La empresaria Anna Navarro, número dos de Puigdemont en las elecciones del 12-M
Referente del sector de las nuevas tecnologías, Junts busca reforzar con ella el perfil económico de la candidatura
BarcelonaCarlos Puigdemont ya tiene número dos para las elecciones del 12-M. El expresidente ha fichado a la empresaria Anna Navarro (Olot, 1968), referente en el sector de las nuevas tecnologías, para hacer tándem de cara a los comicios catalanes. La incorporación ha sido confirmada por Junts este martes por la mañana y busca reforzar el perfil económico de la candidatura con la que el partido se presentará en las urnas y "visualizar el compromiso con la buena gestión".
Con una destacada trayectoria en Silicon Valley, Navarro es considerada una de las empresarias más influyentes del sector tecnológico mundial. Conocida profesionalmente como Anna Navarro Schlegel (Navarro Descals, antes de adoptar el apellido de su marido para adentrarse en la cultura estadounidense), en diciembre del 2021 recibió la Cruz de Sant Jordi por "su acción innovadora en estrategias de globalización para empresas tecnológicas, partiendo de la filología y la perspectiva de género”. Además, un año antes fue nombrada la mujer más influyente en el mundo de la tecnología por la revista Analytics Insight y en 2022 el exconseller Jaume Giró la nombró miembro del Consejo Asesor en Política Económica y Hacienda Pública.
Tras pasar cinco veces por la universidad, donde se graduó en filología anglo-germánica primero y en telecomunicaciones a continuación –y diversas especializaciones–, formó su empresa en San Francisco en 1992 y ha desarrollado decenas de patentes tecnológicas. A lo largo de su carrera profesional, Navarro ha traído equipos técnicos de grandes corporaciones americanas como Cisco Systems, Xerox o Procore Technologies. Mientras, defendió la independencia de Catalunya y la lengua catalana en su actividad, haciendo recurrentes sus publicaciones en las redes con una estelada. Incluso dijo en una entrevista en el ARA en 2021 que le es "igual" el "coste empresarial" que pudiera tener su pronunciamiento político: "Tengo 53 años, si no puedo decir lo que pienso... [...] No me gustan los países que quieren colonizarlos otros no me gustan las políticas que quieren reducir idiomas", aseguró. Sin embargo, admitió el riesgo de boicot, si bien se rebeló: "Pero ¿cómo quieres vivir tu vida si no puedes contarte?", dijo.
En declaraciones difundidas por Junts, Puigdemont explica que ha pedido a Navarro que le acompañe a la lista para que "ayude en esta nueva etapa del país y ponga su excepcional trayectoria al servicio de Catalunya". "Si queremos crear las condiciones para que no se vaya talento o para que devuelva lo que ya se ha ido, hay que fomentar las oportunidades adecuadas", añade el expresidente, convencido de que esto ocurre para que el Gobierno "sea ambicioso, competente y tenga capacidad de relacionarse directamente con el mundo". Y es que la candidatura de Puigdemont tiene entre ceja y ceja la reactivación económica del país y el regreso de las empresas que sacaron las sedes del Principado en el 2017, al tiempo que pretende "fomentar" esta "atracción de talento" nuevo de todo el mundo .
Navarro, por su parte, ha aceptado la propuesta para poner su "al servicio de Catalunya, que puede ser mucho más atractiva, en voz propia y sin ningún complejo". "Vengo a trabajar por lo que nos merecemos los catalanes y, por eso, he decidido sumarme a la candidatura del presidente Carles Puigdemont por nuestra prosperidad y libertad como nación", ha declarado.
Estrategia económica de Junts
Éste es un movimiento importante para la estrategia económica que dibuja la candidatura de Junts+Puigdemont por Cataluña. El expresidente asegura que se marca como objetivo "levantar el país y devolverlo a la vanguardia que nos han hecho perder todos estos años de represión y resignación". De hecho, insiste en estos dos conceptos para hacer hincapié en las consecuencias negativas de la persecución del Proceso y las reivindicaciones endémicas del catalanismo, pero también en la actitud que los junteros han atribuido al Govern monocolor de ERC presidido por Pere Aragonès . De ahí la voluntad de pasar "de la resignación a la ambición" en esta nueva fase que debe permitir encaminar al país hacia la "libertad definitiva".
En este sentido, el expresidente en el exilio ha argumentado que quiere dejar atrás los efectos de la actuación de las instituciones españolas a raíz del referéndum del 1-O, pero también "la hostilidad del Estado a través de una dura represión económica" y los "excedentes de inversión en Madrid que dan vergüenza", que han puesto "en riesgo el dinamismo económico de Catalunya". Poner fin al déficit fiscal y la falta de ejecución presupuestaria, así como el retorno y captación de talento e inversiones, es fundamental para Junts y Navarro será una pieza clave.
Precisamente, Junts pactó con el PSOE para la investidura de Pedro Sánchez la confección de un plan de regreso de las empresas que retiraron la sede de Catalunya en el 2017. Para ello, los junteros han defendido el refuerzo de la ley de sociedades de capital para incentivar la vuelta y sancionar a quienes incumplan la legislación que detalla que debe establecerse la sede donde se encuentra su "principal establecimiento".