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El Barça se da más margen para salvar los números

La junta directiva de Joan Laporta considera que tiene tiempo hasta el final del verano para cerrar el ejercicio económico 2023-2024

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Joan Laporta durante la presentación de Hansi Flick como nuevo entrenador del Barça.

BarcelonaLos ejercicios económicos del Barça comienzan el 1 de julio y finalizan el 30 de junio del año siguiente. Pero fuentes oficiales del club azulgrana explican al ARA que "el cierre contable [del ejercicio 2023-2024] todavía no se ha hecho" y que el margen "normalmente" es hasta finales de septiembre. En cualquier caso, puntualizan que este margen depende del hecho de que la empresa auditora confirme "si un ingreso o gasto es computable en un ejercicio u otro".

La junta de Joan Laporta ahora mismo tiene dos grandes frentes abiertos para acabar con números verdes el ejercicio 2023-2024 y disponer de fair play financiero para poder ejecutar fichajes como el deseado de Nico Williams y, sobre todo, inscribirlo: renovar su contrato con Nike y encontrar nuevos inversores para Barça Vision. Sin estas operaciones, teniendo solamente en cuenta los números ordinarios, el Barça cerraría el ejercicio 2023-2024 con pérdidas. Por este motivo es de vital importancia que la empresa auditora de los números azulgranas, Grant Thornton, dé el visto bueno para que cuando se cierren ambos acuerdos entren a formar parte de las cuentas del pasado ejercicio y no del actual, aunque ya haga un mes que ha empezado. Además, debería validar las operaciones LaLiga de Javier Tebas y la asamblea de socios compromisarios del Barça que, probablemente, se celebrará durante el mes de octubre.

"La normalidad en un proceso de auditoría de una empresa o una institución es que el auditor verifique las operaciones que están incluidas en el libro de la institución el 30 de junio. Partiendo de esta base, ni el contrato con Nike ni el inversor de Barça Vision estaban firmados el 30 de junio. Así que, a priori, estas operaciones no podrían entrar en el ejercicio 2023-2024", explica al ARA un experto financiero. De todas formas, puntualiza que, en un proceso de auditoría, "puede pasar que tengas avanzada la negociación de un contrato en un 90% y le muestres al auditor los preacuerdos y precontratos que tienes firmados para pedirle permiso para imputarte las operaciones en el ejercicio anterior". Pero afirma que "cada día que pasa sin tener el contrato firmado es más difícil justificar esto ante el auditor porque estás más lejos del 30 de junio".

El optimismo de Laporta

"Hoy podemos afrontar fichajes de la magnitud de los que se está hablando (en referencia a Nico Williams) porque hemos hecho el trabajo", sentenció Laporta el jueves durante la presentación de Hansi Flick como nuevo entrenador del Barça. Este optimismo del presidente azulgrana lo argumentó con el regreso a la norma 1/1 de la Liga (no tienes restricciones financieras a la hora de inscribir a jugadores) gracias a que, desde las oficinas de Arístides Maillol, explican que nuevos inversores están dispuestos a entrar en el proyecto de Barça Vision. Si la operación se cierra, los recién llegados secarían el agujero que ha dejado el impago de Libero en Barça Vision y, de este modo, el activo del club no perdería los 408 millones de valor contable que se plasmaron en el cierre del ejercicio 2022-2023.

Joan Laporta durante su intervención en la presentación de Hansi Flick.

Nike es clave

El as que tiene el Barça para cerrar con números verdes el ejercicio anterior es la renovación del contrato con Nike, que en ningún caso entraría como inversora de Barça Vision. "Estamos satisfechos de cómo están yendo estas negociaciones. Creo que tendremos noticias a medio plazo", dijo Laporta el jueves. Cuando se cierre esta operación, todo parece indicar que el club azulgrana recibirá una bonificación de unos 100 millones de euros que incluirá en el ejercicio 2023-2024.

Pero esta voluntad tiene un condicionante. Si se trata de una simple prima por firmar el contrato, que en principio sería por diez años, desde el punto de vista contable el Barça debería dividir el total percibido por cada uno de los ejercicios del contrato. Es decir, que si la bonificación es finalmente de 100 millones y la duración de diez años, el club azulgrana únicamente podría computarse 10 millones por este concepto por cada año del contrato. Empezando por el ejercicio 2023-2024.

En cambio, si la junta de Laporta incluye íntegramente esta bonificación en el ejercicio 2023-2024 será porque la operación comportará que el Barça ceda a Nike alguna de las líneas de negocio del contrato. Por ejemplo, la venta de productos online o alguno de los activos de Barcelona Licensing & Merchandising (BLM). La pretensión inicial del Barça era precisamente contar con todo el comercio electrónico del club a partir de la firma del nuevo contrato. Actualmente, Nike explota la venta de productos del Barça por internet fuera de Europa.

Un patrocinador en el pantalón

Por otra parte, según informaron Mundo Deportivo y Catalunya Radio, el Barça está negociando con una marca para conseguir un patrocinio de unos 5 millones de euros anuales para el pantalón de la indumentaria de juego, un activo que hasta ahora no está explotado comercialmente. Esta operación, en principio, el club también la intentaría incluir en el resultado económico 2023-2024 y, si fuera aceptada por el auditor, daría un pequeño empujón para cerrar el ejercicio con números verdes y mejorar el fair play financiero.

Pese a que exista la posibilidad de que la empresa auditora dé margen hasta septiembre a la junta de Laporta para cerrar operaciones del ejercicio económico 2023-2024, hay otra fecha que el Barça tiene en cuenta. La de la finalización del mercado de fichajes, el pasado 30 de agosto. Para afrontar operaciones como la de Nico Williams es indispensable ingresar dinero antes de ese horizonte. Aparte de solucionar el impago de Barça Vision, la renovación del contrato con Nike, conseguir nuevos patrocinadores e incluso la venta de jugadores serán cruciales.

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