Barça

Ansu, el regreso más esperado en un Barça huérfano de gol

Ronald Koeman, que dará 15 minutos al joven delantero tras diez meses de lesión, afronta un nuevo juicio en el partido contra el Levante

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Ansu Fati, Koeman y Memphis, entrenando

BarcelonaEl barcelonismo necesita noticias positivas. Aferrarse a la esperanza de que la temporada acabará con un trofeo en las manos de los capitanes, con una sonrisa en la cara de los socios. Y ahora pone todas las velas en Ansu Fati, esperando que el joven delantero de La Masia pueda encargarse de marcar los goles que últimamente no marca nadie. Y el primero que se encomienda a Ansu es Ronald Koeman, un técnico que continúa trabajando, consciente de que por detrás la directiva mueve hilos para encontrarle un sustituto.

El Barça recibe al Levante (16.15 h / Movistar Futbol) obligado a ganar, después de dos empates frustrantes en la Liga contra el Cádiz y el Granada. El equipo de Koeman ha pinchado contra rivales modestos y ahora recibe al equipo granota antes de encarar un camino que hace subida, con el partido de miércoles en Lisboa contra el Benfica y la visita al campo de un Atlético de Madrid que, por suerte, tampoco va muy bien. Koeman, después de leer su famoso comunicado en la previa contra el Cádiz, volvió a la sala de prensa con un tono conciliador, aceptando que a veces se calienta demasiado... y acaba expulsado. Como le pasó en Cádiz, motivo por el que no estará en el banquillo para recibir al Levante de Paco López, que también llega a la cita necesitado de puntos y con bajas. El Barça también tiene la enfermería llena, pero después de diez meses por fin vuelve Ansu Fati. “Es muy importante tener el alta de Ansu Fati. Para el jugador y para nosotros. Tenemos un plan para poder recuperarlo, porque le hacen falta minutos. De momento está convocado para el partido de mañana y jugará como máximo 15 minutos. Nos hace falta que la recuperación siga su curso y no correr riesgos”, explicó Koeman sobre un jugador que ha pasado por la sala de operaciones hasta cuatro veces este último año y ha tenido que ver los partidos desde la distancia.

“Los primeros días después de la lesión estaba confuso. En aquel momento físicamente me encontraba bien. Fue un golpe duro. Es verdad que los primeros días fueron difíciles. Era lo que había. No lo quería aceptar pero lo tuve que aceptar. Pero ya ha pasado. Todo pasa por algo y tengo más ganas que nunca de volver a disfrutar”, explicó el delantero ayer en Barça TV. “Hubo momentos en que sentía que no avanzaba la recuperación. Me iba a dormir y no podía. Me desvelaba a las tres de la noche. Fueron momentos duros”, recuerda un jugador que hace 322 días que no puede jugar. Ansu se lesionó la rodilla el 7 de noviembre de 2020 durante un Barça-Betis (5-2) y desde entonces ha pasado por quirófanos para hacerse operaciones y artroscopias, en Barcelona y Oporto. “El primer día de la recuperación que toqué pelota sentí mucha alegría. Estaban aquí en la ciudad deportiva mi padre y mi hermano y se echaron a llorar. Y yo también”, recuerda Ansu Fati, de 18 años, que ya ha marcado 13 goles con el primer equipo.

De hecho, el día que se lesionó entró en su lugar Messi, aquel día suplente. Y ahora, quien lleva el dorsal 10 es él. “Doy gracias al club y a los compañeros por dejarme llevar el 10. Es un reto porque lo llevaron Messi, Ronaldinho... En el Barça siempre hay que estar preparado para todo. Es una presión más, pero estar aquí ya es una presión. Cada uno tiene que asumir su responsabilidad”, admitía el joven delantero.

Koeman, en manos de los resultados

Mientras espera ver cómo vuelve Ansu Fati e intenta recuperar en noviembre jugadores como Agüero y Dembélé, Koeman intenta concentrarse en su trabajo a pesar de que la directiva ya no confía en él. “Sé lo que hay y los rumores que corren. Lo que tenemos que hacer es ganar partidos. Es vuestro trabajo y nosotros tenemos que poner energía en las cosas que puedo controlar, y no en lo que no puedo hacer nada”, dijo un poco melancólico el técnico neerlandés. Koeman, que hace unos días afirmó que Laporta hablaba demasiado, moderó el discurso: “El presidente es el hombre más importante de club. Él puede hablar y opinar. Yo tengo que estar concentrado en el trabajo y todo el resto no me interesa”. Laporta estará en el palco esperando ver goles. Sin Messi ni Griezmann, y con tantos delanteros lesionados, el Barça se ha quedado sin gol. Y todas las miradas se fijan en Ansu Fati. El Barça necesita un héroe. Y lo necesita pronto.

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