La última oferta del Govern a la CUP: rebajar ratios en educación y limitar el papel de la Brimo en los desahucios
Los cuperos mantienen que las propuestas para su apoyo a los presupuestos están "lejos" del acuerdo de investidura
El Govern no renuncia a intentar convencer a la CUP para que apoye los presupuestos para el 2022. A pesar de que el conseller de Economía, Jaume Giró, ya admite abiertamente que si no hay entendimiento buscará "alternativas" para aprobar las cuentas, las negociaciones siguen en marcha y se prevén reuniones entre las dos partes antes de este fin de semana, cuando las asambleas de la CUP debatirán si hay que enmendar a la totalidad los números de la Generalitat. El ejecutivo espera, entre otras cosas, que los anticapitalistas den respuesta del último listado de propuestas que les hizo llegar para intentar seducirlos. Un documento que se les habría trasladado el lunes, un día antes la aprobación del proyecto de presupuestos, y que plantea rebajas de ratios en educación, revisar el papel de los antidisturbios de los Mossos en los desahucios o la posibilidad de internalizar el 112 y el 061 Salut Respon, según informa la ACN.
La CUP ya ha avisado de que estas propuestas todavía están "bastante lejos" de lo que se había pactado con ERC en el acuerdo de investidura. En declaraciones a Catalunya Ràdio, el diputado Xavier Pellicer ha admitido "avances interesantes" en educación, donde el Govern plantea pasar progresivamente de 25 a 20 alumnos por aula en infantil y primaria, pero ha puesto en entredicho el recorrido real del resto de propuestas. En cuanto a orden público, por ejemplo, el Govern plantea limitar tanto como sea posible la intervención de las unidades Brimo y ARRO en los desahucios, con un nuevo protocolo de trabajo en los Mossos. Sin embargo, el pacto de investidura hablaba directamente de la "no intervención" de los antidisturbios en desahucios de personas vulnerables. Y así lo ha reclamado Pellicer, que instado al ejecutivo a plantear "un verdadero pulso con la judicatura" en los casos de actuaciones policiales bajo mandato judicial. "No es que la intervención tenga que ser el último recurso, es que no se tiene que contemplar", ha asegurado.
Entre las nuevas propuestas del documento trasladado el lunes también habría la posibilidad de internalizar el 112, después de que la ley de acompañamiento de las cuentas -que se aprueba este martes en el consejo ejecutivo- ya contemple hacerlo con el servicio del 061 Salut Respon. En este sentido, el cupero ha criticado la "letra pequeña" de la propuesta del Govern porque -ha dicho- habla de internalizar "la parte de interés sanitario" del 061. Esto hace pensar a los anticapitalistas que lo que se propone es una "internalización parcial" que deje de lado a los trabajadores que están en situación "de más precariedad" como los teleoperadores y gestores.
Para conseguir el apoyo de los cuperos -de momento, en la tramitación de los presupuestos- el Govern también señala en el documento que impulsará, antes de acabar el 2022, los impuestos pendientes de desarrollar de la ley del cambio climático. Y garantiza que empezará por el impuesto a las emisiones de óxido de nitrógeno emitidas por los grandes barcos este noviembre. Al mismo tiempo, sin embargo, Pellicer critica que en la nueva propuesta no conste ni un euro para BCN World y, en cambio, en los presupuestos aprobados el martes se destinen 120 millones. "No ayuda", ha dicho, y ha concluido que el documento recibido el lunes no implicó "ninguna novedad" en la posición de la CUP y que las asambleas acabarán de decantar la balanza este fin de semana.
Aragonès: "Sin presupuestos no hay transformación posible"
En un sentido opuesto al análisis de la formación anticapitalista, el president Pere Aragonès ha asegurado este mismo jueves que el proyecto de presupuestos aprobado por su Govern "implementa" el acuerdo de investidura entre los republicanos y los cuperos. En una conferencia organizada por Barcelona Tribuna, ha reivindicado medidas ligadas a las cuentas como la gratuidad del P2 en las escuelas públicas, los 700 millones para políticas de vivienda -a pesar de que el acuerdo preveía hasta 1.000 millones anuales- o el impulso de la renta básica universal y de una energética pública. "Los presupuestos implementan los acuerdos de investidura. Es mi compromiso en el Parlament y ante la ciudadanía y por eso tienen que contar con el apoyo de la mayoría de la investidura", ha dicho. Y a pesar de admitir que en algunos ámbitos quizás "no se avanza lo suficientemente rápido", ha afirmado que "hay cambios que necesitan tiempo" y que "los recursos son limitados". El president, con todo, ha lanzado un aviso a los cuperos: "Sin presupuestos no hay transformación posible".