Stellantis se hunde en la bolsa con la dimisión de Carlos Tavares
Un comité ejecutivo se hará cargo de la dirección hasta el nombramiento de un nuevo CEO el primer semestre del próximo año
BarcelonaEl valor de las acciones del grupo automovilístico Stellantis, propietario de marcas como Citroën, Peugeot, Opel, Fiat, Chrysler o Jeep, entre otros, se hundía esta mañana en las bolsas de Milán y París –los mercados en los que cotiza en Europa– después del anuncio ayer de la dimisión de su consejero delegado, Carlos Tavares, uno de los ejecutivos más conocidos y valorados de la industria de la automoción en el mundo.
En la apertura de los mercados las acciones de Stellantis caían un 7%, ya media mañana la caída se había ampliado hasta más del 8%. De hecho, la pérdida de cotización de Stellantis arrastraba a números rojos Renault, que también cotiza en París, y teñía de rojo el índice selectivo francés, el CAC 40, y el selectivo italiano, FTSE MIB de Milán.
La dimisión, según reconoció la propia empresa, se produce por las desavenencias entre el consejo de administración de la compañía y el hasta ahora primer ejecutivo, y con el trasfondo de los malos resultados previstos por la compañía este año. El administrador independiente de Stellantis, Henri de Castries, admitió que "durante las últimas semanas han aparecido puntos de vista distintos entre el consejo de administración y el consejero delegado".
Por el momento, las funciones ejecutivas de Tavares las asumirá un comité ejecutivo y la compañía espera anunciar el nombre de su sustituto durante el primer semestre del próximo año. El comité ejecutivo lo dirigirá el presidente del consejo de administración del holding automovilístico, John Elkann, uno de los nietos de Gianni Agnelli, fundador de Fiat.
La dimisión de Tavares se enmarca en los malos resultados previstos del grupo para este año, golpeado por la crisis que afecta a todo el sector de la automoción, especialmente a Europa y América, lo que ha desatado una guerra comercial con la China, el gran productor de coches del mundo. En Estados Unidos, Stellantis tiene varios frentes abiertos, como por ejemplo una demanda de accionistas contra la compañía por entender que habían hinchado los inventarios. En Europa, Stellantis debe hacer frente a la crisis de la gran marca italiana, Fiat, que forma parte del conglomerado. En Italia, Stellantis registró una reducción de más de un tercio de su producción durante el primer semestre de 2024, y las previsiones no son favorables: todas las plantas italianas del grupo están en números rojos. caída del 48% en comparación a un año atrás. Tavares reconocía entonces que los resultados de la compañía no estaban la altura". La situación no mejoró en el tercer trimestre, con un descenso de los ingresos del 27%.
Cese inmediato
La dimisión de Tavares, forzada por el consejo de administración de la empresa, ha sido con efectos inmediatos, algo no demasiado habitual en el sector. Ahora empiezan a surgir los nombres de los posibles sucesores. Fuentes de sector en Francia apuntan como uno de los posibles sucesores Luca de Meo, quien fue primer ejecutivo de Seat y actualmente está al frente del grupo francés Renault.
El franco-portugués Carlos Tavares, de 66 años, hizo gran parte de su carrera a la francesa Renault, hasta que pasó al grupo PSA (Peugeot-Citroën) y lideró la creación de Stellantis con la integración de FCA (Fiat Chrysler) con PSA, que tiene sede en Amsterdam (Países Bajos). El grupo es propietario de las compañías Opel, Vauxhall Motors, Peugeot, Citroën, Maserati, DS Automobiles, FCA Italy (Grupo Fiat), Française de Mécanique, Stellantis North America (con marcas como Chrysler o Jeep), Stellantis Argentina, y Stellantis Bank SpA En España, Stellantis tiene fábricas en Vigo, Madrid y Zaragoza y es el primer fabricante de automóviles del Estado. En 2023 el grupo facturó en España en 2023 unos 16.600 millones de euros.