El parque de automóviles supera ya los 14,2 años de media, cifra que no para de aumentar
Uno de cada cuatro vehículos en circulación tiene más de 20 años, y más de nueve millones no disponen de ningún tipo de etiqueta medioambiental
Todo el mundo que realice un ejercicio tan sencillo como el de fijarse en la antigüedad de los vehículos que ve por la calle o por las carreteras podrá darse cuenta rápidamente de que los años van pasando, pero muchos de los vehículos que ve no se han renovado y van acumulando años y años. Y no es una percepción, sino una realidad. La antigüedad de los vehículos que circulan por todo el estado no deja de aumentar y ya ha alcanzado los 14,2 años de media, y sigue una tendencia de crecimiento que se mantiene firme desde el año 2008, pero que en los últimos tres años se ha acelerado notablemente.
En concreto, los turismos tienen una media de edad de 14,2 años, mientras que los comerciales ligeros o furgonetas alcanzan los 14,4 años, los vehículos industriales a los 14,9 y los autobuses a los 11,8 años. Todo lo sabemos gracias a la información que recoge un informe elaborado por IDEAUTO en la Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC) a partir de los datos del parque móvil de la DGT del año 2023.
Aunque la suma total de turismos, vehículos comerciales, industriales y autobuses que se mueven por nuestras carreteras subiera el año pasado en un 1,01% hasta alcanzar las 30.722.465 unidades, lo cierto es que las bajas ventas de vehículos nuevos contribuyen a aumentar esta media de edad año tras año. Además, factores como el enorme incremento de los precios que han experimentado los automóviles o la incertidumbre sobre qué tipo de energía elegir a la hora de adquirir un vehículo nuevo no ayudan a devolver las cifras de ventas a los valores de hace varios años. De hecho, el mercado español lleva cuatro años por debajo del millón de matriculaciones anuales de turismo.
El 25,3% de los automóviles en circulación tienen más de 20 años
Más allá de las estadísticas totales, el dato que más llama la atención del informe elaborado por IDEAUTO es que uno de cada cuatro vehículos que vemos por nuestras carreteras, el 25,3%, tiene más de 20 años. En cifras absolutas estamos hablando de un total de 7.782.321 vehículos, en su mayoría turismos, vehículos comerciales e industriales. José López-Tafall, director general de ANFAC, ha destacado en relación con el informe que "sólo en la última década nuestro parque ha envejecido más de tres años, una situación alarmante para la que hay que actuar de inmediato".
Según apunta ANFAC, para conseguir revertir esta tendencia "hay que mejorar la eficiencia de los planes MOVES con ayudas directas a la compra y, al mismo tiempo, fomentar una fiscalidad que incentive la compra de vehículos electrificados". Unos vehículos electrificados que, de momento, no tienen un peso muy importante en el total del parque de automóviles del estado, puesto que el 94,3% del total corresponde a vehículos diesel o gasolina. De hecho, con 18.525.837 unidades y el 60,3% de cuota, el diésel es el tipo de mecánica líder, seguido por la gasolina con 10.439.449 unidades y el 34% del total. Y todo ello, pese a que el diesel haya descendido un 1,3% y la gasolina un 0,1% respecto al 2022.
La suma de vehículos sin etiqueta o con etiqueta B representa el 59,2% del total del parque
Ahora que resuenan las campanas de la supuesta restricción de acceso a la ZBE de los vehículos con etiqueta B en 2027 es un buen momento para analizar los datos desglosados referentes a las etiquetas de los vehículos. Actualmente en el conjunto del estado un total de 9.036.129 vehículos no disponen de ningún tipo de etiqueta, el 29,4% del total. Por su parte, 9.141.364 vehículos tienen etiqueta B, un 29,8% del total. Todos ellos representan el 59,2% del parque automovilístico, superando el 35,1% de coches en circulación con etiqueta C.
Como puede verse, a pesar de que los coches sin etiqueta hayan disminuido en un 2% respecto a 2022 y los que tienen etiqueta B un 0,9%, la cantidad total sigue siendo muy elevada. Y lo más preocupante de todo es que tan sólo un 5,7% dispone de etiquetas de bajas emisiones: un 4,5% de etiqueta ECO y un 1,2% de etiqueta 0. Eso sí, los coches con ECO experimentaron un crecimiento del 31% y alcanzan las 1.386.925 unidades, mientras que los 0 crecieron un 50,9%, pero tan sólo suponen 364.765 vehículos. Sea como fuere, parece que habrá que pulsar el acelerador de las ventas de vehículos de bajas emisiones si lo que se quiere es cumplir los ambiciosos planes de descarbonización que persiguen tanto a la Unión Europea como a los estados... Pero existen demasiados factores externos que no ayudan a los usuarios a dar el paso.