Nuestro hijo nos ha pillado manteniendo relaciones sexuales. ¿Qué hacemos?
Se debe evitar silenciar la situación o gritar a la criatura
BarcelonaQuien más quien menos conoce a alguien que le ha contado o ha vivido en primera persona ese día que su hijo o hija entra en la habitación sin avisar y le pilla manteniendo relaciones sexuales. ¿Qué hacer en estos casos? "Es un tema que muchas parejas preguntan, porque no saben cómo actuar. Lo primero que deben tener claro, sin embargo, es que no hay una respuesta única sobre qué hacer", explica la psicóloga, sexóloga y terapeuta de pareja Elena Crespi.
Abordarlo con naturalidad
Según la sexóloga, si siempre se ha abordado la sexualidad con naturalidad en la familia y los hijos saben desde pequeños qué son los genitales, qué son los besos, los abrazos, las caricias y hacer el amor, cuando te pillan siempre se puede decir: "«Estábamos jugando y divirtiéndonos» sin entrar en muchos más detalles porque ellos ya darán por buena la respuesta", apunta. Ahora bien, insiste en que, para que esto ocurra, se debe tratar la educación sexual en casa desde pequeños.
¿Y si la sexualidad siempre ha sido un tema tabú?
La situación cambia si la familia nunca ha hablado de sexualidad en casa y los hijos sólo han oído campanas por algún sitio, pero no saben muy bien qué es. "Depende de cómo te pillen, por ejemplo uno sobre el otro, puede que les parezca una situación poco amorosa y, por tanto, se debe explicar bien, sin hacerlo grande, pero sí dejando claro que nos lo estábamos pasando bien", relata la experta. "En ningún caso debe silenciarse aunque nunca se haya hablado de sexualidad", insiste.
¿Cuáles son los principales errores?
El error más habitual, según la sexóloga, es precisamente el silencio o gritar a los hijos con frases como "¿Qué haces?" o "Tenías que llamar a la puerta antes de entrar". "Si hay gritos o silencios, parece que te hayan pillado haciendo algo muy malo. Hay que abordar con naturalidad diciendo las cosas por su nombre", explica. Crespi añade que estas situaciones son un gran momento para decir a los hijos que los padres también les apetece tener juegos sexuales y que deben respetar su intimidad llamando a la puerta o esperando al igual que los padres también respetarán su intimidad . "Hacer ver que aquí no ha pasado nada y no hablar de ello, hace mayor la incomodidad", ejemplifica el experta.
¿Se debe explicar diferente a un menor de 7 u 8 años que a un adolescente?
Al adolescente hay que darle menos explicaciones siempre que no sea un tema tabú en casa, apunta Crespi. "Incluso puede haber un punto de complicidad y cuando sean mayores lo explicarán como una anécdota divertida", asegura. En caso de los hijos más pequeños se les puede preguntar si quieren que les contemos algo o si quieren hacer alguna pregunta. "El resumen sería: ha pasado esto, no pasa nada, hablamos de ello y lo comentamos y seguimos con el día a día familiar", concluye.