Toni Comín se presenta para presidir el Consejo de la República pese a los escándalos por su gestión

BarcelonaEl eurodiputado Toni Comín ha decidido presentar candidatura para relevar a Carles Puigdemont a la presidencia del Consejo de la República, pese a los escándalos por su gestión en este órgano. El ahora vicepresidente del Consell justifica la decisión de dar el paso porque considera que el Consell sigue siendo "del todo imprescindible para culminar el camino hacia la independencia" porque recoge "el espíritu" y "el mandato" del 1 d octubre de 2017.

Comín también remarca que el Consell ha estado indisolublemente vinculado al exilio desde su origen y este vínculo sigue siendo "una fuente de legitimación y fortaleza para el Consejo", en la medida en que el exilio es "la consecuencia de que los exiliados" asumieron por haber convocado el referendo. Asimismo, defiende que "la internacionalización de la causa catalana debe ser, ahora más que nunca, una prioridad del movimiento independentista".

Comín adopta la decisión de postularse como nuevo presidente del Consell, aunque la dirección de la entidad tomó medidas drásticas a finales de octubre ante las dudas que ha generado su gestión. Así, el Consell optó por delegar en otros dos miembros de la cúpula todas las decisiones económicas, de modo que Comín, ahora vicepresidente, ya no pueda tomar decisiones solo sobre los recursos que llegan.

Esta resolución llegó después de analizar el resultado de la auditoría externa, que calificó de "moderadamente preocupante" la gestión del dinero que ha hecho Comín y que generóuna guerra abiertaentre el eurodiputado electo de Junts y los administradores de CatGlobal, la entidad que gestiona las donaciones del Consell. Según la auditoría que hizo pública el Consell, Comín habría cargado gastos al Consell que "no se pueden procesar según la normativa belga" a la entidad por un importe total de 15.530 euros, aunque la entidad decidió considerarla los gastos de representación y validarlos. Entre otras cosas, se trataba del pago, con dinero del Consell, de una multa de tráfico en Comín de 363 euros; el alquiler de un vehículo durante quince días de 1.997 euros; un apartamento quince días más de 2.562 euros; el pago de un impuesto relacionado con un apartamento en Lovaina de 4.608 euros, y retiradas en efectivo por valor de 6.000 euros.

Habrá que ver ahora, pues, cómo su controvertida gestión afecta a su carrera para dirigir la entidad. Y es que justo después de este escándalo, los miembros del gobierno de la organización en el exilio, que hasta entonces presidía Carles Puigdemont, dimitieron en bloque, lo que dio paso a una forzosa convocatoria de elecciones. La junta gestora del Consejo de la República ha publicado esta semana el decreto de convocatoria de elecciones en la presidencia de la entidad, que se celebrarán entre el 8 y el 12 de febrero. El plazo para presentar candidaturas finaliza el 22 de enero.

Hasta ahora, según varias fuentes consultadas por el ARA, se han puesto varios nombres sobre la mesa: se ha sondeado al expresidente Quim Torra y también ha aflorado el nombre de Laura Borràs, hasta ahora presidenta de Junts. El entorno de Torra hasta ahora no ha querido pronunciarse, pero algunas fuentes afirman que el exjefe del ejecutivo ya ha declinado dar el paso porque no quiere volver a primera línea política. Por otra parte, el entorno de Borràs responde que la expresidenta del Parlament está centrada en el proyecto de la fundación de Junts, a pesar de las dudas jurídicas que hay que pueda formar parte de la misma por su inhabilitación por el caso de la Institución de las Letras Catalanas.