La gobernabilidad en el Estado

Feijóo comienza el curso atacante Cataluña: “Ninguna minoría nos impondrá cómo vivir”

El PP aparca el rifirrafe migratorio para centrar los ataques en la financiación singular

El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, abre el curso político en Galicia
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BarcelonaDespués de un regreso de las vacaciones centrada en las rencillas en torno a la política migratoria, el Partido Popular vuelve a su programación habitual en el inicio del curso político. En un acto con el expresidente español Mariano Rajoy –que no ha tomado la palabra–, el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha vuelto a señalar al pacto por la financiación de Cataluña como un agravio insalvable para los territorios del Estado. Es por ello que, desde Galicia, ha prometido, junto a los presidentes gallego, valenciano y castellano-leonés, que su partido será capaz de hacer que ninguna minoría "imponga cómo debemos vivir en España".

¿Cómo? No ha concretado la forma de hacerlo, pero ha hecho valer el poder autonómico de los populares, que gobiernan en 11 de las 16 comunidades, como muro de contención contra las "cesiones" y "humillaciones" del gobierno de Pedro Sánchez. A Feijóo no se le escapa que, en materia de financiación, no existe otro consenso en el PP que la negativa a cualquier concesión que se pueda leer como un privilegio para Catalunya. Más allá de eso, las distintas prioridades entre sus líderes autonómicos impiden trazar un modelo alternativo al actual.

Aunque Feijóo no ha hecho referencia a ello, el presidente de Galicia, Alfonso Rueda, sí ha negado que el PP esté dividido por esta cuestión: “Debemos poder defender lo que interese en cada territorio teniendo en cuenta lo que nos interesa en todos. E intentarán dividirnos, pero no nos conocen”, ha expresado. El próximo viernes, Feijóo reunirá a sus presidentes autonómicos para trazar un “frente común” contra el pacto entre el PSC y ERC, después de que todos ellos firmaran un manifiesto oponiéndose a la mejora del autogobierno de los catalanes.

Quien Feijóo cree tener profundas discrepancias en esta materia es el PSOE. De hecho, ha reiterado que un nuevo marco de financiación para Cataluña implica también gobernar contra las -pocas- comunidades que gobiernan los socialistas y contra los "pocos socialistas dignos que quedan". Por eso ha decidido vaticinar que todo el que quiera "oponerse" a Sánchez acabará "purgado".

"Nadie se ha leído el acuerdo"

En paralelo, desde Andalucía, la vicepresidenta y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha defendido de nuevo el acuerdo para hacer presidente a Salvador Illa, pero ha insistido en que no se trata de un modelo excepcional para Cataluña. "Todo el mundo habla del acuerdo, pero os aseguro que nadie se lo ha leído, porque se dicen cosas que no están", ha dicho la vicepresidenta, que ha asegurado que no hace más que desarrollar el Estatut catalán, y ha remarcado que Andalucía tiene elementos “idénticos” en el suyo. "Otra cosa es que quieran desarrollarlo", ha añadido como un dardo contra el presidente de la Junta de Andalucía, el popular Juanma Moreno. Montero ha admitido que la política de su ejecutivo a veces ha sido "incomprendida" incluso "por los suyos", pero ha pedido confianza y unidad de cara al nuevo curso político, que estará marcado por el congreso del PSOE, que el viernes Sánchez decidió avanzar.

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