanzaba hacia la urbanización de Taió, en Castellví de Rosanes. Rovira se ha mostrado confiado en que los esfuerzos de las dotaciones que se mantendrían durante toda la noche podrían dar por controlado el fuego a primera hora de la mañana de hoy, aunque ha admitido que "la orografía compleja" del área podía complicar sus labores de extinción si el viento soplaba en contra.

Dotaciones de los Bomberos trabajan para apagar las llamas que afectan Castellví de Rosanes y Martorell.

"Hacia las 5 de la tarde hemos visto fuego y en pocos minutos ya veíamos las llamas a este lado de la montaña", explica un vecino del barrio Rosanes de Martorell que casi no se ha movido de la puerta de su casa con otros vecinos de la calle controlando el incendio. Ha sido en este punto donde las llamas se acercaron al núcleo urbano, lo cual llevó a muchos vecinos a los puentes cercanos para de ver de cerca la espectacularidad del incendio. El alcalde, Xavier Fonollosa, ha lamentado la destrucción de un paraje valioso para la ciudad, ya que es uno de sus pulmones verdes y durante la pandemia ha sido un lugar de recreo para muchos ciudadanos que subían buscando aire y distancias.

En una comparecencia, el conseller de Interior, Joan Ignasi Elena, ha hecho un llamamiento a la "prudencia" y la "autorresponsabilidad" de la ciudadanía ante una temporada estival con altas temperaturas para no provocar incendios como el de hoy.

Bomberos trabajando en el incendio de Martorell

El fuego se ha desplegado causando varios focos que han ido bajando por una de las laderas de la montaña, acercándose hacia Martorell. Algunos de ellos han saltado al otro banda de la autopista AP-7. De hecho, los Mossos han cortado preventivamente tres puntos de la autopista, en Martorell en sentido norte, y en Catellbisbal y Papiol, en sentido sur. Un cambio de viento ha obligado a los Bomberos a reubicar los vehículos y a cambiar la ruta de los hidroaviones que colaboran en las tareas de extinción del incendio.

Unas vecinas observan las llamas que queman desde esta tarde.

"Cierren las ventanas", gritaba un policía local de Martorell a los vecinos que estaban mirando cómo las llamas se aproximaban a su casa. El agente, sin embargo, rápidamente les tranquiliza porque el fuego que ven tan cerca es un "cortafuegos" que los bomberos están haciendo para que no avance el que baja de la montaña. Otro vecino moja las zarzas que lo separan de la autopista y del incendio. "Es un desastre, da mucho miedo pero ya se veía venir porque todo está muy seco", dice Luis Quinteros, en la puerta de su casa suya en tareas de vigilancia. "Seguro que ha sido un descuido de alguien, un pitillo tirado sin pensar", se lamenta.

Personal evacuando 17 residentes a la residencia Vistalegre, cercana en la zona del incendio de Martorell

Fuegos encadenados

El incendio de Martorell y Castellví de Rosanes ha empezado poco después de que los Bomberos dieran por controlado otro incendio en la Costa Brava. El fuego ha empezado esta mañana debido a una furgoneta que se ha quemado en la carretera Gi-682. Las llamas han saltado a una zona de bosque y han acabado quemando parte de una casa y 6 hectáreas de superficie forestal. Una treintena de vecinos se han quedado confinados en casa por las molestias del humo, pero no ha habido que desalojar a ninguno. Ahora bien, los bomberos han alertado del peligro que supone que no hubiera ninguna franja de protección entre las casas y la vegetación.

Las elevadas temperaturas de los últimos días y el viento han puesto en alerta a los servicios de emergencias de la Generalitat que desde el inicio de la temporada de verano advierten del elevado riesgo de incendio en Catalunya durante los meses de más calor. De momento se han ido produciendo pequeños fuegos a diario en diferentes puntos del territorio, sin que ninguno hubiera superado todavía las 100 hectáreas, como sí ha sucedido en Martorell este martes.

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