Los médicos suspenden la gestión del futuro Trueta
Crean un observatorio para evaluar si se cumplen los plazos de la nueva infraestructura, que se tendría que inaugurar en 2028
Girona“Cero”. Es la nota que pondría el jefe de cardiología del Hospital Josep Trueta, Ramon Brugada, a la gestión –o no gestión– que han hecho los políticos desde que en julio del 2020 se anunció que el futuro Hospital Josep Trueta se haría en unos terrenos entre Girona y Salt. “No tenemos conocimiento que desde entonces se haya hecho nada, ni tampoco nos consta que hayan preguntado a ningún profesional cómo tendría que ser el futuro Trueta”, ha lamentado Brugada. A su lado, el jefe de cirugía del mismo centro, Antoni Codina, lo ha matizado: “El doctor Brugada ha sido muy generoso poniendo un cero, yo diría menos, negativo, no llega ni a cero, porque la sensación que tenemos es que estamos donde el primer día, que no se ha avanzado en nada”, ha recalcado.
Ante este panorama, el Colegio de Médicos –con el apoyo del Colegio de Enfermeras, la Universitat de Girona, el Idibgi y la Cambra de Comerç de Girona– ha decidido crear el Observatorio del Campus de Salut Girona - Nou Trueta para hacer un seguimiento del proyecto. El presidente del Colegio de Médicos de Girona, Josep Vilaplana, ha destacado que el objetivo es “unir esfuerzos” para que el nuevo centro hospitalario sea una realidad "cuanto más pronto mejor o dentro del plazo establecido”, es decir, inaugurarlo el 2028. Uno de los principales temores del sector es que otras equipaciones se lleven las inversiones por las trabas que puedan surgir en el proyecto gerundense: “Hay muchos lugares que trabajan para tener un hospital nuevo. O nos espabilamos o nos pasarán por delante, y tendremos que esperar 20 años más”, ha advertido Codina.
Los doctores Brugada, Codina, Magda Nadal y Wilfred Ricart formarán la comisión permanente y serán los encargados de obtener la información de seguimiento, que expondrán públicamente cada seis meses para informar a toda la ciudadanía del punto en que se encuentran los trámites. Según Vilaplana, cuentan con la colaboración del departamento de Salut y los ayuntamientos de Girona y Salt, que se han comprometido a facilitarles todos los datos que requieran.
Promesas incumplidas de cuatro 'consellers'
Durante la rueda de prensa, los doctores han recordado que el 2008 la entonces consellera de Salut, Marina Geli, presentó el anteproyecto del nuevo hospital, que se tenía que empezar a construir el 2010 e inaugurar el 2013. Con la crisis económica, sin embargo, la maqueta se dejó en un cajón sine die. “Todavía recuerdo que el 2008, durante la inauguración de la Facultad de Medicina, dije a los alumnos que estudiarían sexto en el nuevo Trueta. Vamos perdiendo años, vamos perdiendo capacidad de atraer talento, vamos perdiendo capacidad de ser competitivos, de atraer recursos e inversiones; y esto se tiene que acabar”, ha subrayado Brugada, que ha recordado que es un centro que da servicio a 800.000 habitantes.
Entre el 2010 y el 2020 el proyecto estuvo parado, a pesar de las promesas de los titulares de Salut, que aseguraban que se pondrían manos a la obra. Además, paralelamente, surgió otra polémica cuando el conseller Toni Comín abrió la puerta a situar la nueva equipación en Salt; cosa que despertó una lucha territorial entre los dos municipios. Finalmente, en julio de 2020, la entonces consejera Alba Vergés anunció una solución salomónica: un tercio de los terrenos están en Girona y dos tercios en Salt.
Desde entonces, el proyecto está encallado en los trámites municipales que tienen que realizar los dos ayuntamientos para conseguir las parcelas que cederán a Salut. En Girona hay una propietaria que ya ha anunciado que presentará batalla judicial para no perder la masía del siglo XVII donde vive ella y su familia. Y en Salt hay medio centenar de propietarios que están pendientes de los costes de urbanización de todo el sector sur porque ya han avisado que, si son muy elevados, no podrán hacer frente a los gastos.
Los médicos han señalado que durante el desarrollo del proyecto surgirán obstáculos y trabas y que, precisamente por eso, es necesario el observatorio: “Sabemos que habrá muchas dificultades, pero queremos ser una compilación de todas las sensibilidades profesionales porque, entre todos, consigamos que el nuevo hospital sea una realidad”, ha añadido la doctora Nadal.