Marchena sale en defensa de Llarena por el frente del exilio

El presidente de la sala segunda defiende que el TJUE "no está para derrotar" a los estados

2 min
El presidente de la sala segunda del Tribunal Supremo, Manuel Marchena, en una conferencia

MadridLa causa del Procés a menudo sitúa a Pablo Llarena en la diana. La sentencia del juicio enmendó en parte su instrucción al rebajar a sedición el delito de rebelión que sostuvo durante muchos meses. Ahora el frente del exilio es un verdadero dolor de cabeza para Llarena, señalado por sus intentos frustrados para extraditar al expresident Carles Puigdemont. El último episodio tiene que ver con la cuestión prejudicial presentada ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) sobre las posibilidades que tienen los estados para rechazar euroórdenes y si esto supone la suspensión del procedimiento para Puigdemont. El vicepresidente del TJUE consideró que sí, contraviniendo el criterio de Llarena. Este jueves, sin embargo, ha recibido una palmadita en la espalda del juez que acabó presidiendo el tribunal que condenó a los líderes soberanistas.

Manuel Marchena, que ofrecía una conferencia en el Instituto de Emprendimiento Avanzado en Madrid, ha sido habilidoso para esquivar la pregunta. No se ha querido mojar sobre la última resolución del TJUE –denegó devolver la inmunidad a Puigdemont argumentando, de nuevo, que la euroorden está suspensa–, pero ha querido marcar los límites de la interpretación política y mediática de lo que pueda acabar pasando. “No puede haber una derrota ante el TJUE”, ha afirmado, refiriéndose a las cuestiones prejudiciales como la que Llarena impulsó a raíz de la negativa de Bélgica a extraditar al exconseller Lluís Puig. “El TJUE resuelve una duda y la respuesta no se puede interpretar en términos de victoria o derrota”, ha reiterado. Lo que sí que condena los estados es el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, que tendrá en sus manos decidir sobre la sentencia del Procés. A la espera de lo que pueda suceder, Marchena ha dejado dicho que España es el país con menos condenas de Estrasburgo.

Quizás Marchena ha conseguido convencer a los oyentes, entregados al presidente de la sala segunda del Supremo, que ha teorizado sobre la acción popular en los procesos penales. De entrada, ya ha dejado clara su posición contraria a este ejercicio si es para trasladar a los tribunales la “batalla política”. Antes había apuntado que no tenía intención de dar titulares a los periodistas, de forma que el rechazo a la participación de Vox en el juicio del Procés se ha tenido que leer entre líneas.

stats