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Telegram claudica y cederá los datos de los usuarios que actúen fuera de la ley

Tras las acusaciones de la justicia francesa, Pavel Dúrov endurece las normas de uso del servicio de mensajería

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Pavel Dúrov en el Mobile World Congress de 2016.

BarcelonaUn mes después de su detención en París, Pável Dúrov, fundador de Telegram, ha sucumbido a las presiones y ha anunciado que la red de mensajería compartirá con las autoridades la información de los usuarios que actúen fuera de las normas de uso de la aplicación si la justicia lo solicita oficialmente . En un mensaje en su canal de Telegram, Dúrov detalló qué medidas han tomado para fortalecer la moderación de los contenidos que se comparten a través del servicio de mensajería. De esta forma, tira la toalla y da respuesta a las acusaciones de las autoridades francesas, que consideran que la falta de moderación de Telegram ha convertido el servicio de mensajería en una especie de paraíso para todo tipo de criminales, desde pedófilos hasta a terroristas.

Entre otras cosas, Dúrov detalla que un grupo de moderadores, con ayuda de inteligencia artificial, han estado trabajando para que la función para realizar búsquedas de la aplicación sea más segura. "Todo el contenido problemático que hemos encontrado a través de la función Búsqueda ha dejado de estar disponible. Si todavía encuentra algo peligroso o ilegal en Telegram Search [función de búsqueda], avísenos a través del canal Search Report", explica Dúrov, quien recuerda que la función de búsqueda del servicio está pensada para "encontrar amigos y descubrir noticias", y "no por promocionar material ilegal".

En la misma línea, el responsable de Telegram hizo público que han actualizado las normas de uso y privacidad del servicio. "Hemos dejado claro que todas las direcciones IP y números de teléfono que no respeten nuestras normas pueden ser revelados a las autoridades competentes en respuesta a demandas legales previas", señala. Dúrov se muestra confiado en que los cambios en las normas de uso "disuadirán a los criminales". "No vamos a dejar que unos malos usuarios pongan en peligro la integridad de nuestra plataforma de casi mil millones de usuarios", remarca.

El fundador de Telegram, nacido en Rusia pero residente en Dubai y ciudadano francés, fue detenido el 24 de agosto en París tras aterrizar con su jet privado en el aeropuerto de Le Bourget, en el noroeste de la capital de Francia. Cuatro días después, la justicia gala imputó al CEO de Telegram por cargos que van del blanqueamiento de crímenes a complicidad en la difusión de imágenes pedófilas, y ordenó que quede en libertad bajo control judicial. Dúrov no puede abandonar el territorio francés y debe presentarse ante los tribunales dos veces a la semana.

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