Administración pública

Unos 200 altos funcionarios se sublevan contra el Gobierno: quieren seguir teletrabajando

Presidencia no dará marcha atrás: "Queremos unos directivos públicos que dirijan sus equipos y recorran el país"

Fachada del Palacio de la Generalitat
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BarcelonaLa decisión del Gobierno de eliminar el teletrabajo para los altos directivos de la Generalitat no ha sido bien recibida por las altas esferas de la administración pública catalana. Según ha avanzado Catalunya Ràdioy ha confirmado el ARA, el malestar se ha extendido entre unos 200 altos cargos de la Generalitat, la mayoría subdirectores generales y funcionarios, desde que se hizo pública la medida. En señal de protesta, un grupo ha impulsado un manifiesto en qué lamentan la decisión y defienden que la presencialidad es una dinámica del pasado: "Es un modelo del siglo XIX y no del siglo XXI", argumentan en el manifiesto. antes de eliminar el teletrabajo –que se introdujo durante la pandemia–, es necesario realizar una evaluación independiente de su efectividad con datos objetivos en vez de tirar por el derecho. De momento, Función Pública no piensa dar marcha atrás. principios de año, el Gobierno optó por poner punto y final al teletrabajo para los máximos funcionarios de los departamentos porque considera que trabajar desde casa es "difícilmente compatible con la naturaleza y responsabilidades inherentes" a sus cargos. La medida entrará en vigor el 29 de enero, dado que la conselleria de Presidencia dio quince días a los departamentos para reorganizarse. La instrucción se mantiene pese a la contestación interna: "Queremos unos directivos públicos que dirijan sus equipos y recorran el país atendiendo a las peticiones de ciudadanos y empresas, y eso es incompatible con trabajar desde casa", sostienen este jueves fuentes del departamento de Presidencia. Hacía uno. De éstos, prácticamente todos eran subdirectores generales, el último escalón de la administración ocupado por un funcionario (pero de libre designación, es decir, de confianza política) El centenar de directivos que tenían reconocido el teletrabajo recibirán en los próximos días las instrucciones personalizadas que hará cada departamento para su revocación. que se tomó la decisión –creen que debería haberse modificado el decreto que regula el teletrabajo–, pero el Gobierno disiente y defiende la corrección de la medida.

Otras quejas

En el manifiesto, los funcionarios se quejan de las dificultades de conciliación que les comportará eliminar la modalidad híbrida de trabajo y el impacto que esto tendrá en la carrera profesional de las funcionarias, "dado que las tareas de cuidado, pese a los avances, continúan siendo responsabilidad, mayoritariamente, de las mujeres". Además, señalan el impacto ambiental de los desplazamientos en transporte privado que hasta ahora se habían podido ahorrar y recuerdan que el contacto con los superiores políticos, que a menudo no están en las oficinas, se seguirá haciendo con medios telemáticos. los altos funcionarios critican el mensaje que, según ellos, está enviando al Gobierno sobre el sector público con esta instrucción: "La comunicación efectuada en los medios ha reforzado los estereotipos que hemos luchado por erradicar durante años y perjudica la imagen pública de todos los empleados de la Generalitat, ya que el subtexto indica que para trabajar efectivamente hay que volver a la oficina", lamentan. Por todo ello, piden al ejecutivo dejar sin efectos la instrucción, evaluar el impacto de esta medida y estudiarla dentro de la comisión de expertos para la mejora del sector público creado por el Gobierno.

¿Un primer paso?

La decisión de fulminar el teletrabajo al más alto nivel se enmarca en la voluntad del ejecutivo de Salvador Illa de reforzar la presencialidad dentro de la administración pública y sólo afecta a los subdirectores generales y asimilados, que son el nexo entre los técnicos y los cargos políticos de cada departamento. ¿Pero podría extenderse al resto de funcionarios? Fuentes sindicales consultadas por el ARA recalcan que, si el Gobierno quiere modificar las condiciones de trabajo de los funcionarios, tendrá que hablar con ellos, porque el decreto vigente reconoce el derecho del teletrabajo de este colectivo. Por ahora, el ejecutivo sólo ha tomado la medida para los altos directivos. Según las fuentes sindicales, no ha habido ningún movimiento desde Presidencia por prescindir del teletrabajo en las escalas inferiores de la administración.

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