Vivienda

Barcelona cede 27 solares a la Generalitat para construir 1.764 viviendas públicas

Aragonès y Collboni celebran la primera reunión institucional de trabajo

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El presidente, Pere Aragonès, y el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni

BarcelonaLa última vez que el presidente, Pere Aragonès, y el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, se vieron en el Palau de la Generalitat fue el día en que el socialista accedió al cargo con el pacto sorpresa entre el PSC, los comunes y el PP. "Es un acuerdo hecho desde Madrid", espetó en ese momento Aragonès en la misma recepción institucional, después de que el PSC dejara en papel mojado el pacto JxCat-ERC para gobernar la capital. Pero ese clima hostil ya se ha esfumado: este miércoles el presidente Aragonès y el alcalde Collboni han mantenido el primer encuentro institucional y ya han anunciado un pacto. Tras casi dos horas de conversación, han trasladado que Barcelona cederá hasta 27 solares a la Generalitat con el objetivo de construir hasta 1.764 viviendas públicas.

Lo ha explicado en una comparecencia la consellera de la Presidencia, Laura Vilagrà, que ha puesto el acuerdo como ejemplo de trabajo conjunto entre las dos administraciones. "Este es un gobierno municipalista, es un aliado de los ayuntamientos", ha proclamado Vilagrà, que sitúa la vivienda como una "prioridad" compartida tanto por el ejecutivo de Esquerra como por el consistorio barcelonés. ¿En qué consiste ese pacto? Los solares cedidos por el Ayuntamiento de Barcelona a la Generalitat están situados en los distritos de Sant Martí, Nou Barris y Sants, pero no todos estarán disponibles de inmediato. De los 27 hay 14 en los que se puede construir a corto plazo unos 811 pisos, mientras que el resto estarán disponibles a lo largo del mandato. Sin embargo, ambos ejecutivos han admitido que el ritmo para sacar adelante la vivienda protegida dependerá de la disponibilidad presupuestaria del Incasòl, el ente de la Generalitat que se encarga de la promoción de la vivienda pública.

Para Collboni, que ha comparecido después de Vilagrà, la vivienda es el "caballo de batalla" del Ayuntamiento en esta legislatura y ha celebrado que el gobierno catalán se implique, ya que –ha resaltado– es su competencia. En este sentido, ha puesto de relieve que la reunión con Aragonès haya sido "provechosa, productiva y con resultados concretos" en esta materia. El alcalde ha evitado valorar si había habido un cambio de tono de Aragonès respecto al día en el que fue investido y se ha limitado a destacar la colaboración entre ambos gobiernos: "1.764 pisos [...]. Vamos por el buen camino". Además, ha agradecido el esfuerzo por desplegar otros 215 mossos d'esquadra en Barcelona. De hecho, incluso ha reiterado la voluntad de tejer un "gobierno progresista en la ciudad, un escenario que podría incluir a los republicanos. De hecho, esta ha sido desde el primer momento la propuesta que desde los comunes se ha hecho al dirigente socialista.

En cualquier caso, tanto Vilagrà como Collboni han rechazado concretar posibles pactos de estabilidad en Barcelona o en Cataluña -se han escudado en la institucionalidad del encuentro- y también han querido mantener distancias respecto a las negociaciones sobre la investidura española. El alcalde de Barcelona, eso sí, ha reclamado un gobierno progresista y ha puesto en valor el "diálogo" cuando se le ha preguntado sobre la amnistía que piden los independentistas. La consellera de la Presidencia, en cambio, ha cargado contra la propuesta del líder del PP, Alberto Núñez Feijóo: "Va contra los intereses de Catalunya".

Aparte de este acuerdo en materia de vivienda, el Govern y el Ayuntamiento de Barcelona han anunciado la reactivación de la comisión mixta, que se reunirá para abordar los temas compartidos el 20 de octubre, con el transporte público como tema central.

Ronda de contactos

El encuentro con Collboni forma parte de una ronda de contactos que ha puesto en marcha el presidente Aragonès con los alcaldes de las principales ciudades catalanas, empezando por las capitales de provincia. Este jueves será el turno del alcalde de Girona, Lluc Salellas, y la próxima semana el jefe del ejecutivo se verá con el de Tarragona, Rubén Viñuales, y el de Lleida, Fèlix Larrosa.

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