Las dificultades del Barça por "construir una Torre Agbar cada mes y medio"

BarcelonaEl Barça ha querido realizar un acto de transparencia con la reforma del Camp Nou. Con 342 millones de euros ya gastados –el 32% del total presupuestado– en las obras, el club ha mostrado una fotografía de lo que se ha hecho hasta ahora y de lo que se espera realizar en los próximos meses. Sin embargo, tal y como ha informado el ARA este martes, los responsables del proyecto no han podido responder con exactitud a la pregunta clave, que no es más que saber la fecha en la que el estadio podrá volver a acoger partidos de fútbol, ​​aunque sea con el aforo limitado. La posición oficial que se repite desde hace tiempo se ha mantenido en la comparecencia de este miércoles.

"Estamos dedicando todos los esfuerzos para jugar un partido a finales de año en el Camp Nou", ha dicho la vicepresidenta institucional y responsable del Espai Barça, Maria Elena Fort. En la misma línea ha ido el director de operaciones del proyecto, Joan Sentelles, quien ha admitido que los "imponderables" se acumularán "a medida que nos vayamos acercando a la fecha [de finales de diciembre]". Entre los problemas que pueden surgir se encuentran las limitaciones en el horario de las obras y las condiciones del tiempo. Por ejemplo, este miércoles, en el que el club ha organizado una visita a las obras con periodistas, la temperatura era superior a los 30 grados a pleno sol a las diez de la mañana. Será un verano duro para los cientos de operarios que trabajan en Aristides Maillol.

Aún así, la previsión del Barça es volver al Camp Nou con un aforo de 64.000 asientos a mediados de la temporada 2024-25, es decir, con la primera gradería y la segunda reformadas a pleno rendimiento mientras en paralelo se construye la tercera desde cero. Para el verano de 2025, se prevén acelerar los trabajos para montar la cubierta del estadio y que en el curso 2025-26 la tercera gradería y la zona vip funcionen al 90% de la capacidad. Por último, el calendario prevé la entrega de la obra en el verano del 2026. Si todo va bien, el nuevo Camp Nou tendrá 104.600 sillas, unas 5.000 más que el viejo.

Problemas para contratar personal de instalaciones

Sentelles, que estuvo implicado en la desaparición del Reus y es de la máxima confianza del presidente Joan Laporta, ha hablado de una "obra viva", "fiscalizada como ninguna otra en Europa" y de una complejidad enorme. "Estamos construyendo una Torre Agbar cada mes y medio", ha argumentado, al tiempo que ha reconocido las dificultades que Limak, la constructora agraciada en el concurso de principios de 2023, se está encontrando para contratar a profesionales "especialmente para las instalaciones ". Ante esta complicación, que puede ralentizar las obras, una fuente cercana al Espai Barça sentencia en el ARA: "Que faltaría personal ya se sabía. Hay mucha mano de obra calificada que no quiere trabajar con los turcos".

Cuando se publicó que Limak reformaría el Camp Nou, pasando por delante de las constructoras españolas más importantes, la entidad filtró los días siguientes a que la empresa había aceptado unas penalizaciones en caso de no entregar la obra en las condiciones establecidas por contrato, incluida una de un millón diario por día de retraso. Sentelles no ha precisado si el castigo en caso de demoras es exactamente éste. Tampoco ha fijado la fecha a partir de la que los turcos deberían empezar a responder con penalizaciones si no cumplen el calendario. "Tenemos la potestad y la obligación de aplicar penalizaciones porque respondemos ante unos inversores, pero la fecha límite no podemos decirla porque no la sabemos", ha afirmado.

Cabe decir que cuando Limak firmó el contrato para construir el nuevo Camp Nou, el proyecto ejecutivo de la reforma no estaba cerrado. Durante los últimos meses, el plan ha experimentado modificaciones que la propia constructora turca ha ido validando. Por tanto, ante un litigio relacionado con las penalizaciones, la compañía siempre puede argumentar que el proyecto ha evolucionado sobre la marcha, según apuntan expertos en la materia consultados por este diario.

Fredor con las constructoras perdedoras

Pese a la firmeza respecto a estas posibles penalizaciones, los comparecientes este miércoles no escatimaron elogios a Limak, la única constructora que, como dijo Sentelles, "aceptaba un precio máximo garantizado" de 1.071 millones contando las contingencias. El responsable operativo del Espai Barça, encargado de relajar algunos requisitos de la licitación –hecho que posteriormente beneficiaría a Limak–, ha recordado igualmente que las demás constructoras finalistas –Acciona, FCC y Ferrovial– no quisieron firmar las retenciones, garantías, avales y penalizaciones que pedía el club y que por eso también fueron descartadas .

Sobre el Palau Blaugrana, el Barça ha insistido en que su construcción está incluida en la financiación de 1.450 millones aprobada hace un año y pico, aunque no aparezca explícitamente en la estructura del crédito, algo que ha motivado la aceptación a trámite de la denuncia de un socio. El plan previsto por la entidad es inaugurar el nuevo pabellón sobre los terrenos del antiguo Miniestadi en 2027.