Poner en valor a los maestros de lengua y literatura
El director y dramaturgo Sergio Blanco estrena 'Tierra', un espectáculo que habla del duelo y del poder de leer y escribir
BarcelonaHace dos años, el dramaturgo y director francouruguayo Sergio Blanco perdió a su madre. Los primeros meses después de esa muerte fueron "complicados y muy dolorosos", recuerda Blanco, y solo le ayudó "pensar que podría transformar toda esa oscuridad en belleza". El resultado es Tierra, un espectáculo de autoficción que llega este viernes al Canal de Salt dentro del festival Temporada Alta y que se estrena en Cataluña. El dramaturgo despliega un homenaje a su madre, que fue maestra de lengua y literatura, y de rebote pone sobre la mesa una cuestión que le preocupa: cómo los avances tecnológicos están ganando terreno a la lectura ya la escritura. "Hoy en día están en peligro de extinción", alerta Blanco.
Para revertirlo, el artista considera que hay que poner en valor a las maestras de estos ámbitos, porque "crean la base y la construcción de un ser humano" y nos enseñan a descifrar el mundo a través de las palabras . "Es una profesión noble", dice el dramaturgo. Su mirada al respecto está marcada por la propia experiencia –imparte clases en París, Japón, Estados Unidos y América del Sur– y no es desesperanzadora: "Trabajo con estudiantes de entre 19 y 25 años y veo que tienen más interés de lo que parece por los clásicos y por la literatura. Estoy convencido de que la escritura y la lectura sobrevivirán".
Tres exalumnos marcados por el duelo
Para homenajear el oficio de maestro, Blanco sitúa en el escenario un escritorio y convoca a tres exalumnos de su madre. La maestra les vincula, pero también que todos están pasando un duelo. La primera es la hija de un desaparecido en una dictadura militar, la segunda es una mujer de hacer trabajos que ha perdido a su hijo en un accidente de moto, y el tercero, un adolescente que ha matado a su hermano gemelo con un hacha. A través de estos personajes, el dramaturgo se despega de la experiencia personal para adentrarse en la ficción. "Parto de mi lágrima por hablar del diluvio: mi madre me lleva a hablar de todas las madres y maestros, que son universales", explica.
Sergio Blanco es uno de los grandes referentes de la autoficción dramatúrgica de todo el mundo y un nombre habitual en la cartelera catalana, especialmente dentro del festival Temporada Alta. El artista ha traído a nuestro país espectáculos como Tebas Land (2015), Kassandra (2018), Ostia (2019) y Covid-451 (2020), que contó con la participación de sanitarios catalanes. En sus obras juega con las fronteras difusas entre realidad y ficción para explorar temas que le han tocado personalmente. "La misma escritura me lleva a la ficción y, a partir de ahí, puedo reflexionar sobre el mundo sin quedarme enterrado en la experiencia –señala Blanco–. Después, con la puesta en escena, ya consigo desprenderme totalmente del yo gracias a la potencia del teatro".